~Capítulo Once.~

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-Supongo que tuvo mal día.-comentó Jack mirándome.

-Tal vez.-alzo ligeramente mis hombros y miro a las niñas- ¿Ya cenaron?

-¡Si! Mi tío David compró pizza.-habla y asiente la menor que se encontraba sobre mis piernas.

-De acuerdo, entonces a ponerse su pijama, en unos minutos les ayudaré a cepillarse sus dientes. Despidanse de Jack.

Miro como ambas se acercan a Jack y él les hace un poco de cosquillas a ambas, se despiden y ellas toman sus manitas para ir rumbo a su habitación.

-Debo irme, necesito hacer algunas cosas en casa antes de dormir. Aparte, sirve que termines de arreglar a las niñas para dormir.-se levanta y tira de mi brazo, levantándome de a poco.

-Claro. Te acompaño.

Camino junto a él rumbo a la puerta principal, él abre la puerta y de acerca a mi, plantando un beso sobre mi frente.

-En estos días hablamos, buenas noches. Suerte con tu jefe.

-Buenas noches, Jack. Gracias por el vestido y pasar la tarde con nosotras.

-Para mi es todo un placer.-veo como guiña su ojo derecho y camina hacia su coche.

Cierro la puerta con llave y camino hacia el pasillo, miro a las niñas colocarse sus pijamas y las ayudo a lavarse los dientes mientras que me platican como estuvo el día de ambas. Me piden que llame a su papá para que pueda dormirlas, así que me dirijo a la puerta de su habitación y toco ligeramente, escucho que me dice que entre y lo hago, cerrando ligeramente la puerta detrás de mi, para después recargar mi espalda con ella.

Miro a Pierre recostado, solamente en pantalón de pijama, dejando ver desde donde estoy su tatuaje de cisne, sonrió internamente al recordar cuantas veces me emocionada al ver fotos de él con el torso desnudo, solo con ver sus tatuajes. Voltea a verme y deja su teléfono a un lado para levantar una de sus ceja.

-¿Qué pasa?

-Las niñas me han mandado por ti, quieren que las duerman. Ellas ya están listas, ya con sus pijamas y dientes lavados, ambas están en sus camas solamente esperándote.-digo sin perder mi mirada en él.

-¿No puedes dormirlas tú? -escucho su tono un poco frío, levantando un poco más de la ceja que tenia levantada.

Suspiro pesadamente de cansancio. Es incoherente que el día de ayer estuviéramos en una discusión, minutos después estuviéramos besándonos que si no fuera de que yo paré, no se que hubiese pasado, pero a todo eso de ayer para que de la nada sea de nuevo frío conmigo.

-Te quieren a ti, supongo que las dejaste mimadas todo le día, solo quieren comenzar y terminar con su papá. Es lógico. -lo ultimo lo digo en un tomo casi audible, haciendo que yo solamente lo escuche.

-Hmm, de acuerdo.-suspira y se levanta para luego caminar descalzo hacia a mi.-realmente me siento muy cansado y esperaba que tu podría encargarte de ello. -mientras me dice me hago a un lado para poder abrir la puerta y salir ambos. Me quedo en el pasillo y una vez que él sale, me decido contestar.

-Como dije, las niñas te quieren a ti, a mi no. Mientras las duermes, aprovecharé para cenar y dormir.-digo mientras miro como camina hacia la habitación de las niñas.

-No es necesario que me cuentes todo.

Dice para luego cerrar la puerta de la habitación de las niñas.

Últimamente es imposible tener un tema de conversación con él, es frío al contestarme o incluso para mirarme. Me imaginaba que después del día de ayer todo terminaría, pero ¿y si está así porque lo rechazé? Aun que, no lo creo, le dije las razones obvias por el cual me había negado y me imagino que con eso no tendrá porque después volver hacerlo, ¿no?
De igual forma, solo estaré en lo que su esposa no esta en casa, me imagino, tal vez y solo cuando ambos salgan y me dejen a las niñas encargadas o puede que cambien de niñera solamente.

La niñera de los Bouvier's.Where stories live. Discover now