amor a primera vista entre dos desconocidos, la historia se verá reflejado el amor entre un chico que pasa las vacaciones en la playa y que encuentra el amor.
Me había ido a duchar y a lavar mis dientes, dejé todo listo para mañana en mi primer día de trabajo, tomaría turnos en la tarde hasta las 5, Estaba apunto de irme a la cama, cuando me llega un mensaje de texto de Marco.
—Hey! Mira por la ventana.
Me levanté y corrí hacia la ventana y había un cartel que decía: "Ve al Balcón"
Abrí las puertas que daban al balcón y había una carta y una rosa en la barandilla, la carta decía: "Quédate ahí"
—Marco sal ya, me está dando miedo!
Marco estaba atrás mío escondido y puso sus manos sobre mis ojos y besó mi cuello lentamente.
Sus manos puestas en mis ojos me hicieron recordar aquella vez cuando me tapó los ojos y me habló por primera vez.
—Se me había olvidado decirte lo mucho que te quiero. —decía Marco dándome un leve beso en la frente.
—¿Por que no pasas la noche aquí conmigo?, te extraño demasiado y quiero verte al despertar, ver como sonríes y me abrazas. —dije mientras colgaba de su cuello.
—Claro que sí, como me gustaría bebé.
Nos metimos a la cama pero quedamos parados frente a frente, Marco comenzó a recorrer su mano delicadamente sobre mi abdomen, subiendo por mi cuello para así darme un beso, me subí encima de él y nos besamos apasionadamente, quité completamente su camisa, desabrochándola lentamente y botón por botón. pasé mi lengua por todo su abdomen, desabroché su short y se lo quité, él comenzó a desvestirme, me quito el pijama y me subió encima de él.
Marco comenzó a succionar levemente, pasando su lengua cuidadosamente, solté un leve gemido de placer, comencé a bajarle el bóxer y a succionar y a jugar con mi lengua.
—No t-te-tengo preservativo. —dijo Marco jadeando.
—Está bien, no te preocupes. —dije calmándole con un beso en los labios.
Marco se apoderó de mí y entró, yo aún estaba estrecho, entró lentamente y un leve gemido solté. Este comenzó a subir la intensidad hasta que se vino.
No tenía sexo desde el verano pasado, me sentía totalmente nuevo, la última vez fue con Marco, desde ahí que no pasaba nada.
—M-me gustó demasiado. —le dije a Marco tartamudeando.
—Me hizo muy feliz cariño. —dijo el ojimiel sonriendo.
Marco me abrazó y se quedó dormido, me encantaba ver su cara de angelito, le di un beso en la frente y le tapé con la sábana para que no le diera frío.
Creo que el raiting bajó por qué no estaba Marco ahora que volvió tengo mucho más Jajaja, espero que lo hayan disfrutado, pronto el final de esta historia, como saben estoy trabajando en "1800 días contigo" que les recomiendo que vayan a leer
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