VI

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    Cuando me desperté aún no podía creer lo sucedido ayer, tenía la esperanza de que fuera un sueño y todas esas esperanzas se fueron a la mierda al ver la cajita de terciopelo tirada en el piso.

    La recogí , con algo de inseguridad la abrí. El anillo tenía una pequeña figura en forma de infinito llena de pequeños diamantes y un corazón en el medió con un diamante era muy lindo ni podía negarlo. ¡Pero que rayos estaba pensando! Era horrible. Guarde el anillo en la caja y la deje en el velador.

    Luego dirigí la atención al regalo que mis padres no me habían dejado abrir. Lo abrí, había un cuadro con una foto de toda la familia junta era muy bello, di vuelta el cuadro y atrás tenía un mensaje :

"Hija, espero que algún día logres perdonarnos, cuando estés leyendo esto seguramente estarás ya muy lejos de tu familia, nosotros siempre estaremos contigo, te dejo esta foto para que nos recuerdes Atte: Tu Familia "

    No sabía lo que quería decir el mensaje, pero iba a averiguarlo, baje rápidamente las escaleras y vi  un montón de maletas  y mis padres y la señora Matte , Olivia Matte.

  –Que esta sucediendo aquí –dije asustada, mucho.

  –Hija –dijo mi madre con tristeza–, no pensamos que todo pasaría así de rápido  –comenzó a llorar–, pero no hay nada que pueda hacer –claro que hay algo, puedes detener todo esto.

  –¿Que me quieres decir con eso mamá? ¿Que es todo esto?

  –Hoy te casarás hija hija –dijo mi padre tratando de no llorar –las maletas son porque te vas de vacaciones con Luis una semana.

  –¡¿Como?! ¡¿Vacaciones y me llevo todas mis cosas para una semana?! –dije sabiendo que mentía– Además, ¿por qué me obligan a hacer esto?

  –La verdad es que nosotros no queríamos que esto sucediera así –dijo apenada–, solo serán unos meses hija.

  –Tranquila te casarás por civil primero para que nadie se entere hasta la boda por la iglesia, aunque quiza no haya boda por iglesia, no te preocupes.

  –Te iras a otra ciudad hija, no nos veremos en un tiempo, pero estaremos en contacto –dijo mi padre.

  ¿Acaso la cosas no podían ir peor? Estaba muda, aturdida por todo.

    También iban alejarme de mi vida, estuve dándole vuelta un rato al tema de escaparme, no era mala opción pero mis padres pagarían el precio de escaparme. Solo serían seis meses, ¿no? Podía soportarlo, aunque no sé si podia soportar a Luis tanto tiempo la verdad .

  –Prometan que solo serán seis meses –dije angustiada– ni un día más.

  –Te lo prometemos hija.

    Maldito el día que fui a conocer a Luis, ¿por qué me hacía esto? Era mucha la  obsesión eh.

   Fuí casi obligada a ponerme un vestido formal, luego de esto subí al auto de la madre de Luis junto a mis padres, solo quería terminar pronto con esto, pero por dentro sé que esto esta comenzando, mire de reojo al chofer del auto, porque no, no iba manejando ella. Era guapo la verdad, no es momento para fijarse en eso Lissa.

   El auto se detuvo, me baje con claro disgusto, no era el día más feliz de mi vida.

    Todos los invitados ya estaban dentro de la sala del registro civil, y con invitados me refiero a solamente los padres de ambos.

   Me dirigí a mis padres antes de que empezará todo para poder despedirme, estaba segura de que luego no lo podría hacer.

  –Lo hago por ustedes –dije conteniendo las lágrimas.

  –Veras que las cosas no serán tan malas –dijo papá  Nos dimos un largo abrazo grupal por unos largos segundos.

   –Mejor me hubieran dado en adopción  –dije tratando de que mi ira no se notara tanto y que sonara como broma.

  Ahí estaba Luis, llevaba un smoking's negro, había que decirlo no se veía mal resaltaba con sus ojos azules y piel blanca y su pelo negro todo despeinado. Pero no quitaba el hecho de que no me caía bien. Para nada.

    Luis me mira con cara de burla, este idiota se esta riendo de mi, en mi cara, no sé como lo voy a soportar seis meses si ya quería matarlo ahora ya.

    De pronto llego el momento.

  –Usted Lissete Ruff. ¿Acepta a Luis Matte como esposo?

  –Si, acepto –dije tratando de fingir felicidad. Luego me dirigí a firmar el acta de matrimonio.

  –Y usted Luis Matte. ¿Acepta a Lissete Ruff como esposa?

  –Si, acepto –dijo con una sonrisa, vaya que era buen actor pensé. También firmó el acta de matrimonio. Acta del demonio.

  Nos pusimos los anillos.

–Para comprobar que vinieron en plena voluntad, los testigos por favor  –que claramente los testigos eran nuestros padres.

  Yo, aún con esperanzas de que alguien me salvara miré si alguien diría algo. Nadie.

  –Bueno entonces los declaró marido y mujer, puede besar a la novia.

  Mierda, se me había olvidado lo del beso. La verdad no pense que fuera necesario, pues era por el civil. Antes de que pudiera intentar hacer algo para evitarlo ya tenia los labios de Luis en los míos, cuando sentí sus labios mis mejillas se pusieron rojas de inmediato. Luis me las iba a pagar me había robado mi primer beso.

Maniático Where stories live. Discover now