Capítulo 19

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Llego a la sala de estar de la casa de Mark, me siento en el sofá, mientras reviso mi celular y miro las locuras de Brian. Mark me llevo a mi restaurante favorito, jamás me había sentido tan incómoda en la vida, no toque el plato, y ahora me estoy arrepintiendo, solo me imaginó el plato que estaba enfrente de mi, pero tenía un horrible nudo en la garganta que no me dejaba comer.

Sigo en el sofá, imaginándome el plato de comida, me duele.

Escucho unos pasos detrás de mi - Emily ven - oigo la voz de Mark, volteo a ver sin levantarme del mueble, y miró que camina hacia su despacho.
Me levanto y me dirijo al despacho.
Al entrar miro que guarda algo en su bolsillo, y una extraña sensación recorre mi cuerpo.

- necesitas algo - le pregunto ya que lo miro un poco extraño.

- te quedas conmigo está noche? - me dice. Lo quedo viendo, mientras se va acercando a mi.
Doy un paso hacia atrás para que no siga acercándose.

- no - le digo con una débil sonrisa. Quedo viendo mi alrededor y miro un enorme cuadro, un retrato en la pared llama mi atención.

¡Dios mío!
Miro un cuadro, una mujer de espalda con un vestido corto, girando sobre sus talones, es el mismo retrato que me han enviado sólo que este tiene color y tiene perfeccionada las facciones.

Vuelvo mi vista a él.
- me tengo que ir - le digo mientras siento una corriente extraña en mis manos.

Mark se despide de mi dándome un beso en la mejilla.
- me gustaste desde el primer momento que te vi, mi pequeña - me susurra en mi oido, se aleja a un sosteniendo mi cintura y lentamente se empieza a acercar a mi, dirigiéndose a mis labios, mi corazón empieza a palpitar de una forma anormal, inmediatamente me alejo mostrando una sonrisa fingida.

- descansa. - digo al mismo tiempo que tomó rumbo hacia la salida.

**
- mamá te está esperando, Elliot - me dice mi hermana en el teléfono.

- no estoy de ánimos - le digo mientras miro por la ventana de mi habitación.

- por favor Elliot - me suplica, mientras mi mirada se deja de perder en una ilusión, mientras la imagen de Emily sonriendo en mi jardín se desvanece, me la imagino cargando a nuestro pequeño hijo, llenandolo de amor como ella lo sabe hacer con cada persona que se acerca a ella, todo sería perfecto si en aquella ocasión no hubiera jugado con los sentimientos de mi dulce Emily.

- voy para allá - cuelgo.
Tomo mi arma, me la acomodo en la cintura y salgo.

Jack está con un grupo de hombres riéndose, cuando me miran todos se retiran y Jack aún se ríe a carcajadas sin que se de cuenta que los demás se han retirado.

- que es tan chistoso? - digo detrás de él, inmediatamente deja de reírse y toma postura.

- nada amigo - dice.

- te estabas riendo de la vez que se me quedó atorada el arma - le digo serio, él evita reírse pero no lo contiene.

- casi te matan... - dice casi ahogado - que harías sin mi, amigo - me toma del cuello y caminamos hacia las camionetas.

- vamos donde mamá - le digo mientras subo a la camionetas.
Jack se sube y me pregunta si estoy bien.
Niego con la cabeza, no he tenido noticias de Emily y esto cada día me desespera más.

Al llegar a casa de mi madre, miro que sólo está el coche de mi hermana.
Me bajo con un pequeño regalo, una foto, la única foto que tenemos en familia, la foto que miraba todas las noches, cuando dormía a mi hermanita y me desvelaba cuidandola.

**

- mi madre está cumpliendo años - me dice Mark mientras camina hacia la cocina de mi apartamento y lo observo desde el sofá.
Espero a que no me diga que lo acompañe, no estoy lista. - iré a verla, y luego iremos con tu familia - se acerca mi.

¿Qué?

- explícame, que me perdí - le digo mientras guardo mi celular en mi bolso.

Él se ríe y pone una mano en mi cintura, trato de alejarme, pero me aprieta contra su cuerpo.

- iré a pedir tu mano formalmente con tu familia - me sonríe.

- podemos evitar esa parte? Es muy... - no continuo al ver que su expresión cambia.

- es muy qué?, Emily - me dice con una cara que hace que piense rápido en otra cosa.

- emocionante... porque siempre me intimidas? - me alejo de él.

- te pongo nerviosa mejor dicho - dice levantando sus cejas.
Nuevamente intenta acercarse, dejó que llega a un cierto límite, un poco cerca dejando que se pierda en mi.
A milímetros de distancia me alejo finalmente, dándole la espalda y escuchado su suspiro.

- nos vemos en la noche - se marcha sin decir más, antes de cerrar la puerta del apartamento él me sonríe.

- eres la mujer más hermosa de este mundo, para mi - dice de una forma tan radiante que por un momento mis piernas se debilitan y mi rostro se sonroja, él finalmente cierra la puerta dejándome sola con mis pensamientos.

**

- mamá quería que vinieras antes de la fiesta porque sabe que te irás al ver la cantidad de personas que invitó - se ríe mi hermana.

Miro la casa de mi mamá, es enorme y por algún motivo me recuerda la casa de los Miller, una casa donde se sentía paz, donde había amor de sobra, donde vivía la niña más linda de todo este planeta, aquella niña sincera y tierna que una noche se destruyó y decidió cambiar para que nadie le volviera a hacer daño.

Espero a mamá, que la están arreglando en su habitación mientras reviso mi celular en la entrada de la casa, escucho que los portones se abren, miro la hora, marcan exactamente las 4 de la tarde, Jack está en la cocina, me manda un mensaje.

"Emily acaba de llegar a su edificio"
Por fin tengo noticias de ella, sonrió y escucho el timbre sonar, los invitados de mamá empiezan a llegar, me dirijo al jardín mientras unos de los empleados abre, no estoy de ánimos para ver a este tipo de personas con las que mi madre se ha relacionado.

- y mamá? - dicen en la puerta. No doy ningún otro paso, sólo volteó y miro quien acaba de llegar.

Miro a Mark que entra a la casa y pregunta por su madre.

- que demonios haces acá? - me acerco a él con intención de golpearlo.

- a que te refieres? - se ríe una manera ingenua, y se suelta de mi agarre.
Se queda un momento preocupado y voltea a ver a la ama de llaves de mi mamá. Se arregla su camisa y mira hacia la segunda planta.

Miro que en su mano lleva el zafiro de Emily enrollado en su mano, como si tuviera una parte de ella siempre con ese collar.

- ya tienes lo que querías, ahora lárgate de la vida de ella. - le digo mientras paso una mano por mi boca tratando de tranquilizarme.

Él sonríe y voltea a ver a otro lado, y luego vuelve su mirada a mi.
- no es de caballeros jugar con los sentimientos de una mujer... le Di mi palabra de casarme con ella y lo voy a cumplir. - sonríe.
No lo pienso mucho y le suelto un golpe.
Mark se queda un momento con la mano en la cara, respira acelerado y me regresa el golpe, nos empezamos a pelear mientras los hombres de Mark y Jack nos intentan separar.

- Elliot basta - grita mi hermana.
No lo dejo, la rabia nos tiene cegado a los dos.

- Mark, déjalo - escucho a mi mamá gritar. - Elliot deja a tu hermano... se van a matar - dice mi mamá en las escaleras de su hogar. - ustedes dos son hermanos - dice mi madre entre lágrimas.

Vuelvo mi vista a Mark quien mira a Grace con mucho asombro, no lo puede creer al igual que yo. Esto es una pesadilla, esto no puede ser.

Que demonios está pasando en mi vida.
De donde salen tantas obstáculos para estar con Emily.
Tiro el obsequió, que le traía a mi madre, que con mucha dificultad me costó perdonarla, me prometió que ya no habían más secretos y se le había olvidado un pequeño detalle.

Tengo un hermano, el cual compró al amor de mi vida.

Mi Eterna Amada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora