arder en llamas

8.1K 637 347
                                    

-Troye-


La mejor noche de toda mi puta vida.

Veamos, lo bese hasta casi ahogarlo, le toque el pene que... de sólo pensarlo me dan ganas de volver corriendo y seguir donde me quedé hasta que la idiota de Holland nos interrumpió. ¿Qué más hice? Me coloque detrás de él, de tal forma que hicimos lo que se llama cucharita, pero Simon parecía estar por tener un paro cardíaco.

El celular no dejaba de vibrar, Isaac parecía estar desesperado porque falte a una fiesta, supongo que eso no pasa a menudo. No, definitivamente nunca pasa. Pero, prefiero ser una caja de sorpresas y comerme a Simon se convirtió en una sorpresa de tales magnitudes que todos quedarán boquiabiertos.

Vamos, que no lo estoy usando para nada. Lo que hice, besarle y tocarlo lo quería hacer desde que lo vi cantar. Supongo que para cantar tiene que tener lengua ágil, ojalá pueda probarla, hoy estaba muy consternado como para hacer algo más que pedir que me aleje.

Me voy a divertir tanto sacándolo de sus casillas. Es perfecto hasta enojado. Sería perfecto verlo completo, sin suéter, ni nada encima... Mire hacía abajo, genial, pensé demasiado en él y ahora mi amiguito se paró.

-Bien, tranquilo, Troye- Me dije mirando a ambos lados para ver que nadie me escuchaba hablar sólo, mientras seguía caminando por la calle-. Piensa en algo que te de asco, no pienses en Simón en bolas...

Al decirlo lo imaginé más a detalle y me golpee la frente castigandome.

-Ya, idiota -Me castige-. ¿Acaso quieres que tu padre vea la carpa armada? No, Troye, no. Deja de pensar en él cinco minutos.

El taller se apareció frente a mis narices y mi padre me miraba impaciente en el enorme porton.

-Si te apuras, sería mejor -Dijo demostrando que no estaba orgulloso de que ande por cualquier lado haciendo cosas que ni sabía.

-¿Por qué carajo me llamas? Estaba en medio de algo importante -Me queje acercandome a él y topándome la entrepierna disimuladamente-. Tuve que decir que un idiota rompió su auto...

Me odio por mentirle. Le metí a Simon.

-Tu madre decallo -Respondió bajando la vista-. Teniendo en cuenta eso, creo que tienes derecho a verla.

No la veo hace ocho años, cuando comenzó el divorcio y él se quedó con mi custodia. Siempre le reproche que quería verla, aunque ella sea una drogadicta de mierda, me enteré que hizo rehabilitación, que es parte de la comunidad de la Iglesia y que cambio completamente. Pero, aún no puedo verla. Sólo se de ella que tiene una enfermedad terminal, ni se cual es.

-¿Es enserio? -Pregunté parpadeando dos veces-. ¿Me dejaras verla?

-Troye, te aleje de ella por tu seguridad. No estaba en buenos momentos.

-¿Cuando la veré?

Supongo que nunca estuve tan emocionado por algo que por esto. Vere a mi mamá.

-Debemos sacar una orden del juez -Explicó-. Acaba de llamarme pidiendo verte antes de irse. Pero, prometeme que dejaras toda la mierda de hábitos que tienes.

-No puedes reprocharme nada, tú me diste mi primer cigarro.

-Sólo fue uno, no era para que fuera algo de todos los días.

-Pues, es tu culpa.

-Bien, pero no hablaba de los cigarros. Quiero que te cuides... No quiero ser abuelo, y tu no puedes ser padre tan joven, te joderas la vida, le joderas la vida a ella y le joderas la vida al niño.

Por eso me busque a Simon, él no va a quedar con un niño, él no se puede quedar embarazado. Aunque se que mi padre es un tanto machista y lo escuche burlarse de varios homosexuales por la tele.

-Tranquilo, papá, no soy pendejo.

-¿Llevas condones? Quizás te transmitan algo o...

-Ya tuve educación sexual, ya lo se.

-Troye, cuidate porque te juro que te castro si la cagas.

-Te digo que no soy pendejo. ¿A qué viene toda esta charla?

-A suponer que la traes tiesa, se de donde vienes...

Me quedé helado. Mierda, se dio cuenta de la mitad al menos.

-No voy a decirte que no lo hagas, ponla donde quieras, pero siempre ponle un sombrero porque te cortó las bolas.

Mentalmente me quería romper un pedazo de cemento en la cabeza por idiota. A diferencia de los otros padres, el mío no se enojaría por algo como esto, pero eso no quiere decir que no me esté muriendo de vergüenza.

-Em... yo... ¿Por que me mirabas él...?- Pregunté intentando sacrme culpa.

-Ya puedes volver con esa chica -Dijo como si entendiera todo-. Vete, Troye.

Si vuelvo, Simon me mata. Quizás debería ir a la fiesta, para que Isaac deje de joder tanto o quizás sólo debe dejarme de joder con todo esto.

-Simon-

-Por eso, Dios los ha abandonado a pasiones vergonzosas. Incluso sus mujeres han cambiado las relaciones naturales por las que van contra naturaleza; y, de la misma manera, los hombres han dejado sus relaciones naturales con la mujer y arden en malos deseos los unos por los otros. Hombres con hombres comenten actos vergonzosos y sufren su propio cuerpo el castigo de su perversión.

Busque entre las personas a Troye, pero recordé que su padre y él nunca iban a la iglesia. Entonces, estoy solo contra esto. Estoy solo contra un cura que clava sus ojos en mi, mientras habla mal sobre la homosexualidad.

Advertí que Holland me miraba por el rabillo del ojo. Ahora ni puedo hablarle, no es normal que alguien vea a su hermano menor con el chico que persigue hace años, y encima como estábamos... nunca hago estas cosas y cuando las hago pasan me encuentran con las manos en la masa (o más bien con un Troye con las manos en mi masa) ¿Se puede ser tan fracasado en la vida?

Mientras que papá y mamá no se enteren, creo que estaré bien. Espero estar bien.

-Cada uno tiene su propio interés. Pero, Dios creo a Adam y Eva. Cabe destacar que hay que respetarlos, después de todo, son el prójimo...

-¿Escuchaste, Simon? -Pregunto Holland.

-¿Tu tienes que ver con que el cura este diciendo esto? -Pregunté entre dientes enojado.

-Le pedí que de una charla acerca de la homosexualidad porque supuestamente tengo un amigo que experimenta cambios.

-¿Cambios? Holland, no entiendes... Yo soy así y no tiene que ver con Troye. Lo que pasó anoche fue algo que no pasará de nuevo, pero no porque...

-Hagan silencio -Ordenó mi madre con el entrecejo fruncido-. Esto es importante para nosotros.

-Má, ¿crees que lo que está diciendo es cierto?- Pregunté con el corazón en la boca-. ¿Está mal ser homosexual?

-Hablamos luego, Simon.

No hay luego. No cuando lo que me pasa esta tan presente en cada segundo de mi vida. No cuando Troye Urie me está volviendo loco.

Volví a mirar hacia atrás, sólo para volver a ver a los de siempre y me sorprendí al verlo sentado en uno de los últimos bancos. Troye estaba en la Iglesia, sus ojos sólo estaban para mi, literalmente, me veía sólo a mi y no al cura. Su sonrisa se agrando al notar que yo lo veía, su ojo izquierdo se cerró, haciéndome un guiño y se acomodó en el asiento.

El rojo no tardó en instalarse en mi cara, nervioso mire al cura tratando de prestar atención a sus palabras, pero mi pecado era mucho más entretenido.

Ardo en malos deseos por ese maldita piel caliente que me llama en todo momento. Estoy en llamas.

BAD BOY GAY (Corrigiendo)Where stories live. Discover now