12.

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_____ Briefs.

—¿Oh...? ¿Estás bien? —Me pregunta mientras pasa su mano frente a mis ojos.

—¿Eh...? ¡Oh! ¡Sí! ¡Estoy bien!.— traté de sonreír.— Solo un poco confundida.

—¿por qué? —Aprieta mi mano.

—¿Solo me llamó para que fuera su amiga?

—Sí, ¿está mal?

—No. Claro que no. Solo... me sorprendió.— sigo confundida.—¿Y qué deberíamos hacer si somos amigos?.— no me soltaba la mano.

—¡Hay que jugar!

—¿Jugar?

—¡Sí! ¿Está mal?.— dudó.

—¡Por supuesto que no!.—Dice Kaio Shin. — Ella, ______, está profundamente feliz por tener la oportunidad de ser su amiga. 

—Guarda silencio. —Dice con una voz completamente distinta a la de hace unos segundos. Un gran escalofrío me recorre toda la espina dorsal. Eso da miedo. —¿Qué es lo que quería decir, ____-San? —Su voz dulce vuelve.

—Mmm... Por favor, no me gusta que me llamen así.

—¿Y cómo te llamo?

—aa..No lo sé.

—¡_____-Chan! —Escucho un "¿Oh...?" de parte de Whis y Vados. 

Sinceramente nadie me llama así a excepción de papá cuando me molesta o, de vez en cuando, mamá.—Sí, está bien.

—¿Y cómo me llamarás a mí?

—emm.. ¿Zen-Chan?¿te parece?

—¿¡Qué?! —Exclaman mis acompañantes. Y el gran sacerdote ríe. Mientras que los guardias de Zeno aparecen enfrente de mí, haciéndo que me caiga de espalda y suelte su mano.

—¿¡Cómo te atreves?!

—¡Déjenla en paz! o los elimino. —Ambos desaparecen y vuelven a su lugar. —¿Zen-Chan? Me gusta. Entonces, ¿A qué quieres jugar?

—Eh... No lo sé.— aún estaba aturdida pero traté de recuperar la compostura, levantandome.

—¡Ya sé! ¡Vamos!

Zen-Chan me toma de la mano y me guía por el lugar; desaparecemos y aparecemos en un lugar distinto. Me doy la vuelta para ver a mis acompañantes, pero no están; él dijo que se quedaron con el gran sacerdote.

En la habitación a la que llegamos había una mesa redonda y unos cojines. Cada uno se sienta en un cojín, frente a frente, y comenzamos a conversar.

—¿Y qué haces aquí, en este lugar?

—Oh... Casi siempre salgo y veo que los dioses destructores hagan bien su trabajo.

—¿Y hay alguno que actualmente no lo haga como debe?

—Sí. Son 2.— su voz se escuchaba neutra.— creo que deberían ser destruídos.

—¿2?.— Alcé una ceja.— ¿De qué universo?

—El 7 y 6.

—¡Eso es culpa mía! —Los defiendo de inmediato.

—¿Culpa tuya?.— me mira confundido.

—Sí. Lo que pasa es que desde que conocimos a Bills y a Champa, siempre los invitamos a mi casa. Mi mamá los lleva a restaurantes para que coman y eso les quita tiempo de hacer sus labores de dioses, creo yo.

—¿Por qué lo hacen?

—Es que dicen que si no les damos de comer, ellos nos destruirán... a nosotros.

él asiente comprendiendo a lo que quería llegar.

Hablamos durante mucho tiempo. Zen-Chan me dijo que él existe desde que el mundo y todo, literalmente TODO, se creó. Y desde siempre ha estado vigilando a los dioses destructores.

También hablamos sobre el torneo que Goku le ofreció. Él pensaba en hacerlo pronto, ya que estaba ansioso.

Después de un rato, volvimos con el resto. No me había dado cuenta de en qué momento los guardaespaldas de Zeno nos siguieron. Nos despedimos y nos fuimos.

—Eso fue fácil. No creí que fueras tan sociable.

—Incluso yo me sorprendí. Pero bueno... hice lo que pude. —Me encogí de hombros.

Luego de un segundo, llegamos a la Tierra, junto con el Kaio Shin-Sama, ya que Bills quería hablar con él.

____  Y Trunks Briefs | 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora