Destiny y El Torneo de Los Tres Magos [DEH#4]

Capitulo 51. Segunda prueba.

Tan solo sentí como salía del agua, y miraba quien me había rescatado, Cedric, lo mire sorprendida, y tuve el impulso de echarme para atrás, pero el agua estaba tan helada, que me entumecía un poco el cuerpo, como para no dejarme ayudar.

No éramos los primeros, pues Fleur ya andaba ahí, se veía bastante desdichada, como para ser quien llevara el primer lugar, le miré curiosa, y acercándome a ella, pude ver que estaba triste.

—¿Pog qué lloguas, Flema? —imite su acento, pero ella fue muy brusca, cuando hacía que mi mano se quitara de su hombro—. ¿Dónde está Flemita? —le pregunte.

—No pude rescatarla, a mi hermanita —responde llorando, le intente dar apoyo, pero soy mala dando palabras de aliento, así que tan solo intente que entrara en calor, momentos después, salía Viktor con Hermione, los mire con sorpresa, y me dirigí a abrazar a Hermione.

—¿Harry donde esta? —le pregunte un poco preocupada.

—¿Lo logro? —pregunta sorprendida.

—Dobby le dio mi pedido, eso espero —dije, cuando de pronto, alguien me toma de la mano, haciendo que le viera, este me aparto de Hermione, pero estaba más interesada en ver a Harry salir de la superficie.

—Des, ya estoy porr rregrresarrme a Bulgarria —comentó—, y pensaba que vinierras conmigo, pasarr el verrano conmigo.

—¿Ir a Bulgaria?

—Porr un tiempo, mientrras busco un equipo aquí en Inglaterrrra que me deje forrmarr parrte como buscadorr.

—¿Y por que me dices todo esto? —preguntaba mirando por encima de él.

—Des... quierro que podamos tenerr una rrelación serria, forrmal, no que solo vaya a durrarr hasta que tu tengas que irr o que tu pierrdas porr mí.

—Nunca perdí por ti —respondí—. Y escúchame Viktor, lo nuestro, no podría funcionar, si lo que sentía por ti, fue nada más y nada menos que un amor de verano, pero...

—Lo has escogido a él.

—Si —respondí—, porque puede ser un imbécil, idiota, y se pase de estúpido, pero ha estado ahí cuando más lo necesito —sonreí al recordar el baile.

—Yo estarré ahí —comentó, pero negué.

—Pero él ya estuvo, y sé que estará —le solté una sonrisa, dándole un abrazo—, gracias por traer a Hermione.

—De nada —respondio el abrazo—. Esperro que sigamos en contacto.

—Yo igual espero lo mismo —le sonreí.

—¡«Gabguielle»!, ¡«Gabguielle»! ¿Está viva? ¿Está «heguida»? —escuche a Flema hablar, me voltee y era Harry.

No pude evitar sentirme feliz, tanto que se me olvidaba lo entumecido, y acalambrado que estaba mi cuerpo

Harry traía con él a Flemita, parecía asustada y confusa, pero Ron simplemente echó un chorro de agua por la boca, parpadeó a la brillante luz del día y se volvió hacia Harry.

—¡Está bien! —intentó decirle Harry, pero llegaba tan cansado que apenas podía hablar, y mucho menos gritar.

Percy agarró a Ron y tiró de él hacia la orilla («¡Déjame en paz, Percy, estoy bien!»); Dumbledore y Bagman cogieron a Harry; Fleur se había soltado de Madame Maxime y corría a abrazar a su hermana.

—Fue «pog» los «guindylows»... Me «atacagon»... ¡Ah, Gabguielle, pensé... pensé...!

—Tú, ven aquí —dijo la voz de la señora Pomfrey.