IX

1.9K 285 28
                                    

     Tic-tac , escucho  las manecillas el reloj a lo lejos,  muy lejos, inclusive diría  que se están alejando,  ellas quieren escapar de mí.

    –Despierta –la voz me hace tocar tierra,  siento mi cama sosteniendo  mi cuerpo, una mano agitando  lentamente  mi hombro, la otra moviendo un mechón de pelo de mi rostro.

    No tengo  ni fuerzas para pedir las explicaciones mínimas  de que hace aquí  como si nada,  tampoco estoy segura si quiero pedirlas. No podía dejar de mirarlo como si estuviera a segundos de contarme el secreto más  grande de la historia.

   –Tranquila –toco mi frente con su mano,  ¿y si estoy delirando?

   –Wa... –sus ojos se clavaron en mí  haciendo que mis palabras se frenaran, parecía estar esperando algo. Pausa,  ya estoy volviendo en sí, y creo seriamente  que debería  llamar a la policía, era mejor opción de seguirlo mirando como idiota–. Tú –lo apunte con mirada acusadora, soltó una risa de esas suyas que dan miedo, hasta más  miedo de lo normal me atrevería  a decir.

    –Te escucho –dijo sosteniéndome por los hombros y acercándose milimétricamente a mí, creo que hasta aquí  llegue, debí  haber escapado,  la historia  que le contaría  a mi hijo después  de todo no era tan mala.

   –No es que, yo tenía una duda, digo... ¡¿Que mierda haces aquí?! –al ver a mi alrededor las cosas no mejoraron, para nada, empeoraron, todas mis cosas esparcidas en el piso o bien tiradas sobre algún mueble, parecía  que había acabado de pasar un tornado–. Espero que  tengas una bue...

   –Tienes algo que es mío –su voz sonó algo molesta.

   No puede estar hablando en serio, quiere hacer que lo mate para no tener que pagar él  en la cárcel por matarme.

    –Algo tuyo... ¿Aquí? –no tenía la fuerza en estos momentos para patear su cara pero me lo estaba imaginando mentalmente  y servía  como consuelo,  no entendía  ni una palabra de lo que dijo.

   –Sí –parecía  que su molestia iba aumentando a velocidades extremas.

    –No tengo nada tuyo –me zafe de su agarre, a lo que dio resultado que cayera tumbada a mi cama nuevamente,  no tenía  fuerzas–. ¿Que hora es? –había  luz,  mucha para ser de noche como pensé en primer instante.

    –Son las seis –no pueden ser las seis, imposible, no podía haber pasado tanto tiempo,  genial, ya había  empezado a faltar a clases, pero a quién  le importan las clases cuando hay un psicópata  junto a ti exigiendo que le devuelvas algo suyo–. Tienes algo que es mío.

   No es tuya.

   –Es mía –no lo pensé solo lo dije, tampoco entendía  lo que yo misma estaba haciendo, estaba defendiendo algo que era mío, sin saber que ni el motivo.

   –¿Que has dicho? –de los ojos de Wade se estaban produciendo erupciones volcánicas incontables, seguramente  ya se había decidido a matarme.

    –No tengo nada tuyo–-junte todas mis fuerzas y logre pararme de la cama buscando algo en que apoyarme, me encontré con la pequeña mesa de centro que logro estabilizarme.

    –¿Donde esta? –se estaba acercando a mí, en cada uno de sus pasos podía  sentir su enfado.

   –No sé  de que hablas, tienes que irte, me estas asustando, voy a gritar, entonces vendrán los vecinos,  les diré  que eres un loco que me mantuvo todo en día  encerrada  en contra de mi voluntad y que me querías... –sus labios estaban en los míos, haciendo que estos se callaran al instante,  mi cuerpo se relajo como por arte de magia, sus manos me rodearon por la cintura, acercando mi cuerpo al suyo lentamente , mis labios seguían los de él,  no querían perderlos...

    ** Inicio flashback **

  –Alex... En serio,  lindo gesto , solo tengo una duda, ¿que es esto? –trate de no reír pero no podía  evitar pensar para que se suponía  que me iba a servir.

   –Es tu comodín,  deberías  agradecerme, loca –parece que la cosa era seria.

   –Si me explicarás sería mucho mejor sabes...

   –Si te explicara ya no servirá –me dio una sonrisa malévola– Y no quieres  quedarte sin comodín.

   **Fin flashback **

   Wade se separo de mi lentamente, separándome de mis recuerdos de golpe, con su mirada directamente a mis ojos, sintiendo que mis mejillas ardían, seguramente él ya lo había notado.

   –Tienes que dármela –dijo sacándome brusco nuevamente  de mis pensamientos.

    –¿Que es todo esto? –la que realmente tenía  que pedir cosas aquí  era únicamente yo,  unas buenas explicaciones no me vendrían para nada mal.

    –Si me dices donde esta te diré todo –me asustaba ese todo, que se supone que es todo–. Tienes que dármela, ahora.
   
   –Vete, ahora –su cara de furia y desesperación iba terminar haciendo que  me confundiera aún más  de lo que estaba.

    Realmente no es como si entendiese lo mínimo de lo que esta pasando,  pero el plan en estos momentos es mantenerse casual,  confirmado, no entiendo el sentido de mi plan. Por favor que este soñando,  aunque esto entraría en la categoría  de pesadilla,  se suponía  que esto era normal, me parece que no.

   –Tienes que dármela –se dio media vuelta y se fue dando un portazo, delicado, pulcro...  Maldito escandaloso.
     
      Tengo que hablar con Alex ahora ya, antes de que se me olvide o yo que sé, estoy casi segura de que él  sabe lo que esta pasando,  después de todo dijo que me iba a explicar.

     Luego de unos minutos mirando el techo desde mi cama ya estaba recuperando mis fuerzas, además  tuve más tiempo de idear una pequeña trampa, según yo misma era excelente. Como hace unos días  Emilio había entrado a mi departamento "por arte de magia", creo que no es tan mala idea salir de dudas.

     Saque la nota que había escrito hace unos instantes y la deje en el centro de la mesa.

    "Si lees esto no te preocupes no estoy porque salí con Wade, llámame luego"

   Si, quería ver arder el infierno,  bueno en realidad no, iba ir donde Alex, pero si Emilio llegara a leer esta nota significa  que esta entrando a mi departamento de una forma que me tendrá que explicar muy bien porque cerré muy bien todas las ventanas y puertas.

   Tome mis llaves y salí,  ahora que iba bajando rápidamente por las escaleras me estaba dando cuenta si era estúpida o que,  claro iba ir a hablar con Alex, pero para hablar con él  tenía  que saber donde mierda estaba, para agregarle el bonus de estupidez había dejado mi celular, esta bien no era para tanto, solo ir a buscarlo.

    Entre mis retos a mí misma divisé  a Emilio entrando al ascensor, creo que no soy la persona con más  suerte en el mundo, aprenderé a vivir con ello, lo del celular queda descartado,  tendré que encontrarlo de otra forma, porque yo no pienso subir, voy a encontrar a Alex.

Te seguiré hasta el infierno [TSHEI]Where stories live. Discover now