Malas noticias

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- ¡Ginny están tocando la puerta, debe de ser tu novio!

- ¡Satina abre por favor, diles que me esperen unos minutos!

Era normal que la pelirroja se quedara dormida en las mañanas y más cuando se había pasado la noche recordando su primer baile con Harry, no podía creer que antes habían tenido el banquete del torneo de los tres magos, fiestas en Gryffindor, navidades, fiestas de halloween y la boda de Fleur y Bill y apenas ahora habían bailado juntos pero si que valió la pena la espera, aunque Harry no era muy experto bailando, la sensación de sus cuerpos,el tacto, el hablar había sido maravillosa.

- ¡Ginny no es Harry pero te dejaron unas flores!

- ¿Que?

La pelirroja salió del baño solo cubierta por una toalla y se apresuró a donde su compañera, Satina Spike estaba en el centro de la habitación y a su lado un enorme ramo de rosas rojas que le recordaron las flores del regalo que Rospigliosi le había hecho en Hogwarts.

- ¿No viste quien lo dejó?

- No Gin, cuando abrí la puerta solo estaba esto, ¿no sera de Harry?

- No lo creo, nunca me da flores, además Harry siempre se hace notar y por todo lado estaría su sello, si fuera de el lo sabríamos al instante.

Ginny recordaba los muchos regalos que su novio le hacia durante su ultimo año en el colegio, siempre se hacían notar, Horus traía un paquete, siempre en publico o anuncios en el periódico, este no era su estilo.

- Tiene una nota

Satina tomó la nota y la leyó en voz alta para que su amiga pudiera escucharla.

"Cada día te veo más hermosa, más sonriente, más radiante, me encantaría que aceptaras esta invitación al restaurante de la famosa torre Eiffel, un sitio muy romántico, puedo aprovechar para enseñarte los mejores sitios de París, Ginny yo se que tienes novio pero eso no es un impedimento para mi, BR"

- PERO QUE....... ¿Como se atreve a decir eso, quien cree que soy?

- Pero amiga no me vas a negar que es muy romántico, deberías aceptar solo por conocer, además no me has dicho quien es el que te invita.

- No Satina, yo no necesito que nadie me esté haciendo este tipo de invitaciones y regalos, para eso tengo Harry y con el me basta, el es mi mundo, mi centro, mi todo, ahora mismo le enviaré una nota a Bethlem, deberá aprender a respetar o sino tendré que hechizarlo.

- ¿Quien debe aprender a respetar o sera hechizado?

Antes de que Ginny pudiera continuar hablando, Harry seguido por sus dos inseparables amigos entraba a la habitación desde el pasillo.

- ¡Harry amor! Lo siento aun no estoy lista - Ginny le dio un acalorado beso de bienvenida a su novio y después abrazó y beso en las mejillas a su hermano y su mejor amiga - No te preocupes amor, es solo alguien que se ha propasado invitándome a una cita pero yo lo solucionare. - Con un movimiento de varita, las flores desaparecieron. - ¿Será que tu y mi hermano nos pueden esperar a Herms y a mi en el lobby unos minutos?.

- No hay ningún problema de mi parte enana, que no se de cuenta mamá que te vimos así o se enoja.

- Ron no molestes, esperanos a tu hermana y a mi afuera junto con Harry, Ginny debe cambiarse, diez minutos.

Ginny y Satina le contaron todo lo que acababa de suceder a Hermione que también llegó a la conclusión de que aquel presente totalmente indeseado era de parte del italiano ex profesor de Hogwarts y amigo de la pelirroja. La pelirroja se puso una ropa cómoda al no saber para donde les llevaría su amado novio y salió junto a su mejor amiga al encuentro de los chicos.

Harry Potter, viviendo tras la guerra.Where stories live. Discover now