Capitulo 11

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-No te soltare- Myungsoo se aferraba aun mas a la mano de Sungjong, lo veía suplicante a los ojos, no dejaría que se fuera hacia el lago. Lo perdería.

Aquella presencia era tan fuerte y sin embargo; Jiae tuvo razón, nuevamente. Se conformó con tenerla a ella y fue a fragilizando su agarre, en unos cuantos segundos, el castaño ya estaba fuera del lago. Pero él aun seguía consternado, enojado y triste; no podía dejar de llorar.

Esta vez fue L.Joe quien se acerco primero al castaño y lo abrazó, un abrazo correspondido. –La rescataremos-. Era la primera vez que el rubio sentía una sensación tan cálida, a pesar de que el castaño se encontraba mojado.

-Toma mi chaqueta- había propuesto el pelinegro; quien no se quiso quedarse atrás en el consuelo del menor.

De nuevo esa gran tensión entre L.Joe y Myungsoo, ambos se sentían amenazados por la presencia del otro. En un principio de su vida, el rubio podría deprimirse por estos actos, pero ahora ha cambiado, y a pesar de que trata de ser prudente al no enojarse con facilidad por este tipo de cosas, no dejaría de pelear, por el menor cariño del castaño. Por parte del pelinegro, es que si en su vida le habían enseñado a ser humilde y no ser egoísta, estaba seguro que no le gustaría por nada, tener que compartir el amor por Sungjong. A los dos les había bastado solo un momento para haberse enamorado del castaño; aunque a uno le tocaba a un dudar por sus sentimientos.

El rubio pudo escuchar el crujir de una hoja, volteo rápidamente y se dio cuenta que Ricky se encontraba a unos pasos del lago, mostrando un rostro en estado de shock. Apenas vio un pequeño paso del menor para asustarse.

-¡No lo hagas!-

En un abrir y cerrar de ojos L.Joe estaba encima de Ricky, pudo llegar a él antes de que diera un paso más hacia el lago. Se aferró tan fuerte a él, que aunque se tratara de un alma, podría sentirse la resistencia tan eminente. –No actúes tan precipitadamente- el rubio miró fijamente a Ricky.

-Ella tiene que volver-

-La traeremos de vuelta, pero de nada nos sirve actuar sin pensar, tenemos que razonar la situación a la que nos enfrentaremos-

Los dos se levantaron del suelo como pudieron.

-Mírame-le pidió el rubio-Se que es difícil de asimilar lo que acaba de pasar, pero necesitamos de toda la información posible y tú eres el que nos puede ayudar a regresarla, si te vas, nos dejarías cegados-

-L.Joe tiene razón- la voz de Sungjong los sacaba de aquella privacidad, acompañado de Myungsoo detrás de él. –Te necesitamos aquí-aun se podían ver algunas lagrimas en el rostro del castaño.

Ricky asintió, las palabras de los demás lograron hacer hincapié en su mente. Necesitaba estar de vuelta en sí, para poder ayudar a traer de vuelta a la fémina.

De repente un celular empezó a sonar, tres de los cuatro chicos empezaron a buscar entre sus ropas, pero en el caso de L.Joe y Myungsoo, sus celulares no eran los que sonaban.

-En el suelo- Ricky señalaba. Era el celular de Sungjong el que sonaba y el que había caído al suelo después de haber sido jalado.

El castaño corrió hacia el móvil pero no logró contestar a tiempo.

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No podría creer que tendría una cita con Niel. Si tanto se guardaba su amor hacia él, era porque no encontraba las palabras adecuadas para declararse, también tenía miedo de que en su momento fuera rechazado, no sabría qué hacer, sabía que su amistad tal vez ya no volvería a ser la misma. No quería perderlo, porque significaría perderse a sí mismo.

Hilo Rojo  (Myungjong)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora