:re 🚬 Haise/Kaneki

༺ Forty-five ༻

Crawler soltó un suspiro y pasó su mano por su cabello, peinándolo hacia atrás. Sintió unos pasos tras él, por lo que se giró para ver.

– Crawler...

– ¿Kaneki?

Kaneki estaba allí, con su máscara. Crawler ladeó la cabeza a un lado, mirándolo con algo de confusión.

– ¿Qué haces aquí? ¿Vienes con los demás?

– No, soy yo solo.

– ¿Y...qué pasó?

– Ah. Tuve un mal presentimiento y vine, también... –sacó el papel de su bolsillo.– Encontré esto en mi bolsillo.

– Déjame adivinar. Es de Tn, ¿Cierto?

– Sí.

– Hm. Esa mujer –rió.

– ¿Tú lo sabías?

– Sí. Debí decírtelo, pero eso era su trabajo.

– Entiendo –guardó el papel.– ¿Qué pasó aquí? ¿Dónde está ella?

– El mocoso, Hajime, tenía un rastreador o algo así. Mutsuki, alias "la loca", llegó con su compañero el "emo" y todo el Oggai. Querían matar a todos, en especial a Tn.

– Ya veo... ¿Y-?

– Ella va para el E-14 –dijo, interrumpiéndolo.– Por las rutas 20 y 21.

– Ya veo. Entonces allí debo ir.

– Iré contigo. En ese grupo solo Tn, Touka y Hanami son las que pueden pelear, el resto...bueno, ya sabes. Además, aunque ella es fuerte, no podrán las tres contra el maldito de Furuta y sus perros.

– ...Está bien.

Ambos comenzaron a correr rápidamente hacia las rutas 20 y 21, las rutas de escape. Más adelante, se detuvieron al ver a un investigador que esperaba a la llegada del "rey", el "Jason del CCG", Juuzou Suzuya. Se miraron por un momento, hasta que el de costuras se levantó tomando su quinque y los atacó; ellos esquivaron. Hinami estaba allí, en el suelo.

– Haise, como sabes, estoy aquí para exterminarte –dijo Juuzou.

– ...Crawler –llamó, él lo miró.– Saca a Hinami de aquí y alcancen a los demás, yo los alcanzo después.

– ¿No preferirías que me encargue yo de ellos? Tú debes ir con Tn.

– Esto...debo hacerlo yo –lo miró.– Váyanse.

– ...De acuerdo. Pero no te mueras, o tu esposa estará enfadada –sonrió.

– ... –sonrió.– Claro.

Crawler rió, se acercó a Hinami y le extendió una mano, ayudándola a levantarse.

– Vamos, Hina. ¿Puedes caminar bien?

– Sí, estoy bien –sonrió.

– De acuerdo, entonces corramos.

Hinami y Crawler comenzaron a correr, con él tomándola de la muñeca para no perdérla.
Kaneki miró a Juuzou.

– Hanbee, podríamos morir aquí. Preparaciones, por favor.

– Listo.

Hanbee accionó una especie de botón que él y su superior tenían en la nuca, siendo cubiertos por sus armaduras quinques "Arata Joker" y "Arata II". Kaneki, por su lado, activó su kakugan mientras su kagune salía.

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Kaneki había perdido la batalla, y ahora estaba en el suelo sin brazos ni piernas. Hanbee también estaba herido, por lo que Juuzou ordenó a la escuadra médica que se lo llevasen. Kichimura llegó, sonriendo, y se acercó a Kaneki.

– Supongo que tú pierdes, Kaneki.

Los ojos sel albino se abrieron como platos al ver a aquel hombre.

– Gracias al proceder de dos incomparables miembros de la Escuadra Suzuya, nos las arreglamos para derrotarte. Olvidó lo que sucedió el fragor de la batalla, ¿No? Tú luchaste como un demonio en frenesí. Si hubieras vacilado aunque sea una vez, hubieras ganado seguro.

[Ruta 21]

«Maldición Tn, ¿Dónde estás? Si Furuta y las palomas saben del E-14, entonces estás en problemas...Dime que tomaste nuestra ruta secreta para huir, por favor...», pensó mientras corría.

– Crawler-kun.

– ¿Ah? –la miró.– ¿Qué pasa, Hina-chan?

– ¿Estás bien? Tus ojos...

– Estoy bien, ¿Qué pasa con mis ojos?

– Nada, solo que...tu kakugan se activó de repente.

– Oh. Ha de ser la adrenalina –rió.

– ...Ya veo –sonrió.

[Guarida]

– No tiene sentido –dijo Kichimura.– Los regalos, por favor.

– Me costó conseguirlas –dijo Hajime.

El pequeño llegó con dos cabezas en sus manos, las de dos de los niños de la Escuadra 0. Kaneki abrió los ojos con sorpresa al verlas y gritó.

– Y pensar que solía seguirte, Ken Kaneki –le palmeó la mejilla.– Te ves como un pequeño nugget.

– Hazuki –llamó, comenzando a caminar.– Cuida de nuestro amigo el Sr. Nugget ¿Bueno? Tratamiento especial.

– Sí, señor Director.

– Reporte del E-14 –se oyó decir a alguien por el comunicador.– Hemos encontrado a los ghouls restantes. Procedemos a eliminar.

Kaneki divagó un momento en su mente. De pronto, reaccionó y se levantó como pudo, mordiendo el rostro de Hajime, sorprendiendo a todos.

– ¡Hajime!

– ¡Capitán!

– Mi cara... ¿Qué pasó? Yo era tan guapo.

Kaneki sacó su kagune, atacando a Hajime en la cara; cuando los demás se le acercaron, él los atacó. Todo el que se acercaba a Kaneki era asesinado por éste, mientras él en su mente repetía el nombre de su esposa, Tn. El kagune de Kaneki comenzó a desarrollarse a niveles monstruosos, llegando hasta donde estaban los demás investigadores, atacándolos.

– ¡Come ahora, pequeño bebé! –gritó Kichimura.

Kaneki terminó devorando a todo el Oggai, haciendo que su Kagune creciese más y más, saliéndose del subterráneo hasta la superficie, matando a todo a su paso. Los civiles veían a aquella cosa, aterrados.