Se sentó a la mesa y lo primero que hizo fue tomar su café con sus donas. Sabía quien le preparaba el desayuno, lo hacía siempre, aún cuando no estaban juntos.
-Toma.-Una dona extra fue dejada en su plato. Oh, tres donas para comer. El día comienza muy bien.-Te la mereces.
Elevó una ceja.-¿Por qué?
Steve besó su mejilla.-Por hacerme feliz.
Mierda.
Agachó su cabeza sintiendo las mejillas levemente calientes. Demonios.
Él nunca se sonrojaba, él hacia que los demás lo hicieran.
-¿Estoy ilusionando o estoy viendo a Tony Stark sonrojado?-Nat se rió desde su asiento.-Chicos, pidan su deseo. Esto es algo que casi nunca pasa.
Clint sonrió un poco.-Yo primero.-Levantó la mano.-Deseo que...-Miró a Pietro que lo miró con una ceja alzada preguntándose que diría de idiota su novio.-que Pietro me ame cada día tanto como yo lo amo a él.
Pietro sonrió levemente.
Nat bufó.
-Yo deseo que Loki me de más hijos.-Thor miró al pelinegro con una sonrisa.-Muchos hijos.
El pelinegro negó.-¿Quieres crear un nuevo pueblo con nuestros hijos o qué?
-No escuché un no.-El castaño sonrió mirando a Loki.
-Idiota.
Negó mirándolos.-¿Harley?-El chico levantó su vista de su desayuno.-¿Sucede algo, hijo?-Se sorprendió a el mismo al decirle hijo con tanta facilidad.
-Estoy nervioso por la feria. No quiero que me vaya mal.
-Harley, te irá bien.-Dijo Steve mirándolo.-Eres un gran inventor, lo sé. Ese primer lugar será tuyo.
-Y si no es así, puedo golpear a los idiotas de los jueces.-Señaló Natasha.-Con gusto.
El menor negó riendo.
Su mirada recorrió la mesa y notó un asiento vacío.-¿Dónde está Peter?
-Aquí.
Rodó los ojos.-Tú no, Quill. Mi hijo Peter.
-Oh.-Quill se encogió de hombros.-No lo sé, pero yo me tengo que ir yendo.
Miró a Pietro.-¿Dónde está?
-¿Por qué lo sabría?
-Eres su mejor amigo ¿No?
El platinado bufó.-Si, pero no estamos pegados. Y ayer no lo vi, estuvo haciendo un trabajo y luego no sé, estaba ocupado para ir a verlo.
-¿Ocupado en qué?
Pietro jugó con sus manos sin querer responder, pero su novio lo hizo por él.-Teniendo sexo conmigo, Stark.
Harley se paró de la mesa.-Esto es algo que no quiero oír, de verdad.-Sonrió.-Me iré a la escuela.
-Espera, se supone que yo te llevo. No te irás solo.
En ese momento Quill regresó con ellos.-No se irá solo. Yo lo llevo.-El mayor miró a Harley con una leve sonrisa.-¿Estás listo? Quiero ver a los idiotas que vas a destruir con tu invento.
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Abrió los ojos levemente, sintiendo aún el sueño apoderarse de él.
Fue recibido con la vista de un pecho lleno de cicatrices, llevó su mano a el. Lo acarició un poco y sonrió algo sonrojado al recordar lo sucedido ayer.
