49.

727 64 5
                                    


_____ Briefs.

—Dime, ¿guardaste semillas del ermitaño en tu chaqueta?

—Ah... —comencé a revisar cada uno de mis bolsillos, pero en ninguno había algo. Estaban vacíos. Hasta que toqué los bolsillos de mi pantalón. Los que estaban en los tobillos. —¡Encontré algo! —lo saqué y me decepcioné por completo.

—¿Un botón? ¿Qué haces con un botón? —dice Mamá.

—¡Invocar a nuestra salvación! O a nuestra perdición... Cualquiera es posible. —me encogí de hombros. —Bien... No estoy segura de que funcione, pero... Vamos a rezar.

Apreté el botón y una luz en el cielo apareció, y de ella apareció Zeno-Sama.

—¿Y ese quién es? —bufa Mirai yo mientras pone sus manos en sus caderas con el ceño fruncido.

—¡Zen-Chan! —corrí hacia él mientras que tiraba el botón, el cual no sé dónde cayó. —¡Funcionó! —Lo abracé, mientras que me arrodillaba para alcanzarlo. —¡Viniste!

Él se separa de mí. —¿Quién eres? ¿Me llamaste? —de acuerdo... Eso dolió.

—Sí, te llamé. Soy _____. —sonreí.

—Uhm... —se gira para mirar el lugar en el que nos encontrábamos. —¿Qué es esto? Es terrible. No hay nada. —Me señala con el ceño fruncido. —¿Tú lo hiciste?

—¡Eh...?! ¡No! ¡No! —Moví mis manos en forma de negación, igual que mi cabeza. —¡Fue él! —Señalé el cielo. Zeno-Sama mira al cielo.

—Ouh... Qué molesto

—¿Verdad que sí? —sonreí, y él asiente. —¿No crees que puedes hacer algo para que no moleste más?

—Cierto. Un mundo como este... —susurra y pone sus manos a los lados de él, sus manos brillan.

 "¡Va a destruir todo! ¡Sal de ahí!" Yo me levanté de inmediato.

—¡Mamá! ¡La máquina! ¡Vamos! ¡Rápido! —grité.

—¿Qué? ¿De qué hablas?

—¡La máquina, mujer!

Zeno se eleva aún con las manos a los lados.

—¡KaioShin-Sama! ¡Gowasu-Sama! ¡Salgan de aquí, por favor!

—¡Sí! —ambos desaparecen.

Comencé a retroceder. Simplemente me daba miedo estar a un lado de Zeno si es que llegaba a destruir todo.

Mamá prendió la máquina, y todos subieron, a excepción de Papá y Goku, quienes iban afirmados en las patas de la nave. Yo subí de las últimas, y la nave comenzó a elevarse.

—¡Yo! ¿¡Qué pasa con él?!

—N... no lo sé.

—¡Un mundo como este debe desaparecer! —una luz comienza a hacerse presente en todo el lugar, y nosotros desaparecimos e inmediatamente aparecimos en el patio, donde nos esperaban; Chichi, Goten, Trunks y sus amigos, Krillin, Bulma del futuro y las niñas: Karroto y Bura.

Al comenzar a descender, Goku cayó al piso, y Papá bajó con total normalidad.

Trunks, Karroto, Goten y Bura venían corriendo a recibirnos.

—¡Papá! —mis hermanos se acercaron a Papá.

—¡Papá! —y Goten y Karroto igual, solo que ellos se abalanzaron contra él.

—¿Estás bien?

—¡Papi! —Bura le abrazó el pie a Papá.

Nosotros abrimos la máquina del tiempo y comenzamos a salir. La primera fue Mamá, y mis hermanos corrieron hacia ella. Trunks, Mi yo del futuro y Goten bajaron casi a la par, y yo de las últimas.

—¡hermana! —chilló y se lanzó contra mí, haciendo que perdiera el equilibrio y cayera al piso, pero eso no la detuvo de poder abrazarme, ya que no se quitaba.

—¡Fuera, niña! —gruñía, pero ella no salía.

____  Y Trunks Briefs | 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora