Los tres reyes

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Harry subió las escaleras en silencio, sacándose los zapatos antes de hacerlo para subir sigilosamente los peldaños de madera en calcetines. Estaba confundido de porque su padre estaría molesto con su abuelo, cuando había creído que la velada había resultado muy bien. A veces no podía comprender al Maestro de Pociones. Para cuando llego al estudio, podía oír la voz elevada de Severus con tono molesto, aunque no en completo tono enojado.

"Abuelo, ¿cuántas veces debo decirte que no necesito ayuda para encontrar una mujer con quien salir?"

Harry se sonrojo. Ah, así que de eso se trataba. De repente recordó la escena de la que había sido testigo en el jardín de Drusilla y sintió que se ponía colorado hasta las orejas. ¿De verdad quería oír esta conversación? Estaba cansado y quería jugar con Hedwig antes de dormir y sabía que si lo atrapaban espiando—algo que Severus y Augustus consideraban en los más alto de la lista de malos modales—estaría en peores problemas de los en que ya estaba. Por una vez, se inteligente, Harry, y solo ve a acostarte. Ya estas castigado hasta el año nuevo, no quieres hacer las cosas peores.

Así que ignoro la pequeña semilla de curiosidad que susurraba en su oído y se dirigió a su habitación. Paso varios minutos acariciando y jugando con sus mascotas, que no tenían problemas de estar juntas, y luego comenzó a escribir cartas para sus amigos, preguntándoles como estaban pasando sus vacaciones. Iba a mitad de camino de la de Neville cuando cayó dormido sobre su pergamino.

De vuelta en el estudio, Severus estaba mirando enojado a su abuelo. " . . . ¿por Merlín crees que soy un patético idiota que no puede encontrar una mujer y te necesita de casamentero ?"

"Severus, te lo he dicho antes, necesitas salir más. Ahora que Henry esta en Hogwarts la mayor parte del año, puedes finalmente comenzar a tener una vida que no gire alrededor de tu hijo. O tú trabajo. Por lo que vi, tú y la Srta. Miska parecieron llevarse bastante bien." Dijo Augustus con calma. Él había esperado que Severus reaccionara de esta manera, el joven mago era extremadamente delicado cuando tenía que ver con sus relaciones personales, y bastante precavido en dejar entra a alguien tras sus murallas cuidadosamente construidas.

"¡Bueno, sí. . .pero ese no es el punto, abuelo!" protesto Severus, sintiéndose repentinamente incomodo. "Habría invitado a salir a Sandra. . .eventualmente."

"¿Cuando, Severus? ¿Cuándo Henry este en séptimo año? No es mi intención ser pesado, pero no entiendo porque seguías rechazando a la dama cuando esta obviamente interesada en ti."

Severus apretó la mandíbula. Lo último que quería hacer era discutir su vida personal, pero presentía que a menos que le dijera algo a Augustus el viejo mago seguiría insistiendo. "Tengo mis razones."

Augustus los miro profundamente. "¿Como cuáles? ¿Temías ser rechazado como lo hizo Lily antes? Porque déjame decirte de inmediato que eso no va a suceder. Este no es un romance de escuela, La Srta. Miska—Sandra—es una mujer madura que sabe cuando ve a un hombre deseable—"

"¡Abuelo por favor!" Severus comenzó a sonrojarse, sin poder evitarlo. "¡Me haces sonar como una especie de. . .fantasía nocturna!"

Augustus sonrió de medio lado. "¿Y que tiene de malo eso, chico? Como te decía, ya no eres un atolondrado adolescente, eres un hombre muy fino y no me sorprende que ella este tras de ti, Severus. Eres un muy buen partido Maestro de Pociones."

Severus bufo. "Ella no me conoce muy bien. Todo lo que sabe es en que trabajo y que puedo cantar villancicos. .. "se detuvo, horrorizado ante lo que había dicho.

Augustus sonrió. "¿Le has estado cantando villancicos? Con razón esta atraída a ti. Nosotros lo hombres Prince siempre hemos tenido. . . ¿como decía Drusilla? Ah, sí, voces que pueden hacer llorar a una roca. Ella adoraba que yo le cantara."

Dejado en un pesebreWhere stories live. Discover now