El corazón en Boxes (En edición)

Ella es mía

Fernando Alonso P.O.V.

Acabé agotado... no sé si era del masaje, de la carrera o de la tensión nerviosa que me producía el tener a Diana y Dasha en la misma habitación.

Diana se marchó con Fabio para tratar los asuntos de la próxima carrera. No sin antes ofrecerme una toalla, siempre estaba tan atenta a mí... Necesito hablar con Fabio y que me diga quién es ese piloto que la ronda. No puedo evitar sentirme celoso, ¿tanto me gusta?

- Fer... ¿nos vamos? Estoy cansada... - Dasha me sacó de mis pensamientos.

- Sí, dame un segundo que me cambie.

Bajamos la escalera del hospitality hasta salir al paddock. Ya estaba anocheciendo y apenas quedaba gente. Salimos al parking donde se encontraba mi coche y la vi... estaba sola, pensativa.

- ¡Diana! ¿qué haces ahí? - la llamé.

- Oh... estoy esperando un taxi. Aunque el hotel queda cerca, me da miedo irme andando sola... - su media sonrisa me volvía loco... Noté como se sonrojaba. Estaba preciosa.

- Vente, te llevo. ¿Te quedas en el mismo hotel que nosotros no? - lo sabía de sobra, pero me tocaba disimular delante de Dasha.

- No es necesario de verdad. El taxi debe estar al llegar.

- Por favor... me quedaré mas tranquilo si aceptas. Es un país que no conoces. - traté de convencerla.

- Bueno vale, solo porque me ha dado miedo lo que has dicho. - y se sentó en la parte de atrás del coche.

Durante el trayecto los tres estuvimos en silencio. Dasha tecleaba en su móvil, estaba hablando con alguien. No tenía curiosidad por saber con quien lo hacía, y eso me sorprendió. Creo que cada vez siento menos por ella.

Miré por el retrovisor. Diana estaba apoyada en la ventana. Se le veía cansada. Dios... la deseaba tanto. Me volvía loco el pensar que otro hombre la deseara y quisiera tocarla... como quiero yo. Las palabras de Fabio venían a mi mente una y otra vez. "De las escuderías cercanas"... Red-Bull, Mercedes, Williams... son las que está mas cerca de Ferrari... Casi todos los pilotos tienen novia o están casados... pero bueno, ese no es el caso. Yo también tengo novia... Volví a mirar el retrovisor, se estaba quedando dormida. Es tan dulce...

Llegamos al hotel. Dasha cogió su bolso y salió del coche disparada hacia la recepción. Me acerqué a la parte de atrás y suavemente abrí la puerta.

- Diana... - le di un toque en el hombro. Se quejó un poco, pero siguió durmiendo. - Hemos llegado...

- ¿Cómo? Oh... perdón... ¡que vergüenza!...

Bajó del coche y fuimos juntos a la recepción del hotel.

- Sr. Alonso, la Srta. Dasha se ha llevado la llave de su habitación. - me informó el recepcionista. - La suya, Srta. Diana.

- Pues muchas gracias Fer... la verdad que no me hacía mucha gracia volver sola hasta aquí. - jugueteaba con la llave de la habitación. Parecía querer evitar mi mirada.

- No podía dejarte. No conoces este sitio. Así me quedo mas tranquilo yo también.

Los dos nos dirigimos al ascensor. Una vez dentro pulsé su planta, una antes que la mía. Los dos íbamos en silencio.

- Espero que Dasha no se haya molestado... -me dijo con la vista fija en el suelo.

- No te preocupes, seguro que no le importa. Además, ¿No es tu amiga? - me encantaba hacerla enfadar.