Homework / Namjin.

Tesoros.

- Yoongi... ¿Qué...? - preguntó Jimin extrañado al ver al pálido chico en el umbral de su habitación con más ropa de la que habría estado permitida legalmente para esa época.

Yoongi solo se acercó a la silla del escritorio en la que Jimin estaba sentado, se puso en cuclillas para estar a su altura y lo miro fijo, tan fijo que Jimin pensó que sus ojos quemaban, pero se mantuvo firme sin apartar la mirada.

- ¿Qué se supone que...? - empezó a formular cuando el escozor en sus ojos ya no le permitió seguir el juego, y fue en su primer parpadeo donde también pudo sentir su primer beso, torpe, lento y esperen...¿Qué estaba pasando y porqué Yoongi lo estaba besando?

La cara de Jimin era aún más hermosa con las mejillas sonrojadas, los labios entreabiertos y esa expresión de "¿Quédiablosacabadepasar?", Yoongi quería seguir besándolo, abrazarlo, recordaría para siempre esa expresión en su cara y estaba seguro que la cara de embobado que tenía en ese momento también sería recordada por el menor.

Se puso de pie nuevamente, Jimin seguía con la boca entreabierta, acarició su cabello sonriendo y se dio la media vuelta para salir.

- Espera... ¿Puedo saber que es todo esto?

- Mhhh... Claro - dijo apoyándose en el marco de la puerta - pero no ahora, tengo una tropa de cupidos esperándome afuera - soltó antes de salir para bajar las escaleras.

Jimin no sabia, no entendía, no terminaba de comprender que había sido todo eso y se pellizco el brazo en caso de que fuera un sueño porque enserio todo había sido muy extraño y esperen... ¿Yoongi? ¿Lo había besado? ¿A él? Seguro se había vuelto loco, seguro estaba alucinando porque el calor que sentía en todo el cuerpo no era normal, seguro tenía fiebre porque hasta se sentía un poco mareado.

Entonces sintió como la puerta de entrada se cerró de golpe y se asomó por su ventana para cerciorarse de que efectivamente todo eso había pasado. Y entonces vio como Yoongi entraba en la van de su padre y como Taehyung sacaba la cabeza por la ventana mirándolo a él y levantando su pulgar con esa sonrisa tan suya justo antes de que e vehículo partiera.

Había sido todo real, extraño como todo lo que involucraba a esa familia, pero real y Jimin ya no estaba en su habitación, ni en su casa, Jimin ya no estaba en la tierra, estaba en el cielo pisando nubes, nubes color menta, nubes del color favorito de Yoongi.

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- ¿Y? - le preguntó Namjoon apenas el auto partió, todos lo miraban expectantes.

Yoongi bajó su tapabocas y sonrío de lado, sacó su cajetilla de cigarrillos y se dispuso a sacar uno.

- Ni se te ocurra Min Yoongi - le dijo su padre mirándolo de forma asesina por el retrovisor - no en mi auto y no en ese estado y ya cuenta, que no vinimos de taxi - dijo sacando una carcajada en su distinguido copiloto - ¿Pudiste hablar con Jiminnie?

- No - dijo guardando sus cigarrillos de mala gana.

- ¿Cómo es eso? - se giró Jin sin poder contener su curiosidad.

- Hyung, eres idiota - le dijo Tae a su hermano cruzándose de brazos y sacándole la lengua infantilmente, típico de él.

- Ya hablaré con el - explicó Yoongi - solo lo besé y listo, quiero decir, no había tiempo y tenía que explicárselo de forma clara y concisa, ya saben, una imagen vale más que mil palabras.

Los tres menores lo miraron boquiabiertos ¡Yoongi había besado a Jiminnie!

- Creo que en este caso es "una acción vale más que mil palabras" - corrigió Jin con una sonrisa.