Jimin...Háblame

Capitulo 20

**Final**

Jimin caminaba de un lado para el otro, suerte para mí que el sillón esta medio apoyado en la pared dejando un huequito en el que entraba y podía esconderme bien, los veía desde el borde del sillón, Camil estaba nerviosa, lo notaba porque no dejaban de mover los pies.

- ¿Por qué?- dijo finalmente Jimin -¿Por qué terminar ahora?-

- Porque si, porque ya no es lo mismo Jimin... Peleamos por todo, no hay día en el que no discutamos, si yo digo rojo tú dices morado, si yo voy adelante tu vas atrás, si yo trato de ser como tú quieras te enojas, no coincidimos en nada –dijo calmada, sabía que se estaba controlando para no gritar y decir todo de golpe.

- Pero podemos cambiar, podemos intentarlo –dijo acercándose a ella pero Camil se alejo.

- No, eso es lo que no quiero...No quiero cambiar y no quiero intentar, estoy cansada de tratar de ser lo que tú quieres, ya no me siento yo, lamento no ser lo que creías pero no puedo cambiar –lo miro a los ojos, parecía que quería llorar –Tu tampoco estas cómodo, lo sé Jimin, se que intentaste cambiar por mí, se que intentaste dejar la fiesta, el alcohol y las chicas, lo hiciste sin preguntarme si eso era lo que yo quería, si yo quería que cambiaras-

- Lo hice porque te quiero, porque quiero ser mejor para vos –Jimin sonaba dolido.

- Pero no funciono ¿Verdad?... Tu plan no funciono y no lo digo por esa vez que te besaste con ____(tn) –me sorprendí al escuchar mi nombre –Venias siéndome infiel desde antes, no hasta el límite de besarte o acostarte con ellas, pero si coqueteabas... Y lo seguiste haciendo a pesar de que me pelee con mi amiga, y creo que fue peor –dijo con lagrimas en los ojos –Parece que no "Siempre ganas" porque esta jugada te salió mal –soltó una risa amargada, Jimin parecía en estado de shock, estaba más sorprendió que yo.

- Tienes razón –reacciono –Después de lo de ____(tn) espere una semana a que todo se calmara y volví a lo de antes, aunque esta vez si me acosté con ellas –dijo con una sonrisa que fue borrada por una fuerte cachetada por parte de Camil.

- No te dejo porque me hallas sido infiel pero eso no quiere decir que te lo perdone –dijo enojada y se acerco a Jimin hasta que estuvo frente a frente con un mínimo espacio entre ambos –Te dejo porque no te quiero, porque nunca te quise... Lamento si te lastimo pero es la verdad, ya no me gustas... no niego que antes me gustabas, estaba loca por ti, pero todo este tiempo confundí esa fuerte atracción con amor –su voz era suave como si tratara de suavizar sus palabras.

- A pesar de que te fui infiel yo si te quería, solo que no podía dejar de ser yo, lo intente, enserio, resistía dos noches sin fiesta, alcohol y chicas pero luego lo necesitaba... Trataba de convencerme que no debía hacerlo porque te quería pero –fue cortado por Camil.

- Pero el sentimiento no era tan fuerte como para detenerte –Jimin asintió y por unos minutos solo se quedaron mirando a los ojos –Yo también te quiero Jimin pero no de la forma en la que nos venimos engañando, con el tiempo te tome cariño, pero nada más, no hay amor de por medio –Camil lloraba, sus lagrimas caían como gotas, Jimin poso sus manos en las mejillas de ella y limpio sus lagrimas.

- Soy un maldito mujeriego porque me cuesta confiar en la mujeres, me alejo de aquellas que parecen extrovertidas y que les gusta divertirse al cien, por eso me fije en ti... En el instituto parecías tan diferente a todas las que me perseguían...Sí salías a divertirte pero te moderabas, tenias amigas y amigos pero eras más calmada... O eso pensé hasta que comenzamos a salir y te conocí mejor, eras todo los contrario a la palabra calma, vivías la vida, no a cien, a mil, te divertías al extremo y eso me asusto, por eso comencé a enojarme contigo, a tratarte mal, te había idealizado de una forma y, por puro egoísmo, no quería que cambiaras mi idea de ti, te obligue a cambiar y estuvo mal... Lo siento Camil, enserio...Solo quería una mujer que me complemente...Yo soy una tormenta que quiere una mujer que sea paz, todo lo contrario a mí, pero aun así me complementaria porque lo único que necesito en mi vida tormentosa es paz –le sonrió con cariño, y la abrazo.