Maniático

XVI

-Bu -dijo la voz de Samuel junto a mí. Tenía la mania de sacarme de mis pensamientos y provocarme un susto.

Me quede mirándolo sin decir nada, le despeine el pelo aun más de lo que traía hasta que empezó a reí más de lo normal, que maldita linda sonrisa se carga el desgraciado.

-¿Te tomaste tus pastillas? -pregunte diciendo que estaba loco.

-¿Yo? -se hizo el ofendido. Tiro su mochila al piso y tomo asiento junto a mí.

-Hay más puestos por ahí -dije señalandolos.

-¿No me digas? -dijo haciéndome burla.

Me controle para no pararme y pegarle con la silla.

-¿Has visto a Logan? -pregunte, pensaba pedirle que me acompañara a ver a Ana.

-No -dijo mordiéndose el labio, no pude evitar mirar en exceso ese gesto.

-¿En serio? -dije desviando la mirada.

-Si, muy seguro -dijo girandose hacia a mí. Entro el profesor de matemáticas.

(...)

Las clases estuvieron aburridas, para mi suerte estudiara o no, sabia los ejercicios y probablemente me iría bien en el exámen, no puedo decir lo mismo de Samuel.

-No entendí -dijo otra vez.

-Pero Samuel, te he explicado siete veces el mismo ejercicio -dije ya algo alterada. Estoy en proceso de tratar de llevarme bien con él pero no coopera.

-Pero no entiendo -dijo riéndose y mirandome fijamente.

-Pues vas a tener que entender -dije mirandolo fijamente-, no malgaste una hora de mi vida para que no entendieras.

Fue en ese momento cuando me percate que ya había tocado timbre para el almuerzo hace rato y solo estabamos los dos.

Tome mi bolso y me pare.

-Mi poleron.

-Lo ire a buscar, ni que fuera tan bonito -dije sacandole la lengua.

-No es bonito, es hermoso, igual a su dueño -dijo revolviendo su pelo. Si esta guapo.

-Si como no -murmure mientras me dirigía a mi habitación.

Me encontre con Logan en el camino.

-Logan. ¿Donde estabas? -se suponía que en clase de matemáticas estabamos juntos.

-¿No te conto Samuel? -alzó las cejas- Solo dire que estoy castigado por una semana -quiza que había hecho este loco, Logan si estana loco.

-¿O sea que no podras salir? -dije triste, mientras abría la puerta de mi habitación, que por cierto estoy usando la llave de repuesto.

Logan y yo entramos.

-Exacto -dijo enojado.

De pronto escuche un sonido de besos desde la habitación de Luis. Que sorpresa, ya se estaba tardando.

-Mejor vamonos de aquí -dije a Logan tomando el poleron de Samuel.

Luis era un idiota y nadie me hacia cambiar de opinión, a mí no se me olvidan las estupideces que me hizo a mí y a mi amiga, a decir verdad a veces Ana me hacia enojar por todavía sentir algo por Luis y él... bueno no se que sentía por él.

Llegue donde se encontraba Samuel y estire la mano con el poleron.

-Gracias -suspire-. Samuel quería pedirte algo- se que esto podría ser un error pero correre el riesgo. Ya no me cae tan mal.