18

4.4K 584 74
                                    

Di un discurso final para agradecer toda la atención y participación que le brindaron a Jimin.

Luego de acomodar el salón como estaba antes de la actividad, fuimos a mi oficina pues debía llenar los papeles donde decía que Jimin había cumplido con sus 300 horas de trabajo comunal.
Puse la última firma en la última hoja con algo de nervios, esto sería el fin de una etapa y si me quedaba callado, sería el fin para los dos.

¡Piensa rápido, Min!

—Ya está, Jimin— le extendí sus documentos sin verlo directamente.

—¿Eso es todo? ¿No hay nada más?—.

¿Lo sabe? O ¿a qué se refiere? Oh Dios, esto lo complica más. No puede saberlo ¿cierto? No es como si me haya confesado sin darme cuenta... Oh no, y ¿si dije algo cuando me pasé con el vino? No, no no. Voy a entrar en pánico.

—Si Jimin, muchas gracias por todo lo que has hecho— dije en un susurro, desesperado, lleno de pánico y titubeos ¿qué carajo fue eso?

—Bueno, fue un gusto Min...—.

¡No lo digas así! Sueña horrible, parece como si... Dios, ¿qué hago?

Ahora la angustia se apodera de mi, ¿por qué es tan difícil?

—Jimin... Jimin, Jimin— ¿se te rayó el disco o qué, YoonGi?— espera, no te vayas. De verdad yo necesito hablar seriamente contigo—.

—¿Sobre qué, hyung?— inclinó su cabeza hacia un lado intentando descifrar algo más en lo que le dije. ¡QUÉ LINDO! ¡Y ME DIJO HYUNG! ¿QUÉ?

Ok, vamos a calmarnos.
Aclaré mi garganta y el teléfono de la oficina sonó.

—Disculpa, ya vuelvo contigo Jimin— puse el auricular en mi oreja y contesté.

—Señor YoonGi, lo necesitamos en la sala de la Junta Directiva... ¡Ah! Por favor venga con el joven Park Jimin— abrí mucho mis ojos.

Maldición. Seguro se dieron cuenta de lo que me pasa con Jimin...

—¿Señor Min YoonGi? Piden su presencia lo más pronto posible—.

—Si, señorita Cha, informe que ya vamos para allá— terminé la llamada y Jimin me interrogó con su mirada—... Ah, debemos ir con los de la Junta Directiva, en este instante—.

—¿Por qué? ¿Pasó algo malo?—.

—¡No entres en pánico! Sólo vamos, todo estará bien—.

Hablé más para mi mismo que pata Jimin. Caminamos (corrimos) hacía el ascensor y esperamos llegar al piso 60 rodeados de un silencio sepulcral. Yo era un manojo de nervios y Jimin...
Bueno, yo no veía a Jimin.

La señorita Cha nos recibió. Hizo qué Jimin esperara fuera de la oficina mientras, yo tuve que entrar solo.
¡Están todos los de la Junta! No sé, detecto una demanda, un despido, un asesinato.

—Pongase cómodo YoonGi— me recibió el señor Wilson—. ¿Tiene alguna idea de por qué lo hemos llamado?—.

Noo, se los juro, yo me porto bien. No sé qué hago aquí, no sé cómo me llamo.

—No señor, desconozco el motivo—.

—Bueno hace un mes tomaste la decisión de despedir a nuestro Gerente general, ¿cierto? Y no hemos encontrado a nadie que llene todos los requisitos para dicho puesto, ¿o me equivoco?—.

—Tiene usted toda la razón, señor. El despido era necesario, lo especifiqué en el acta que le entregué personalmente— no me despedirán sin qué me haya defendido.

¿Amor? [YoonMin/JimSu]Onde histórias criam vida. Descubra agora