Capitulo IX : Terrible reacción .

309 34 5
                                    

Dohko se había cansado de estar metido en su casa, porque como saben, estaban libre, así que decidió ir a casa de Milo.
Se encontraba llegando, cuando logró divisar como su compañero besaba a un chico, para que luego éste se montara en su auto y se fuera de ahí.

- ¿Milo? - preguntó bajándose rápidamente del vehículo, sorprendiendolo en la puerta.

-¿D-dohko?. Que sorpresa, pasa - sonrió tímidamente - ¿Como estás? ¿Todo bien?

- Ohh no mejor que tú - dijo socarrón, sonrojando al moreno - ¿Dime, quién es él? - preguntó dejando la chaqueta en el perchero.

- E-es el chico de aquella noche - musitó luego de cerrar la puerta- ¿lo recuerdas?, él que me dejó en tu casa.

El castaño asintió sentándose en el sofá individual - ¿Estan saliendo acaso?

- Hace un tiempo - sonrió cerrando sus ojos.

- ¡OH MIERDA! ¿Es en serio Milo? - expresó apoyando sus antebrazos en las rodillas -¿Me descuido por un segundo y el señorito capullo se convierte en una mariposa sociable? - agregó riendo a carcajadas . - hasta hace un mes no hablabas pero ni con tu reflejo - Milo arqueó una ceja.

- Ya cállate . Él solo supo llegar y ya - indicó recostado en la pared con los brazos cruzados -

- Supongo que te gusta bastante ¿no? No te ofendas, pero admito que se ve bastante bien -

- Claro que se ve bien, si no fuese lo suficientemente guapo - mordió su labio de forma perversa - no tendríamos ésta conversación, idiota - Dohko arrugó la cara incrédulo antes de soltarse a reír y hacer muecas de vomitar.

- No lo conozco pero debe ser genial para que te guste a tí ¿cierto? - indicó.

- Ya estás. no es eso. - pensó sentándose en el sofá frente a su amigo - Supongo que es por su manera de pensar, es similar a mí sabes , tiene tantas cosas tras él pero al mismo tiempo lo sobrelleva - Dohko estiró el pico dándo a entender que "medio entendía".

- Debo admitir que me alegra - comentó recostandose - siempre fuiste muy callado, muy tímido, pensé que eras defectuoso.

-Soy reservado, no callado - se defendió - y mucho menos tímido. Defectuoso . Que idiota-

-Como digas, pero, lo más importante - calló mirando a Milo con un rostro más serio - ¿Qué tan serio va esto? Ya sabes a lo que me refiero.

- Lo suficiente, tanto que ya lo sabe - dijo entre felicidad y tristeza -

- ¿Ahh sí? Debo conocer a ese hombre tan valiente -

- Claro que lo harás.

*

*************************************************

Camus había estado casí todo el día con Milo, pero, ahora se encontraba en su casa. Se dio una ducha y se tiró en su cama como una estrella de mar.

En Tiempos De DivergenciaWhere stories live. Discover now