Run → [Chanyeol]

026

Acostada sobre su cama con una almohada cubriendo su rostro descansaba un poco más, había despertado hace rato pero no tenia ánimos de levantarse hasta que sintió como el lado opuesto del colchón se hundía, así que perezosamente descubrió su rostro y se giró a ver al intruso.

--Buenos días, mi nombre es Park Chanyeol y es un placer ser tu compañero de habitación.- Dijo este de manera sonriente

-¿Qué hacés en mi cama?-

-¿Dormiste bien?-
-Porque yo dormí de maravillas-

-¿Qué hacés en mi cama?-

-¿Por que estas de mal humor?, después de lo que paso anoche.- Dijo el chico acostado a su lado, susurrando esto último de manera pícara

Sorprendida se levanto rápidamente tanto que sintió marearse. -Anoche no paso nada - Contestó

-Claro que si nena-

-CHANYEOL-

-KIM-

Ambos se miraron de manera retadora hasta que esté se lanzó sobre ella - Nuestra primera discusión - Dijo él besando sus mejillas constantemente.

Cualquier persona que viese la escena diría que eran una pareja de enamorados, y estaría en lo cierto o al menos tan solo un poco.

-Ve a lavarte, hueles a muerto- Dijo este para luego reírse.

Porque si, así era él. Su lado romántico era sorprendente.

- - -

- Tengamos una cita - Dijo este recogiendo los platos del desayuno.

- Tengo trabajo - Contestó de manera simple dirigiéndose hacia su habitación.

- Tendremos una cita - Aseguró él.

- Tengo que ir a trabajar - Respondió ella de manera autoritaria asomando su cabeza por el marco de la puerta.

- He llamado a tu trabajo y te han dado el día libre -

- Así que tendrás una cita conmigo quieras o no -

Cerró los ojos y tomó el puente de su nariz para comenzar a contar hasta diez.

- No saldré de aquí - Aseguró

- Pues, de acuerdo, nuestra cita será dentro del departamento - Dijo él sonriente dándole la espalda para así lavar los trastes.

Realmente era un caso perdido, se acostó sobre su cama y cubrió su rostro con su antebrazo de manera sonriente, estaba feliz de verlo nuevamente, aunque le sacaba de quicio y molestaba constantemente, mentiría al decir que no se emocionaba de verlo, tenían muchas cosas que decir y muchas cosas que aclarar, pero la noche anterior las palabras no quisieron salir, solo eran ellos dos de pie frente a frente, mirándose como si fuese la primera vez en mucho tiempo, y de hecho si lo era, pero añoraban tanto aquel momento, que no quisieron arruinarlo diciendo cosas tontas.

Abrió sus ojos al sentir como alguien acariciaba su cabello y sonrió cuando lo vio allí tarareando una canción.

-Mi niña, tenemos mucho de que hablar- Susurro este.

Ella solo asintió y el silencio reinó el lugar. Ninguno sabía por dónde empezar y se sentían un poco nerviosos de lo que se diría en aquel lugar.

- ¿ Por qué nunca llamaste? -

Él le miró entristecido y entrelazo sus propias manos - Pensé que estarías bien sin mi -

-Eso suena algo egoísta-

-Lo sé- Respondió él.

- Pero lo sentí así, no es como si fuera la primera vez que alguien no me quiere en su vida-

- Yo nunca dije eso - Susurro ella tocando su mejilla delicadamente.

Él le miró y luego bajo la mirada al ver la manera en que ella lo miraba.

- ¿ Por qué te fuiste ? -

- Nunca llegaste -

- ¿Esperabas por mi? -

- Siempre lo hice - Respondió ella dulcemente rebuscando en su mesa de noche la pequeña nota.

Él sonrió ante la respuesta y busco su mano para entrelazarla con la suya.

-¿ Como llego esto hasta el sofá ? - Preguntó mostrando el post-it.

-Pensé que me había deshecho de todas ellas - Susurro el confuso.

- ¿Habian más? - Preguntó, a lo que recibió un si como respuesta.

Le dio curiosidad saber el contenido de todas ellas y aun más por saber como había llegado eso allí.

- Venia aquí cada día y dormía en tu sofá - Susurro él interpretando su mirada confusa.

- Era lo único que me hacía estar junto a ti, hasta que deje de venir -

- ¿ Por que dejaste de hacerlo? -

- Me lastimaba no verte aquí y me dolía el saber que estabas en otro lado con otro chico- Dijo este en un susurro cabizbajo.

- y me dolio aun más al ver que no notaste mi presencia en el aeropuerto y cuando ese chico corrió a abrazarte, un chico que no era yo- Al escuchar esto le abrazó fuertemente y beso su cabeza de manera tierna.

- Veo que llevas puesto el brazalete - Susurro ella luego de un par de minutos.

El sonrió y asintió de manera alegre - Me gusta mucho - Comentó.

- Aunque aún no se de donde supiste mi dirección, no recuerdo habertela dicho -

- Digamos que tengo un amigo detective - Dijo ella de manera simple.

Él le miró confuso y un poco sorprendido - ¿Acaso le pediste que me investigará? - Se noto molesto

- Solo le pedí que buscará tu dirección, solo eso - Comentó ella nerviosa.

- No lo vuelvas hacer - Dijo él levantándose y dirigiéndose hacia la puerta.

- ¿ Hay algo que no quieras que sepa ? - Preguntó confundida.

- Mi vida no es algo que te importe - Respondió cortante.

Ella bajo su mirada triste - ¿Y nuestra cita? - Preguntó pero no había nadie que respondiera, él chico se había ido dejándola sola en aquel lugar arrepentida y confundida.

Las cosas que sucedieron en el pasado, tienen mucho que ver con lo que somos ahora.