SERVICE [SuLay]

Capítulo XXXIII

Dedicado a: Chaanyxol-

¿Alguien despiertx siendo las 2:11 AM? :"v ¡A leer!

____________________

Yixing llegó a casa un tanto confundido. Aquella conversación con Lena le estaba dejando como estrago un horrible dolor de cabeza. Además de que sentía un nudo en la garganta, tenía tantas ganas de llorar, no sabía que pensar y se sentía exhausto de tanto ajetreo en su mente. Se propuso no dudar de Joonmyeon pero es que se encontraba tan malditamente sensible debido al embarazo y los revueltos síntomas de embarazado no eran de ayuda en lo absoluto.

También sentía que había cometido un tremendo error al confesar que había regresado con Joonmyeon y aún peor, que había dicho que esperaba un bebé. Todo eso le estaba carcomiendo por dentro, pero ya no iba a arrepentirse, estaba decidido a enfrentarse a quien quisiera. No podía dar su brazo a torcer.

Ya no iba a dejarse derrotar tan fácil.

- Hey, Yixing.

- Hola, Sehun.

- Baek vino a dejar estas cosas -señaló las bolsas de las compras- se fue de inmediato. Mencionó algo de atender a la vieja bruja.

- Gracias por recibirlo.

- ¿Estás bien?

- Si -trató de sonreír- ¿Mei? ¿Sigue durmiendo?

- No, está jugando arriba con sus muñecas.

- Iré a verla.

Iba a caminar pero Sehun le detuvo agarrando su mano.

- ¿Estás seguro de que estás bien?

- Si, Sehun. Todo bien.

- Te creeré entonces.

Sehun le dejó ir, caminó hasta las escaleras y luego subió cada escalón con cuidado, recordando el grito de Joonmyeon cuando corrió escaleras arriba.

Entró al dormitorio de la niña, le dio un beso y un abrazo, luego se quedó un rato jugando con ella. Al menos se distrajo por un momento y pudo relajar su mente.

Y ahora estaba muy decidido a confiar en las palabras que le había dicho a esa mujer. No había ninguna manera en la que él dudara una vez más de Joonmyeon. Ya tenía suficiente con la cantidad de drama en su relación, no iba a desconfiar de Joonmyeon, no después de todo lo que ya habían pasado.

- Mei, cariño.

- ¿Sip?

- Esto sonará extraño viniendo de mí. Yo hasta no me creo lo que estoy apunto de decir.

- ¿Qué pasa, mami?

- ¿Quieres pasar la noche en la casa de tu papá?

- ¿Con mi papi YiFan? -habló muy emocionada- ¡Si! ¡Claro que si!

- Bien, voy a llamarle. Alista tu uniforme, yo iré a llamarle.

Yixing salió de la habitación de su hija, por el cielo santo que apenas lo hizo, quiso regresar y decirle a Mei que quería cambiar de opinión, pero ya no pudo.

Ni él mismo creía la decisión que había tomado, pero es que necesitaba que la casa estuviera sola, tenía planeado algo. Y bueno, Mei había querido ir a dormir a casa de su papá, así que en parte también podía cumplir el caprichito de su bebé.

- Habla YiFan.

- Si, hola.

- ¿Yixing?