OSCURO |YoonMin|

16: ¿Dónde está?

-Hola tío. -dijo Jimin tratando de no sonar nervioso.

-Ah Jiminnie, tan educado como siempre. -alargó una de sus manos para tocar el rostro del chico. Pero Jimin se alejó asustado. -No deberías temerle a tu familia. -Dijo tranquilamente. -Pronto volveremos a ser la familia que éramos antes, ¿no te emociona? -Jimin frunció el ceño.

-A la familia no se le abusa sexualmente, creo que tienes un concepto de familia bastante morboso. -dijo haciendo una mueca de asco. -Estás enfermo. -Su tío frunció el ceño molesto.

-Te estás portando mal Jimin, me temo que tendrás que recibir un castigo. -Jimin agrandó los ojos asustado. -Debería darte una lección para que aprendas a contestarme de esa manera. ¿Quieres que le dé una lección a ese niño? ¿Cómo dijiste que se llama? -preguntó al hombre de aspecto rudo que conducía. -

-Min Yoongi. Señor-dijo sin agregar nada más.

-¡Ah sí! Ya lo recuerdo. Me dieron una buena cantidad de dinero por él. Pero ahora está causando molestias. -Dirigió su mirada al menor, quién lo miraba aterrado. -Debería hacerlo desaparecer de este mundo. Es molesto y sé que quiere lo que es mío. Porque eres mío Jimin.

-¡No le hagas nada! -suplicó el peli naranja. -Por favor t-tío, no le hagas daño. -El hombre lo miró fijamente.

-¿Lo quieres? -Jimin dudó al responder. -¡Responde!

-N-no. No lo quiero. -dijo tratando de proteger a Yoongi. Debía ser inteligente y decir exactamente lo que su tío quería oír para poder librar a sus amigos de todo eso. -Solo fue bueno conmigo. Lo estimo. -Sonrió nervioso. -Solo lo quiero a usted, tío. -Trató de no morderse la lengua al decir eso. Se sentía repugnante, pero al parecer eso hizo tranquilizar a la persona frente a él.

-Eso es. -dijo sonriendo. -Pero ese niño te quiere, y yo no puedo permitir eso.

-N-no. Yoongi no me quiere, solo, solo me ve como su hermano menor porque él no tiene familia.

-Por supuesto que sé que no tiene familia. -dijo sacando un cigarrillo de adentro de la chaqueta. -Mi querido hermanito era tan generoso que cuidó del hijo huérfano de su mejor amigo. Qué lástima que Min descubrió mis negocios, los hubiera dejado vivir si no hubiera sido tan entrometido. -Jimin entendió que hablaba de los padres de Yoongi. -Recuerdo al pequeño. -Dio una calada a su cigarro ya ligeramente consumido. -Siempre tras de ti. No había lugar a dónde fueras que él no estuviera contigo. Como un perro abandonado. -Jimin lo miró sin entender. El no recordaba nada de eso.

-Tal vez no lo recuerdes, Jimin. Pero incluso desde pequeños supe que lo de ustedes era más que inocente amistad. -Jimin trató de recordar, pero era más el asombro que no pudo pensar en nada más. -No sabía que me causaría problemas ahora, debí matarlo al igual que a sus padres. -Jimin tragó saliva y se armó de valor para preguntar algo que lo estaba carcomiendo.

-¿Por qué no puedo recordar esa etapa de mi vida? -dijo sintiéndose liberado por haber preguntado. -¿Por qué no recuerdo nada de todo lo que dices? -Su tío le dio una mirada y después la apartó para seguir fumando su casi extinto cigarro.

Jimin asumió que no contestaría su pregunta, ya que, habían pasado varios minutos de incómodo silencio.

Pensó en Yoongi y en cuanto lo extrañaba. Quería regresar el tiempo y no haber sido tan estúpido para ir al encuentro con su tío. Si tan solo se hubiera quedado junto a Namjoon y Yoongi, les hubiera contado de su situación y estaría a salvo junto al rubio.

Jimin respingó cuándo escuchó la voz de su tío llamándolo.

-Abajo. -Dijo señalando la puerta del coche. Jimin obedeció. -Bienvenido a tu hogar. -Dijo señalando el lujoso lugar al que lo había llevado. -Ven Jimin, acompáñame a tu nuevo palacio.