Cuidados De...

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En aquella simple nota de voz, dónde no la escuchaba alterada, si no más bien, resplando quizá por lo que creí era dolor, ella se escuchaba tranquila, más paciente que yo, que después de oír hospital me hice un manojo de nervios, quise salir corriendo, aun con toda la ropa y la cuerda colgada a mi, solo pensaba en que ella estuviese bien, y que dejé horas el teléfono, horas en las que pude ir con ella. Se bien que ella está más preparada que yo para esas cosas, sabe lo que puede pasar, quizá se escucha tranquila por que sabe que no es nada grave, pero yo no lo se, y me hago un enorme manojo de nervios que solo desea desaparecer y reaparecer a su lado, donde la sangre huyó de mi cuerpo y palidecí. Ben y Chris me hablában pero yo seguía viendo los mensajes, se que me decían algo pero no pude prestar atención, me movieron pero hasta que vi el último mensaje donde me pedía, me suplicaba, que fuera a su lado lo mas pronto posible, quise llorar, por que imaginé lo peor, me sentí basura, por que no pasé las ahora más cruciales con ella. Ignoré lo que me decían y corrí hacia el productor, le expliqué lo sucedido, y hasta el se mostró asustado, quería que mis hijas aparecieran en la película, y yo quería únicamente que ellas estuvieran bien, las tres. Me quité el vestuario de un solo jalón y me puse la ropa como pude, no tuve más tiempo de quitarme la ropa y el maquillaje, después me encargaría de eso. Conduje tan rápido como me era posible, respetando cada señal de tránsito pero con prisa, hasta llegar al hospital donde estaba, confiaba en Richard, su jefe, por que el hombre es realmente bueno, y fue como un padre o algo parecido. Solamente pregunté a la mujer en recepción y me dijo en qué sala estaba, corrí, piqué todos los botones del ascensor, y cuando la puerta se abrió al fin corrí por el pasillo, hasta llegar a la puerta. Para mi suerte Richard estaba ahí, firmando un par de papeles.

-¿Cómo está ella? ¿Mis hijas están bien? No pude contestar por que estaba grabando, juro que vine lo más pronto que pude - Richard me sujetó del hombro para tranquilizarme, estaba algo alterado, apenas respiraba bien dado que corrí -


-Tom, relajate, ella está adentro, le dimos un par de tranquilizantes, no eres el único preocupado, está con un suero y un par de medicinas para regular su presión, pero no puedo decirte nada más de las niñas, dado que hace no mucho el ginecólogo vino a evaluar el latido y la estabilidad de las dos pequeñas, los estudios no deben de tardar tanto, son de emergencia, relajate, y ve a verla, pero relájate por qué vas a transmitir tu miedo, preocuparse duplica el sufrimiento, se fuerte, solo un segundo, por ella, debe estar tranquila, por ahora al menos - y fue ahí donde pensé, que decirle sobre la casa nueva no era buena idea por ahora, no se que había causado aquello, pero si estaba seguro de que decirle, era ponerla en riesgo, después de todo, la casa estaría ahí, para cuando nazcan las niñas, y estará ahí para nosotros - Pasa - solo asentí y entré con calma, ella tenía puesta una bata, un suero que colgaba aún lado suyo, un par de cables en su pecho midiendo su presión, y uno más en su vientre y en una máquina podía escuchar los corazones de las niñas, ella me miró como tranquilizandose, sentía su miedo -


-Ya estoy aquí amor, perdón, vine tan rápido como pude, debí contestar y venir de inmediato, perdón - me acerqué a ella, le di un corto beso, a acerqué una silla a la cama, me senté y tomé su mano - Tranquila todo va a estar bien - acaricié su mano contra mi mejilla, ella Adora que haga eso, más aún cuando comienza a crecer mi barba -


-Tengo miedo - sus ojos se cristalizaron, ella siempre había sido franca en cuanto el medio que sentía sobre lo que pudiera suceder le a las bebés, debía permanecer tranquilo, aún cuando por dentro moría de miedo, ya habría llorado un manantial solo de la incertidumbre -


-Ellas estarán bien ¿No es así? Digo ellos saben lo que hacen, y seguro solo será algo no se, yo no se mucho de esto, quiero decir quizá solo sea un mal susto - su respiración fue pesada y sus ojos estaban a nada de soltar sus primeras lágrimas, se estaba haciendo la fuerte - Será momento de cuidar más tu alimentación y que camines un poco menos, has comido demasiado dulce, así que de ahora en adelante, vigilaré lo que comes -


Cuando Nos Descubra La Casualidad Where stories live. Discover now