"Gracias"

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Al gobernador le daba igual todo. El tenia esa necesidad de probar a Sarah desde hace mucho tiempo. Asique ignoró sus palabras, se acercó a ella y la quito los pantalones y como no, las bragas. La pobre estaba completamente expuesta a él. El gobernador se mordió el labio al verla y se lanzó con un beso con lengua. Poco a poco se fue quitando sus pantalones y sus boxers y en el momento más inesperado entró. Sarah lloraba y gritaba de dolor. Era insoportable.

Desde las otras habitaciones se oían los gritos de Sarah. Daryl no lo podía aguantar más. Estaba harto de aquella gente, y no iba a permitir que hicieran daño a su chica.

Cogió todas sus fuerzas y cuando se le acercó, le pego una fuerte patada en los huevos al hombre que le estuvo pegando durante media hora. Los gritos seguían y seguían. Le pusieron furioso.

Entonces tiro de las cuerdas con toda su alma hasta romperlas y quedar libre del todo. Se levantó y le pego fuertes puñetazos al hombre que se quedo tirado en el suelo por el dolor hasta que le dejó inconsciente. Después se dirigió a la puerta y la derribo de una patada.

Fue a donde venían los gritos de Sarah y tumbó la puerta con otra de sus patadas. Lo único que quería era matar a ese hombre. Según entro se le quedo aquella imagen de Sarah y el gobernador grabada para siempre. Dio unos cuantos pasos hacia delante tirándose encima del gobernador, liberando a Sarah de semejante violación. Sarah se quedo paralizada ante el miedo. Daryl seguía peleándose con el gobernador. Chocaron contra unas urnas de cristal haciendo que estas se rompieran dejando caer miles de cristales al suelo. Daryl cogió uno y se lo clavo en el ojo derecho al gobernador. Por poco le llego al cerebro. Se retorcía en el suelo mientras que Daryl le seguía dando una buena paliza. Cuando por fin consiguió dejarlo inconsciente, miro a Sarah. Ella se moría de vergüenza ya que seguía sin su ropa. Esta se agachó a ponerse su ropa interior, pero lo demás estaba cubierto de sangre del gobernador. Entonces Daryl se acercó y la dio su camisa. Ella no dudo en darle un apasionado beso, y el se lo devolvió mientras la abrazaba fuertemente, como si la dejaba ir se acabaría el mundo.

-Gracias...- dijo ella entre sollozos.

-Shhh...tranquila- le respondió el sin soltarla.

~Y...Que haría yo sin ti...~Where stories live. Discover now