05: memoria.

8.2K 1.2K 201
                                    

Jimin estaba un poco apenado porque lo había descubierto, pero también tenía miedo porque aun desconfiaba de él, ¿Cómo estar cómodo con él? No podía.

Divisó el complejo de departamentos dónde él rentaba un pequeño cuarto, apenas lo que podía costear. Se paró frente al rejado blanco y no supo por qué lo hizo, pero ahora ya era demasiado tarde.

-¿Quieres pasar? -había dicho sin pensarlo, y ahora estaba sonrojado.

-De acuerdo. -No lo pensó demasiado.

Entraron al edificio y por el oscuro pasillo caminaron hacia el cuarto de Jimin. Las paredes eran mohosas, estaban manchadas con mugre rezagada, el olor a humedad era preminente y el cuarto era ridículamente pequeño. Una cama individual pegada a la pared, un pequeño armario, una mesa pegable y una pequeña parrilla eléctrica, todo demasiado junto. Yoongi supuso que la puerta de la esquina daba a algún baño oculto.

Jimin había tratado patéticamente de hacer lucir a su cuarto, decente. Pero el estado de la construcción le quitaba lo bueno que Jimin había hecho por él.

Su pequeña cama estaba tendida y limpia, la cubrían sábanas color celeste, y en la mesita de al lado, descansaba un cuadro con una fotografía.

Una mujer y un hombre se abrazaban cariñosamente, y un pequeño niño se recargaba en el cuerpo de su madre mientras que en su mano sostenía un oso de peluche.

-Mi cuarto es un desastre, lo sé. -Dijo tímidamente Jimin.

-Creo que es íntimo, tienes el espacio para ti solo y nadie tiene que juzgarte por como tienes tú cuarto.

-¿Tú vives con alguien? -preguntó curioso.

-Voy a pasar por alto el hecho de que no me llamaste hyung. -Bromeó con él. -Sí, vivo solo.

-Lo lamento, a veces lo olvido. -Se sonrojó y Yoongi creyó que se veía hermoso. -¿Quieres algo de tomar?

-No, ya me voy. -Yoongi se dirigió a la puerta y giró el pomo, y regresó una mirada al menor que lo miraba sin expresión. -No vuelvas a mentirme.

-¿Qué? -preguntó extrañado.

-De ahora en adelante no vuelvas a mentirme. Y si te digo que no camines solo porque es peligro. -Lo miró serio. -debes creerme.

-A veces pienso que lo dices suena a amenaza.

-Sólo trato de protegerte.

-¿De qué me protegerías? ¡todos dicen que tú atacaste a Hyuk! -gritó eufórico. -¿Por qué debería confiar en ti? Ni siquiera sé que es lo que te debo confiar.

-Cree lo que quieras, no voy a sacarte de tú error. -dijo indiferente. -Más tarde vendrás a mi pidiendo que no te abandone.

-¿¡Qué demonios!? Apenas y nos hemos hablado unas cuantas veces. No sé de qué demonios hablas y tampoco quiero saber. No sé si estás consumiendo cosas extrañas y estás diciendo cosas sin sentido, pero no estoy cómodo. Ahora vete.

-Bien, no volveré a estar ahí para cuándo estés en peligro. Si alguien trata de asaltarte, pues que te asalte. -Cerró de un portazo y dejó a Jimin estupefacto.

🍃

Había pasado una semana desde la última vez que había visto a Yoongi, y no es que lo extraña, sino que lo había dejado con muchísimas dudas. ¿Qué tenía que ver él en todo ese enredo? Apenas y conocía a Hyuk, nunca se habían hablado, solo sabía de su existencia porque era popular, pero nada más.

Ahora tenía que pensar en su proyecto final y aprenderse bien la coreografía. Su maestra lo había regañado ya varias veces porque no prestaba atención, y ahora debía compensar todo el tiempo perdido.

Taehyung hablaba con mucha emoción de su proyecto final. Había escrito una canción que estaba seguro le daría una nota alta.

Namjoon ya no pasaba tanto tiempo con ellos, ahora le dicaba todo su tiempo y atención a su novio.

Suspiró pensando que las anteriores semanas se habían sentido como años, el tiempo no avanzaba y ahora que tenía que entregar tantas cosas para una fecha próxima, quería que se detuviera y lo dejase hacer todo lo que no hice antes.

Se acurrucó en su cama y miró la foto que descansaba en su mesita de noche. Sus padres se veían tan felices en esa foto, incluso él era el niño más feliz del mundo en ese momento, porque disfrutaba de las ventajas de ser hijo único, y vivía la vida de todo niño, que no piensa en problemas futuros, que solo vive el día y está interesado en jugar.

Ojalá pudiera volver a ser niño, ojalá pudiera regresar a sus padres, ojalá no fuera huérfano, ojalá pudiera recordar ese tiempo que estaba en blanco en su mente, porque había un gran hueco en ella y estaba seguro que algo importante debió pasar en ese tiempo de trauma, para hacerlo olvidar completamente todos los recuerdos de ese intervalo de tiempo.

No sabía cómo había llegado a vivir con su abuela y tampoco nadie le decía nada, y estaba furioso porque su abuela había fallecido antes de contarle tantas cosas y para colmo lo había dejado con su tío, ese que en las noches le gustaba tocar partes que él no sabía eran íntimas. Sólo le habían dicho que sus padres habías muerto en un accidente automovilístico, y él lo había creído mucho tiempo hasta que descubrió que no fue así. Pero solo eso sabía. Y cuándo tuvo la oportunidad de huir de su tío y sus largas manos, lo hizo.

Ahora estaba curioso y preocupado por todos los acontecimientos que habían ocurrido, y sospechaba que Yoongi era una pieza clave en todo ese embrollo. Pero ahora estaba cansado, ya no quería pensar más en su pasado, él solo quería dar vuelta de hoja y olvidar todo lo malo, olvidar los abusos de su tío, olvidar la muerte de sus padres, olvidar que había una mancha en su memoria.

Cerró los ojos y antes de dormir, la imagen deYoongi apareció en su mente.

--*--*--*--*--*--*
Escribir dos historias al mismo tiempo no es buena idea 😅 ahora las confundo :^(
Pero estoy súper loca, ya tengo un Namjin en mente y otra de los 7 chicos, uno de como serían en su chat de kakaotalk privado. Pero no sé, creo que estoy apresurando las cosas, estaba esperando a que mis otras historias se hicieran un poco más conocidas, pero sueño muy alto.
Como sea, espero disfruten de este capítulo. Y gracias por leer y votar. ❤

OSCURO |YoonMin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora