Sunken Ship |Larry| A&O

doce

"¿Puede el amor romper las barreras naturales y biológicas del ser humano?"

Louis gruñó alto.

"¡Harry, levántate, ya está el desayuno!"

Abrió los ojos con un profundo suspiro. Parpadeó dos veces y tragó, sentía la garganta seca. La almohada que había abrazado en la noche ya no estaba, sentía el brazo adormecido por haber recostado su rostro sobre él. Observó sus manos, la familiar luz entrando por la ventana iluminaba su suave y blanquesina piel. Tocó su rostro, sus labios suaves, su cabello alborotado, su cuello. Dejó ir todo el aire que había contenido. Respiró lentamente cerrando los ojos fuerza y contó hasta diez.

Uno... Dos... Tres... Cuatro... ¿Esto es un sueño?

"¡Harry!"

Volvió a abrir los ojos ante los gritos de su madre. Suspiró, labios entreabiertos.

¿Qué carajos?

Se incorporó lentamente, incómodo por no haber dormido con ropa de día. La almohada estaba en el piso. Se refregó los ojos, el olor fuerte entrando a través de sus fosas nasales, expandiendo sus pulmones, embriagandolo, puro, vivo.

Acarició su abdomen, plano, sin sensación alguna. Sus muslos lisos, sin marcas. Se levantó y caminó hacia el espejo frente a su cama. Observó su cuerpo de pies a cabeza, como un Déjà Vu. Suspiró.

"¡¿Harry?!"

"¡Ya voy, mamá!"

Se puso ropa limpia, aún algo adormecido y distraído. Pellizcó sus brazos unas cuantas veces, pero nada pasaba.

Salió de su habitación y observó la puerta de su hermano mayor cerrada. El olor volviendose intenso de repente. Frunció el ceño por cuarta vez desde que despertó.

Bajó las escaleras con cuidado, temiendo desmayarse.

"Buenos días, dormilón." Saludó Gemma, causando la riza de Lottie.

Su familia se encontraba sentada al rededor de la mesa desayunando café con tostadas y mermelada de frambuesa. No le gusta esa mermelada. Fue hacia el refriferador para tomar su mermelada de arándanos, pero al abrirlo no la encontró. Oh.

Se sentó junto a Lottie y observó el asiento vacío de Louis.

"¿Hazz? ¿Te pasa algo? Parece que viste un fantasma, cariño." Anne lo miró preocupada.

Negó sin mirarla.

"¿Dónde está Louis?" Preguntó aunque ya sabía la respuesta.

"Está en su habitación, en celo." Respondió Des, sin apartar la vista del diario.

"¿Qué es eso de estar en celo? ¡Todos hablan de eso y no entiendo!" Resopló Lottie.

Déjà Vu.

Todos se quedaron en silencio, a excepción de Gemma, que lanzó una fuerte carcajada.

"Luego te lo explicaré, Lots." Dijo su madre.

"Oh. Okay." Respondió simplemente.

"Hazz, ¿Cómo te fue anoche?" Preguntó Gemma, todos prestandole atención al menor.

Harry no le prestó mucha atención. Sus pensamientos estaban lejos de la conversación hasta que escuchó a su hermana.

"Eh... Bien." Respondió simplemente.

"¿Bien? ¿Solo eso?" Preguntó Gemma incrédula. "Vamos, cuéntanos. ¿Qué hicieron? ¿Se besaron? ¿Es tu futuro alfa?" Descarada, la muchacha disfrutaba poner nervioso a su hermanito. "¿O acaso Dylan no es digno de tí, Hazz?"