Capítulo 4.

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*Lunes 08:30*

Kathia.

Había sido un duro fin de semana. Entre la mudanza y las fiestas estaba sin ganas de nada así que cogí el uniforme de mi antiguo colegio ya que aún no tenía el de San Angelo.

Me vestí a prisa y me fui al instituto sin rechistar. Entré al aula y todos estaban sentados y yo, bueno yo siempre llegaba tarde. Decidí entrar y sentarme en última fila como siempre. No se cómo pero acabé dormiendo en la clase del profesor Gabbana.

-Materazzi despierte, oiga.

No sentí nada hasta que sentí una mano colocarse en mi hombro. Y respondí como de costumbre cuando me despiertan.
-¿que coño quieres, joder?

- que atienda a mi explicación

-em, si claro. Disculpe no volverá a pasar de verdad.

- Quiero hablar contigo al final de la clase Materazzi.

- Claro. -dije sonriéndole-

- Suerte con el bomboncito, cariño -dijo Daniela acercándose a mi pupitre.-

-Zorra...

Christianno.

Se veía tan tierna dormida y tan sexy con esa camisa blanca con escote y su minifalda que me daban ganas de llenarla a besos y a nalgadas. No podía gustarme tanto esta chica, es mi alumna joder.

-Señorita Materazzi acerquese.

-Profesor yo... -no le permití seguir hablando y le corté. -

- Me sorprende su actitud de hoy en clase. No es esa la chica que e visto en los primeros días de clase. Pero claro, usted a estado todo el fin de semana de fiesta y no a podido dormir -me salió una voz irónica-

Oh dios que me estaba pasando, a caso estaba ¿celoso?

-Oiga le diré una cosa. Que sea mi profesor no le da derecho a que me hable de ese modo ¿entiende? ¿o esque tus padres no te enseñaron educación? Tenga algo presente conmigo Cristianno Gabbana, no me vale que sea profesor, trateme bien y todo será increíblemente perfecto. Y dicho esto, ahí se queda.

Bajo El Cielo Púrpura De RomaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora