Capítulo dos.

1.8K 133 11
                                    

Narra Jos:

—No veo la razón tan apresurada de mudarte, aún no están divorciados y ni siquiera han dicho quien es el dueño oficial de esta casa —Alan le reprochó a Freddy mientras le ayudaba a doblar su ropa.

Alonso y yo también nos encontrábamos ayudando a nuestro amigo a empacar cada una de sus cosas después de haber dejado medio vacío el refrigerador.

Freddy estaba devastado. Cuando Ingrid le pidió el divorcio fue en España, en una de nuestras giras por el próximo disco, él simplemente no podía creerlo ni nosotros tampoco. Saber que el amor de su vida quería alejarse de él era lo más duro que le había podido pasar a mi compañero.

—Ni siquiera me quiero divorciar, carajo, pero tengo que irme, quiero que ella esté cómoda y así tal vez pueda pensar mejor.

Los tres lo miramos con compasión disparada en los ojos, él nos veía con tristeza.

—No te preocupes, estoy seguro de que Ingrid aún te ama y va a cambiar de opinión en cualquier instante —fue lo único que salió de mi boca —. Por cierto, ¿dónde está?

—Mercedes me dijo que Marley vino a recogerla en la mañana, no supo a donde iba, yo llegué del hotel a las 12:00.

—Hotel, papeleos, peleas, divorcio, dios mío, que pesadez —Alonso me miró y añadió —, ¿seguro que te quieres casar?

Puse los ojos en blanco y le enseñé el dedo medio de mi mano derecha, los demás comenzaron a reír y Alonso negó con la cabeza.

Hace cuatro meses que les había anunciado que le iba a proponer matrimonio a Marina y ellos se quedaron pasmados, me veían como si estuviera demente e intentaron persuadirme para que no lo hiciera de ninguna manera. Pero no me hicieron cambiar de opinión, de igual forma terminé haciéndolo y ella no dudó en aceptar, algo que me hizo sentir feliz.

Todos pensaron que era un idiota, querían a Marina, no tenían problema con ella, su problema era algo diferente, mejor dicho, alguien; Marley. Ella había vuelto hace ya un año y medio y todos pensaban que volvería a estar en mi vida, pero no fue así; debo admitir que cuando llegó volví a amarla pero sabía que las cosas habían cambiado, nuestra historia había terminado hace casi medio siglo y fue por eso que decidí que Marina era la chica con la que quería seguir peleando y amando pero en el fondo sabía que Marley no iba a salir de mi mente ni de mi corazón nunca.

—Amo a Mariana, ¿de acuerdo? Ella y yo estaremos bien.

—Lo que digas —se limitó a contestar Alonso.

Gritábamos y hablábamos fuerte que no nos dimos cuenta que Ingrid y Marley, habían vuelto. Ingrid, vio las maletas, la ropa a nosotros y a Freddy en ese orden, sin saber que decir o hacer. Marley fue la que rompió el tenso silencio de la habitación.

—¿Harás una venta de garage?

—Iré a un hotel —contestó Freddy mirando de reojo a su aún esposa —, terminaré en poco tiempo.

—No tienes que irte, es tu casa —Ingrid se apuró a decir —. Yo iba a irme, mamá quiere que pase tiempo con ella, así que me quedaré con ella.

Los chicos y yo, veíamos la pelea algo incómodos, en cambio, Marley, estaba ajena al asunto, sonriendo mientras enviaba mensajes. Trataba de no reír y hacer que los demás la notáramos, pero eso era difícil, ya la había visto yo.

—Quédate, Ingrid —todos los presentes en aquella habitación sabíamos que no solo se refería a quedarse en su casa, sino en su vida.

—Solo vine por mi maleta, la arreglé esta mañana.

Ingrid caminó hacia el armario y sacó una enorme maleta junto con una bolsa de viaje que hacían juego con su cara decidida a irse que se colocó en el hombro.

Freddy la miraba con desesperación, estaba casi seguro que buscaba una forma de mantenerla dentro de esa habitación el mayor tiempo posible y al parecer, ella también deseaba quedarse ahí otro rato más.

—Bueno, es todo, Marley, iré en mi carro —Ingrid le informó a su prima y ella la miró con cara de pocos amigos.

—Eso me lo hubieras informado y ahora mismo estaría viendo how I met your mother en mi casa.

—Quería saber si el abogado te mandaría un mensaje o te llamaría para invitarte a salir, obvio —comenzó a reír —. Lastima que no pasó en todo este tiempo.

¿Cita? ¿Abogado? ¿De qué rayos están hablando?

No sé si mis amigos sabían leer mi mente o mi cara expresó sorpresa y enojo después de ese comentario porque posaron su vista sobre mí.

Marley puso sus ojos fugazmente sobre mí, sentí su incomodidad cuando habló.

—Bueno, entonces me voy —se volteó hacía Ingrid —, espero verlos pronto —se dirigió a nosotros.

Los chicos se despidieron de ella, menos yo. Yo quería saber de que estaban hablando e iba a averiguarlo en la siguiente hora.

—Marley, ¿te importaría dejarme en el auditorio? Pasas por ahí, tengo que hacer algo ahí.

Ella me miró con esos ojos de piedad que ponía cuando se moría por hacer algo pero a la vez estaba segura que no era la mejor de sus ideas.

Me dolía que me viera así, pero después de todo este tiempo, la he obligado a que me viera así.

Ambos salimos de esa habitación con todas las miradas encima. Eso me incomodaba todavía, pero Marley estaba más acostumbrada que yo a todas esas miradas de aliento, inconformidad y odio. Raro, porque yo soy el famoso en está situación.

Una vez que salimos de la casa y nos dirigimos a su vehículo, abrió la puerta del conductor y enseguida abrió la del copiloto. Espero a que entrara, cerré la puerta al instante y ella encendió el auto.

—Sí, Jos. Conocí a alguien y le di mi número, era lo que querías saber, ¿no?

La miré medio atónito, medio avergonzado. Ella me conocía tan bien, como yo la conocía a ella.

—¿Cómo supiste que quería saberlo? —no perdía nada con preguntarlo.

—Te conozco, sabía que en cuanto se le soltara la lengua a Ingrid tú querrías saber los detalles.

Me quedé callado, era verdad.

—¿Quién es?

—El abogado que llevará a cabo el divorcio.

Estaba a punto de decirle algo, no sabía qué, pero tenía que decirle algo. Su celular sonó y contestó. Por un par de segundos me miró pero después desvío su mirada hacía el espejo retrovisor tratando de evadir mi mirada. Marley aceptó salir a cenar con el abogado.

************

Síganme en wattpad y mis redes sociales externas. xx

Twitter:@ _ipennylane

Instagram: @iipennylaneee

Espero leerlas.

Última Oportunidad. ||EDUF #2||Jos CanelaWhere stories live. Discover now