Dudas del pasado (Camren g!p )

Capítulo 21

Camila estaba apunto de llamar a la puerta cuando Lauren dijo:

-¡Ya estoy harta de limpiar los líos de Ari, maldita sea! Dame una buena razón para que deba hacerlo.

Camila se sintió como si le hubieran dado un puñetazo. Se quedo paralizada en la puerta del despacho del padre de Lauren, incapaz de respirar, capaz solo de escuchar.
Y oyó que Michael le daba una buena razón. En realidad, le dio varias, todas muy racionales.

-Porque lo haces bien- le dijo-. No te lo tomas como algo personal, no exageras. Haces lo que hay que hacer y no mezclas los sentimientos en eso.

Camila sintió la boca seca. El corazón le latia con tanta fuerza que le sorprendió que no pensaran que alguien llamaba a la puerta.
Pero no la oyeron en absoluto; simplemente siguieron hablando.

-Pues no quiero hacerlo- Lauren ahora sonaba tan racional como esperaba su padre-. Tengo otras cosas que hacer.

No las dijo y michael no preguntó.

A Camila le pareció que a Michael no le importaba, sólo le importaba limpiar los cabos sueltos de la vida de Ari. (Los líos de Ari). Y estaba claro que Lauren era la mujer que quería que lo hiciera.

-No te llevara mucho tiempo. No es una gran obligación- comento Michael. Y paso a prometerle que aquella seria la última vez.

-¿La última vez?- preguntó Lauren dudosa.

-Bueno, esta muerto, ¿No?- Michael parecía exasperado-. ¿Que mas problemas puede causar?

-Mas vale- contesto Lauren-. Porque después de esto, he terminado. Tengo una vida, maldita sea. ¿O lo has olvidado?

-Claro que no- contestó su padre indignado.

-Al menos no puedes esperar que me case con está.

Aquellas palabras fueron como un cuchillo en el corazón de Camila. Pero ellas le dijeron la verdad. Se habia casado con ella para cumplir con las expectativas de su familia.
Todo cobro sentido entonces. El trabajo en Uppsala del que no se habia molestado en hablarle... Ahora sabía del porque no lo habia hecho. Porque era una parte de su vida que habia puesto en compras de espera a causa de ella. No lo habia mencionado porque no pensaba aceptarlo porque Ari habia muerto dejándole sola y embarazada.

Necesitada. (Un lió)

Uno que podía arreglar casandose con ella. Por la familia. Por ella. Por Lily.
En realidad, también se lo habia dicho así al pedirle que se casara con ella.
Le habia dicho que cuidarían de ella. En plural. Su familia, no ella. Entonces entendí entonces que Lauren solo habia hecho lo que esperaban porque era la que no (Mezclada los sentimientos), la que no se tomaba las cosas de un modo personal, la que llegaba y hacia el trabajo sucio cuneado era necesario.

Nunca la habia querido.

Camila nunca habia creído que sus acciones hablaran por Lauren, que al casarse mostraba cuánto le importaba y la noche anterior al bautizo, cuando habían hecho el amor por primera vez, se habia atrevido a pensar que Lauren la quería como ella habia llegado a quererla.

Esa noche habia sido mágica para ella.
Pero a la tarde siguiente habia descubierto lo equivocada que estaba y habia comprendido que tenia que acabar con aquel matrimonio y enviarlo lejos. Dejarla libre.

Y lo habia hecho.

No lo habia echo con calma ni racionalmente ni con el distanciamiento sentimental que permitía a Lauren hacer cosas difíciles. No. Le habia dicho que se marchara, que su matrimonio habia sido un error y que la quería fuera de su vida.

Lauren la habia mirado atonita, como si no pudiera creer lo que oía. Habia discutido un poco, le habia dicho que era preciso que se atuviera a razones.

Pero Camila habia insistido.

-Lárgate. Hemos terminado- habia dicho entre lágrimas.

Y Lauren habia acabado por irse.

Habia desaparecido calladamente de su vida, con la misma eficiencia con la que habia aparecido, dejándola vacía, hueca por dentro, mas alterada de lo que se habia sentido nunca.
Pero ella se habia reagrupado y habia salido adelante. Habia cruzado el pais y se habas hecho una nueva vida para si misma y para su hija. Era una mujer fuerte e independiente que no necesitaba a un hombre ni a una mujer para sentirse completa.
Lily y ella no eran obligaciones ni deberes ni mucho menos un lió que habia que arreglar.
¿Comprendía Lauren eso ahora? ¿Tenian alguna posibilidad? ¿Habia algo más profundo en su relación para que hasta su prima se diera cuenta?
A veces, en la última semana, Camila habia pensado que sí. Pero tenia miedo de creerlo. Aunque, ¿volver la espalda no seria de cobardes?
¿Deseaba ella que funcionara su matrimonio?
Sí. En el fondo del corazón, sabia que seguía queriendola.
Miro el jardín, donde Lauren estaba acuclillada en la hierba con el brazo alrededor de Lily. Charlaban con las dos cabezas juntas.
Sí, la quería todavía. La deseaba.
¿Pero tenia el valor de arriesgarse de nuevo?

-------------------------***----------------------------

Lauren no supo cuándo habia empezado a tener esperanza.
Quizá está no la habia abandonado nunca. Ciertamente, nunca se habia divorciado ni se habia sentido impulsadá a comprometerse con otra mujer. ¡Qué narices!, nunca habia pasado más allá de algunas cenas.
Pero si supo exactamente cuando empezó a creer que podrían ser de nuevo una pareja... Una familia.

Fue cuando despidieron día siguiente a Natalie en el taxi que la llevaría al aeropuerto.
La despidieron con la mano hasta que el taxi se perdió de vista y se quedaron las 3 solas.
Por un momento pareció que no habia ningún ruido en todo Manhattan, fue como si todo se detuviera.
Luego Lily les dio una mano a cada una y se columpio entre ellas.

-Vámonos a casa- dijo.

Lauren miro a Camila por encima de la cabeza de la niña y está sonrió.

Lauren le sonrió a su vez.

-Vámonos a casa.