Q U I N T O

117 61 27
                                    

La máscara de Jim Carrey pero

versión novela juvenil de Wattpad.


—Debes cantar. —Repite Ava por enésima vez en estas dos semanas— Mika tienes que cantarme una canción —canturrea con voz chillona, siendo tan exasperante como solo ella puede ser.

—¡Ya basta! —exclamo hastiada de su absurda insistencia.

¡Virgen de las voces, deja muda a esta loca!

—Vamos, solo será una vez y si no te gusta no lo harás más. Anda... —Insiste alargando la "A" como una niña caprichosa. Bueno, tal vez no hay mucha diferencia la verdad. Ava hala de mi mano impidiendo que camine a mi trabajo— Por favor, si no lo haces por ti, por lo menos hazlo por mí...

Otra vez con esas caras de perro mojado. Deja de hacer eso Ava, ¡no tiene ningún efecto en mí!

—No.

—Mika... —Vuelve a halar de mí cuando intento reanudar mi caminar.

—¡Está bien! ¡solo cállate de una vez! —exclamo soltándome definitivamente de su agarre en un movimiento brusco.

—¡Sí! —Celebra alargándo la "I".

Bendito sea el día en que decidí ser amiga de esta loca.

—Te prometo que te encantará —comenta Ava alegre, y cómo no, demostrando su gran sonrisa triunfante.

—Más te vale. Solo dime dónde es y ya —Espeto con una mirada molesta, ya estoy harta de su intensidad.

—En el bar de un amigo —responde fácil y rápidamente con un encogimiento de hombros.

—¿Bar? —Detengo mi andar inmediatamente, me encuentro pensando con miles de cosas que podrían salir mal en un lugar como ese, además de que ey me parece suficiente mal augurio—. ¡Ava!, ¡quedamos en que tendrías cuidado con quién te relacionas! ¡y de los lugares que vas!

—Y he estado teniendo cuidado, en especial después de que en estos días, vi una película donde la protagonista era raptada por un chico que conoció en la iglesia, ¡en la iglesia!, señor ya ni siquiera en tu casa se puede estar seguro. —Ava dramatiza charlando con el cielo, como si fuese a ser capaz de hablar con dios solo por eso— El punto es, que a él lo conozco de antes y sé que es muy confiable.

—¿Cómo lo sabes? —cuestiono suspicaz.

—Porque es amigo de mi hermano —explica ella orgullosa de su misterioso hermano.

—¿Tienes un hermano? —pregunto incrédula.

Yo jamás la he oído hablar de su dichoso hermano.

—No, pero sí un muy buen amigo.

Reprimo las crecientes ganas de matar a Ava, ¡Dios! pero ¿por qué es tan así?, me recuerdo que esto me pasa por tomar la absurda decisión de aguantar su presencia bajo el título de "amiga". Son cosas del karma, a fin de cuentas.

¡Pero es que se las trae!, lo hace a adrede yo sé que sí, sabe que me hace enojar su idiotez, y es como si le diera más razones para hacer estás cosas.

—En fin, Mika no juzgues un libro por su portada, no porque sea un bar será malo. —La oigo objetar— Así que ahora cierra el pico y escúchame. Es en la calle Kealsey, tenemos que estar a las 5 para una prueba de sonido, aunque conociéndote podrías escapar luego de la prueba vocal. Así que preferí mentirle y decirle que eres una experta, por lo que la prueba de sonido estará demás.

—Oh no puede ser, aparte de que queda en un barrio peligroso ahora a se le suma una estafa.

—Bah, no seas dramática.

Cajitas de CristalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora