¡Rompamos la pista!

3.3K 269 5
                                    

-Con cuidado -Dijo Dylan mientras yo intentaba subir el portón.

No soy muy ágil así que no me resulta fácil hacer este tipo de cosas, más con un vestido, el cual podía dejar a la vista todo y tacones.

Con dificultad y dejando toda mi fuerza y capacidad en ello, logré pasarla y sentarme junto a Dylan. Mi cabello estaba hecho un desastre ahora, y mi respiración era agitada, parecía que tendría un paro cardíaco.

-Sim, ¿Estas bien? -Preguntó Dylan fingiendo preocupación, pero su tono burlesco no logró fingirlo.

Giré mi rostro para verlo todavía con el cabello sobre el, tiré mi cabeza hacia atrás para así quitarlo y dibuje en mi cara una expresión que por si sola decía "cierra la boca, imbécil".

-Ok. Solo preguntaba -Respondió al ver mi expresión y dejó salir una risita.

-Espero que valga la pena. O sino, iré a la cárcel por nada.

-Si amas la adrenalina, te va a gustar.

Volví a verlo llena de confusión, pero él ya no me estaba viendo, ahora sus ojos estaban puestos en el gran patio trasero oscuro, donde no se veía nada. Luego de unos segundos, como si fuera una grada, saltó y calló tranquilamente al otro lado.

Giró, alzó su cabeza y me miró con una gran sonrisa -Has lo mismo guapa.

Cambié mi expresión a una de pánico y simplemente contesté lo que pensé.

-¡Joder, no! ¿¡Estas demente!? ¡Yo no soy un puto ninja como tú!

Dylan estalló en risas sonoras, las cuales me calmaron un poco, pero igual sentía miedo al estar tan alto y con piso cerámico abajo.

-Ok, Ok. Entonces salta, yo te atrapo.

Mis dudas saltaron y simplemente me quedé fijamente viendo al chico castaño, relajado que me esperaba abajo.

-Emmm...

-¿No confías en mí?

-La verdad, tengo mi desconfianza. Técnicamente solo te conozco hace casi 2 días contando hoy y... todavía tengo mis dudas con el tema satanista.

Dylan suspiró con cansancio, estiró su brazo hacia arriba y con su dedo índice, hizo una seña para que fuera hacia él.

-Oh Dios -Dije seguido de un suspiro -Espero que no muera.

Con dificultad e inutilidad, pase mi otra pierna para dejar ambas del otro lado, cerré mis ojos y con mis brazos, me impulse para dejarme caer, aunque sin poder contener un grito ahogado.

En menos de un minuto, ya estaba envuelta entre los brazos de Dylan como si fuese una pluma.

Al fin abrí mis ojos y me encontré con la mirada de Dylan, fijamente viendo mi rostro con una sonrisa de oreja a oreja, totalmente burlesca.

-Mirate. Pareces un pequeño bebé panda asustado -Dijo sin poder contener su risa.

-Estúpido -Respondí simplemente en vos baja, pero de inmediato sentí la brisa del viento chocar directamente con mi piel, de la cintura para abajo.

Mis ojos se abrieron de par en par, mientras Dylan solo colocó una expresión de confusión. Miré directamente mis piernas y noté que la falta, estaba totalmente levantada y dejaba ver mi hermosa ropa interior color negro con fucsia en los bordes.

Mierda...

-¿Que sucede? -Preguntó Dylan llamando mi atención y al momento de dirigir mi vista a él, noté que ya estaba viendo... Todo.

Romances color vino (Sin Corregir)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora