Homework / Namjin.

Karma Pt.1

00.30
Buenas noches Jimin.

00.35
Buenas noches.

00.35
¿Sigues enojado...?

00.38
¿Enserio?

00.40
No.

00.40
Anda, no te hice nada, deja el drama.

Yoongi estaba cabreado, cabreado porque estaba sentado en la sala de su casa con casi diez ovillos de lana para desenredar sobre las piernas, viendo teleseries, escuchando todos y cada uno de los comentarios de Bon Ah sobre porque la protagonista estaba ciega y porque su vida era tan miserable ¿Y quién veía teleseries a estas horas?.

Estaba cabreado porque ¿Porqué Hoseok tenía que ser tan quejica? ¿Porque no podía discutir como un hombre sin tener derrames nasales? ¿Porque sentía preocupación? Bueno, después de todo era su amigo ¿No? . Yoongi estaba sobretodo cabreado por qué Jimin, ese niño... ¿Celoso de Jungkook? ¿Enserio?

00.45
Ok, Yoongi, descansa.

00.44
¿Paso por ti el lunes?

00.47
Nop.

<Vete a la mierda> escribió por impulso arrepintiéndose justo en el momento en el que su dedo se acercaba al botón enviar. No, no podía mandar a Jimin a la mierda porque de seguro después se arrepentiría, aparte... Jimin, por muy idiota que estuviese actuando no merecía que lo tratasen así.

- Si ahora mismo tuviese una cámara - dijo Bon Ah mirando a la televisión - te sacaría un foto y la enviaría al casting del drama. Porque que seguro, corrijo... Doy por hecho de que si el director ve tu cara de drama te contrata para que seas la chica ciega...seguro dramatizas mejor que la actriz esa - comentó.

- No es gracioso.

- Lo es, que Jimin rompa tu coraza de chico duro tan fácilmente lo es, me gusta.

- Que bueno. - dijo seco.

¿Romper su coraza? si, seguro, pensó riendo sin ganas. Si Park Jimin creía que podía hacer con él lo que quisiera, pues estaba muy equivocado.

00.55

Pasaré por ti a las 7.30, te guste o no.

Envió, y se perdió por un momento en el ovillo color naranja que tenía entre sus manos <<¿Quizás debí dejarle el visto?>> Si, seguro eso le dejaba más en claro que él era quien mandaba... joder.

—

La sala era blanca y el lugar silencioso. Hoseok odiaba el silencio pero sin duda lo agradecía en ese momento, su cabeza seguro explotaría y solo quería apagarla por un momento. Había despertado de golpe y el pito agudo que resonaba por todo su cráneo le mareaba un poco. Entreabrió los ojos escanenando el lugar. Blanco, blanco y más blanco.

Cerró los ojos de golpe cuando una descarga eléctrica le recorrió toda cara ¿Porqué sentía como si ésta estuviera hecha de plastilina? Levantó su mano derecha y la tocó comprobando, y nada, todo seguía como de costumbre.

- ¿Hoseok? - una enfermera lo miraba desde la puerta de la habitación con el ceño fruncido - ¿Te sientes mejor?

¿Mejor? ¿Acaso había estado peor? Miró a la mujer  con confusión, abrió la boca para preguntar pero su intención fue interrumpida de inmediato al notar que desde ahí podía ver parte de la sala de espera. En ella, un sillón y extendido a lo largo de toda su longitud, un chico de cabellos castaños cuyos lentes torcidos por la posición le daban un aspecto adorable.