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Jeon Jeongguk, típico chico apuesto, popular, rebelde, se acuesta con todo el que pase frente a el. Ya saben, del que todas las chicas e incluso chicos mueren por el. Todos, excepto Park Jimin.

Park Jimin para Jungkook era un maldito dolor de cabeza. El no era tan fácil como todos los demás. Jungkook no veía la hora de poder tener la oportunidad de acostarse con el y tenerlo entre sus piernas. Pero por más que lo intentara, Jimin no cedía. Era tan frustrante para Jungkook. Sin embargo, cuando el quiere algo, lo consigue.

Park Jimin, un chico que consigue buenas calificaciones, sin ningún esfuerzo. Despreocupado, no le gusta socializar. Siempre solo. Chico típico, también.

Con lindos muslos y trasero grande, estatura perfecta, cabello perfecto, rostro seductor. Perfecto era la palabra que lo definía.–Según Jungkook.

– ¡Vaya, vaya! ¡Lindo trasero, Minie! – Grita Jungkook cuando Jimin pasa en frente.

Este rueda los ojos y saca el dedo del medio como ofensa hacia Jungkook.

– Ese dedo te meteré yo en ese lindo trasero que tienes, princesita. –Jimin hizo cara de asco.

Jungkook no pudo evitar reír, por la actitud de Jimin.

– ¿Cuando dejaras de ser tan asqueroso? –Preguntó indignado.

– Cuando me permitas penetrarte, princesa. –Responde.

– En tus sueños, degenerado. –Insulto Jimin. –Me resultas un ser tan poco eficiente, tan repugnante, me asquea el hecho de pensar en si quiera tocarte.

– ¿Sabes que aunque digas todo eso no se me quitaran las ganas que tengo de montarte?

– ¿Sabes que diciendo cosas tan repugnantes no ganarás nada?

– Probablemente no, pero igual lo lograre. De una manera u otra. –Gracias a ese comentario, Jimin hizo una risa falsa, irritando al castaño.

– Lo que tú digas, idiota. –Jimin siguió su camino hasta la siguiente clase, dejando al castaño solo.

Era casi un pecado negar que Jungkook no quería nada con Jimin. No algo serio, no una relación, solo una noche con Jimin. No una noche donde simplemente dormirían o hablarían toda la noche, no. Una noche donde tendrían sexo, eso era lo que más deseaba.

Porque era tan malditamente frustrante el hecho de que el podía tener a cualquier tipo o cualquier chica en su cama, pero no. El quería a Jimin, y haría todo lo que estuviera a su alcance para poder tenerlo en su habitación, en un baño, en una cocina, en un aula, en una piscina. Eso no importaba. Solo quería tener a Jimin completamente a su merced.

Y para lograr eso, ya tenía un plan. Un plan que no podría fallar. Conocía perfectamente a Jimin, como para saber que caería ante la idea de Jungkook.

Ya que Jimin es de esos que les gusta retar a las demás personas, no le gustaba perder.

Jungkook lo retaría y este aceptaría sin pensarlo mucho.

Tampoco pensaba que Jimin sería fácil, lo de el trato lo aceptaría fácilmente, pero ¿acostarse con Jungkook? Eso sí será un reto difícil de lograr.

Sin embargo, el no se rendiría ante eso.

[後で]

El timbre sonaba, indicando que las clases habían terminado y que todos debían volver a sus respectivos hogares, también indicaba que era el comienzo de "el plan maligno" de Jungkook.

Jimin caminaba despreocupado por los pasillos de la institución, con los auriculares puestos. Mientras alguien lo seguía. Si. Ese era Jungkook, como todo un gran acosador.

De un momento a otro el castaño empujó al peli-rosa contra la pared, este al principio parecía asustado, pero al notar de quién se trataba, su rostro mostró fastidio.

– ¿Que quieres ahora, chico de hormonas alborotadas? –Preguntó fastidiado.

– ¿Como que, que quiero? Es obvio, princesita. –Habló como si fuera todo muy obvio. – Te quiero a ti, en mi cama. –Mostró una sonrisa lasciva.

– No, gracias.

– Por favor, Jimin. –Suplicó.

– Ya te dije que no, Jungkook. –Respondió fastidiado.–Entiéndelo ¿si?, no caeré en tus malditos juegos. No soy como todos los demás, crees que todos mueren por ti, pero te equivocas.

– Te propondré un trato. –Ignoró todo lo que dijo el peli-rosa.

– ¿Ahora que? –Suspiro cansado.

– Dame 39 días.

– ¿Para que quieres 39 días, Jungkook?

– Dame 39 días para lograr acostarme contigo. –Dijo el castaño decidido. –Lograre acostarme contigo, incluso antes de eso. –Le reto.

Jimin se carcajeó sarcástico y exagerado. –Trató hecho. –Aceptó aún con su risa sobre actuada. –Perderás tu tiempo.

– Lo que digas. –Jungkook estiró su mano, y Jimin la acepto. –¿Trató hecho?

– Trató hecho.

Y así cerraron el trato, oficialmente.
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Jolii, Ahre. Che, ¿como están? 7u7 ¿Que les causó leer esto? Cuénteme:v

Planeó con esta ff, hacer mucho lemon, ia zavem. Sacar mi lado bestia. 7u7 This is my moment. Así que también deben agradecerme por eso ¿? Esta será una historia un poco más.. emm.. zuzia. uwu

Le tengo todas mis esperanzas puestas a esta ff, así que realmente espero y rezo (?), porque lo apoyen.

En fin, gracias. Y nos vemos en la siguiente actualización.

¡Admiren a mi bias mundia! ¿?

¡Admiren a mi bias mundia! ¿?

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39 Días『✦』Kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora