babysitting ꒰ 少し꒱ ♡︎ namjin ₊˚ˑ

04

-¡Quiero usar la camiseta rosa!-exclamó Jungkook corriendo de su padre, quién como todas las mañanas intentaba vestirlo luego de una larga ducha llena de espuma y gritos del pequeño, había estado intentando ponerle una camiseta de Iron man (Que según él era su favorita), pero el pequeño se había negado corriendo y gritando.

-¿La rosa? Pero si la odias –Namjoon rió divertido mientras rendido buscaba entre los cajones la prenda que su hijo le había pedido.

Jungkook negó con la cabeza y sonrió muy alegre, sentándose frente a su padre y estirando sus bracitos al cielo lo más que podía mientras que Namjoon le ponía la camiseta.

-El color favorito de Jin hyung es el rosa, así que le gustará mi camiseta si es de ese color.

-¡Oye! Mi color favorito también es el rosa y no usabas la camiseta antes.

-¡Eso no vale! ¡Tú eres mi papi, así que ya me quieres!

- Así que no vale ¿huh? –Namjoon sonrió y atacó al pequeño Jungkook con cosquillas, haciéndolo retorcerse y patalear de la forma más adorable a la vista de su orgulloso padre.

Cuándo el pequeño ya se quedaba sin aire, Namjoon lo dejó en paz y permitió que se recostara respirando agitado, sonrió y fue con él para abrazarlo y peinarlo un poco para la guardería.

-¿Te cae muy bien Jin hyung?

- ¡Hyung es genial! ¡Quiero que se quede conmigo para siempre!

Namjoon rió por lo bajo y asintió, pensando en que de hecho él también quería lo mismo.

Esa última semana Jungkook había estado algo resfriado, por lo que no había estado asistiendo a su guardería y Namjoon había tenido que pedir la ayuda de Seokjin desde mucho más temprano, en ese mismo momento, ambos, padre e hijo esperaban pacientemente la llegada del niñero para así el mayor poderse ir a trabajar.

-¿Jin hyung cocinará hoy también?-preguntó Jungkook sentado en las piernas de Namjoon.

-Si... estoy empezando a sospechar que no te gusta como cocino yo –Namjoon entrecerró los ojos y Jungkook hizo un puchero.

-Papá es muy inteligente...

...

-Amaneció muy enfermo Jin, no sé si sea bueno que vaya en estas condiciones a la guardería- habló Jimin muy preocupado mientras sujetaba con fuerza su mochila.

-Tienes que irte a la universidad Jimin, y yo debo ir a trabajar, no podemos dejar que se quede en casa de nuevo.

Taehyung había despertado ese día con un serio dolor en el pecho, su semana había sido terrible entre tos y vómito, y Jin estaba al borde de las lágrimas por la impotencia que sentía.

-Podría quedarme aquí hoy...

-Jimin, has faltado toda la semana, no puedes arriesgarte a perder la beca- debatió Jin sentándose en la cama y dejando que su hermano lo estrechara en un fuerte abrazo, tan ensimismado estaba en sus problemas que ni siquiera noto que su pequeño hijo había entrado a la habitación segundos atrás.

-Yo puedo ir papi, no te preocupes- aseguró el pequeño Taehyung con los ojos hinchados y rojos por la falta de sueño, regalándole a su padre una de sus hermosas y singulares sonrisas.

Eso, lejos de calmarlo, solo hizo a Jin sentirse más miserable, tomó en sus brazos a Taehyung y besó su frente con cariño.

-¿Estás seguro bebe?