Jessamine - La hija de Malec

Todo cambia. cap.40

Ya han pasado 8 días desde que desperté.

Esto de ser humana se sentía raro. Saber que moriré cuando envejezca... Que la magia ya no corre por mis venas...

La nostalgia me embargaba cada mañana.

Entro en el despacho de Magnus y lo veo sentado frente a su escritorio, con muchos papeles esparcidos por éste. Él ya me había contado toda la verdad, toda.

Había tantas cosas que todavía me costaban creer. Una de ellas era el hecho de que Magnus conoció a mi familia en aquellos tiempos y que fue amigo íntimo de mi hermano.

No tengo rencor hacia él por haber resucitado a David, entiendo por qué lo hizo. Magnus recordaba al David sonriente que lo invitaba a cazar al bosque, pero éso pasaba 400 años atrás, luego Magnus se fue a vivir al otro lado del mundo y perdió contacto con mi hermano. Nunca llegó a conocer a "The Ripper". Así llamaban a David luego de haber masacrado pueblos enteros. Es por eso que debo buscar a David, y acabar con él.

-Voy al instituto -digo y él levanta la vista de golpe al escucharme.

-Esta bien. De paso dale estos papeles a Maryse de mi parte, por favor -dice entregándome una carpeta negra.

***
-¿Jessamine? -pregunta alguien a mi espalda.

Volteo y al ver a quien tenía delante sonrío.

-Ryan -digo y lo abrazo- ¿hace cuánto has vuelto de Canadá?

-Ayer -dice y suspira- luego del entierro de papá, las cosas se han vuelto difíciles para mi y el instituto, mi padre era una persona muy honrada y todos sentíamos su falta... Así que decidí volver aquí.

Lo miro con comprensión y cuando le voy a decir algo, alguien nos interrumpe.

-Jessamine -dice alguien detrás de mi.

Ian me miraba con sorpresa, hace algunos días que no hablaba con él, pero no porque no quisiera verlo, si no que estaba un tanto ocupada tratando de acostumbrarme a mí misma y mis sentimientos.

Aún no podía dejar de pensar en lo que escuché en sueños cuando estaba inconsciente: "Lo que daría por volver a ver ese brillo en tus hermosos ojos". La voz sonaba igual a la de él, por eso ahora no sabía bien que pensar... que sentir.

-Emm.. yo debo ir a... la sala de entrenamiento -dice Ryan incomodo por la situación.

Cuando éste se va, nos quedamos mirándonos en silencio.

-Per...

-¿Com...

Comenzamos a hablar al mismo tiempo y rápidamente nos callamos. Luego él asiente con la cabeza, indicándome que hable.

-Te quería decirte que... perdón -suelto y él no muestra ninguna expresión- desde que desperté que no nos volvimos a ver, pero no es que te estuiera evitando... aunque puede que en realidad un poco si...

-Jess, habla despacio, no te entiendo casi nada -dice con una pequeña sonrisa, la cual borra al instante- ¿por que quieres evitarme?

Me quedo unos segundos en silencio y luego sonrío apenada.

-Luego de despertar... comencé a recordar algunas cosas que soñé mientras estaba inconsciente -digo y él alza las cejas sorprendido- y una de las cosas que recordé...es... una voz, y estoy casi segura de que era la tuya.

-¿Y qué decía? -pregunta poniendo las manos en los bolsillos delanteros de sus jeans.

-"Lo que daría por volver a ver ese brillo en tus hermosos ojos" -recito mirándolo fijamente.