No Trates De Recordarme |Niall Horan|

¿Y si mañana no te veo?

—Y ahora que estás en la escuela ¿cómo te va ahí? —decía Maddie mientras Greg conducía y Theo la abrazaba, porque en ningún momento la soltó.

—No me gusta la escuela.

—¿En verdad? ¿por qué?

—Es aburrida —Maddie sonrió.

—Pero eres consciente de que debes acudir a ella ¿verdad?

—Sí, pero no me gusta.

—Te cuento un secreto —dijo la chica acercándose al pequeño mientras las siguientes palabras las susurró— pero no se lo digas a nadie.

El pequeño dijo que si con un movimiento rápido de cabeza.

—Mi secreto es que yo también odiaba la escuela, pero si haces los trabajos que te piden y pones atención a ella, el tiempo para que salgas de ese horrible lugar corre más rápido.

—¿Estás diciendo que si hago lo que me piden los profesores, el tiempo avanza más rápido? —susurró el pequeño niño que causaba una muy buena sensación en Maddie.

—Así es ¿no es increíble?

—Lo es —dijo el pequeño sonriendo.

—¿De qué hablan ustedes dos? —dijo Denise observando a Maddie y Theo quienes sonreían.

—De la escuela mamá, nada interesante —contestó Theo.

Denise sonrió, amaba a su hijo pero ella, cuando veía a Theo y a Maddie hablando o jugando, no podía dejar de sentirse triste por la chica. Ella amaba a Theo como el hijo que jamás pudo tener, como el bebé que una noche murió a causa de la maldad de otras personas. Maddie habría sido una excelente madre, consejera, amiga, confidente, lo hubiera hecho todo perfecto. Maddie amaba a Theo, y cada vez que ella podía enseñarle cosas nuevas lo hacía, quería a ese pequeño niño como si fuera su hijo.

—¿Qué tal Texas, Maddie? —dijo Greg para romper el silencio.

—Ufff... es muy cansado, hoy es un día en el que no tendré que estar de un lado a otro. Quería aprovechar para dormir, porque realmente hay veces en los que sólo puedo dormir 3 horas. Pero ya tenía mucho tiempo que no los veía, así que aquí estoy, feliz de estar con ustedes.

—Eso nos hace muy felices Maddie —contestó Greg con una gran sonrisa sin despegar su mirada del camino— pero ¿qué piensas de que Niall estará aquí?

—La verdad no me sorprende y no me molesta, será genial verlo de nuevo. En los American Music Awards no hablamos mucho. Cuando viajamos a Londres para estar con la familia de Louis también no hablamos.

—Espero que las cosas no se pongan incómodas —contestó el hermano de Niall.

—Espero lo mismo —contestó Maddie.

—¿Por qué las cosas serán incómodas? —preguntó Theo.

—Porque Maddie y Niall se verán —contestó Denise.

—No serán incómodas porque ellos se quieren —contestó el niño.

—Así es, yo quiero mucho a Niall —contestó Maddie.

—Theo —dijo Greg— aún eres muy pequeño para comprenderlo.

—Tal vez sólo son los adultos los que se complican las cosas —contestó el pequeño, mientras siguió observando por la ventana sin decir otra palabra.

Esas palabras dejaron a Maddie pensando millones de cosas. Lo que el pequeño decía era cierto, pero un niño tal vez no puede ver lo que en realidad estaba pasando, pero ¿y si Niall la seguía queriendo tanto como ella a él y sólo era el orgullo él que no les permitía continuar?