El día que le conocí

Capítulo 18.

Matt estaba a punto de llegar por mí, había pasado algunas horas con Noah, estuvimos tan distraídos que se nos olvidó completamente la hora de descanso. Estaba esperando a mi mejor amigo afuera del elevador, estaba un poco nerviosa por lo que diría mi jefe, aunque no somos nada más que casi amigos.

Matt salió del elevador con una gran sonrisa en su rostro, él aun no me veía, así que empecé a hacer leves sonidos con mi boca tratando de llamar su atención. Había muchas personas trabajando, impacientes porque llegara la hora de poder salir, no quería que supieran que Matt me conocía, siempre me han importado más las opiniones de la sociedad y está ocasión no era la excepción. Matt se giró confuso y me miro.

- ¡Sam! - algunas personas lo miraron y mi plan de que nadie debía de enterarse se fue a la basura, salí de algunas plantas que había en la oficina y me acerqué a él.

-Hola Matt- le sonreí levemente y él me abrazó.

-Estoy listo para conocer a tu jefe, mientras venía se me ocurrió un plan para parecer que fue una casualidad el conocernos- Me contó su plan mientras caminábamos a la oficina de mi jefe.

-Entiendo, vamos- toqué la puerta tres veces esperando su respuesta, como seguía nuestro plan, Matt comenzó a hablar un poco fuerte.

-Pasa- escuché la voz de Noah y abrí lentamente.

-Ya me voy, señor West- el miró a Matt que estaba dándome la espalda mirando un cuadro sin dejar de hablar.

-Claro, ¿Quién es él? - señaló a mi amigo y llamé su atención para que se acercara, el plan estaba funcionando muy bien.

-Oh, hola, soy Matt, mejor amigo de Sam- extendió su mano a mi jefe y suavizó su mirada.

-Noah, jefe y amigo de Sam- los dos sonrieron mientras se saludaban.

-Es hora de irnos Matt, se hace tarde- mentía, solo quería huir de este momento tan incómodo.

- ¿Tienen auto para irse? - yo iba a asentir otra vez mentiría, pero Matt me interrumpió.

-No, nos iremos en autobús- Noah tomó su saco y nos empujó a la puerta sonriendo.

-Yo los llevo con gusto- Matt me miro con una expresión de sorpresa y emoción.

Ya estábamos los tres arriba del auto, yo en copiloto y mi amigo en los asientos de atrás.

-Sam, ¿Te dije que tu papá me invitó a cenar otra vez? - me miro sonriendo maliciosamente, negué rápidamente -Tal vez el señor West quiera cenar con nosotros, no creo que tu papá se moleste- lo iba a matar, no creía lo que había dicho mi supuesto mejor amigo, yo le conté que me ponía demasiado nerviosa cuando Noah estaba cerca y todo lo que comenzaba a provocar en mí.

-Claro, porque no- había aceptado la propuesta de Matt, iba a ser una larga noche.

Ya habíamos llegado a casa de Sam, su amigo me agradó mucho y creo que es porque solo son amigos. Matt y Sam se miraban muy seguido, ella lo miraba como si fuera a matarlo y él parecía muy divertido.

El papá de Sam era muy amable igual que su novia Rachel. Su casa era muy acogedora y era cómodo estar ahí. En ningún momento me miraron mal o me sacaron de la conversación.

Alguien comentó que a quien no le gustaban las galletas, a mí no me gustan nada. Sam reía por la mirada que su papá me daba, al parecer él tenía a las galletas en lo más alto junto con Rachel.

-Bueno, señor Noah, ya que compartió su inexplicablemente desagrado a las galletas, cuéntenos más de usted, ¿Qué es lo que quiere con mi adorada hija? - como todo padre protector me miro expectante, miré de reojo que Sam había golpeado su frente contra la mesa.

-Pues, por ahora somos amigos- Sonreí amablemente, Matt cubrió su rostro tratando de ocultar su emoción, fracasando completamente, su papá me miro tratando de encontrar la mentira, pero no había ninguna, por ahora somos amigos, tal vez en el futuro seamos algo más.

Rachel y su padre entraron a la cocina después de unos minutos, miré mi reloj, ya era un poco tarde, no le avise a mi madre que iba a cenar en casa de Sam.

-Es momento de irme, señor Hampson- me levante y el papá de Sam se puso frente a mí.

-Un gusto haberlo conocido mejor que la vez pasada- extendió su mano a mí y la tomé.

-El gusto fue mío, disfruté mucho la cena, gracias- caminé a la puerta, me había despedido de Rachel y de Matt. Sam me acompañó hasta mi auto, de lejos podía ver como los tres estaban mirando por la ventana.

-Gracias por venir, señor West- tomé su mano y me despedí.

-Gracias por invitarme, Sam- me acerque un poco y sin pensarlo, la bese, imaginando que tal vez después su padre quiera matarme. Ella me siguió el beso, eran tan suaves y delicados, ya había dado mi primer beso, pero ese era basura a comparación de este. Nos separamos después de unos segundos, sonreí y miré a su familia. Matt nos estaba grabando mientras parecía morir de emoción, Rachel detenía a su padre y le decía algo sonriendo y el señor Hampson parecía que en cualquier momento iba a salir a golpearme.

-Lo siento señor Noah, esto... Fue un error- bajo la mirada y me negué a que lo hiciera.

-No fue un error, fue maravilloso- susurré cerca de su oído. Nos quedamos abrazados unos minutos, no sabía lo que sentía, no sabía si iba muy rápido, no sabía si ella también de ponía nerviosa con mi cercanía, pero no la iba a dejar ir.