inspector Bane

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La puerta de las oficina de abrío a los 8:00 y a las 8:01 un joven asiatico lleno de brillo entraba en la oficina como si no necesitara horas de sueño.

Fresco como una rosa.

Sigue su habitual rutina, dejar papeles, ordenar informes, encender ordenador y buscar información sobre el caso en el que este trabajando. Como todos los días.

Y son esas rutinas la que lo han hecho ganarse su puesto. Aunque, digamos que su comportamiento no es el que se espera ver en un policía de tan alto rango como lo es Magnus Bane. Inspector Bane.

Magnus se ríe recordando como en varias ocasiones los testigos a los que interroga o los mismos criminales se ríen de su aspecto cuando entra en la sala de interrogatorios. O las muchas veces que sus compañeros se enfadan con el por culpa de lo "poco eficaz" que es su atuendo en un tiroteo o misión de exteriores.

Claro que a él le da un poco, bastante, igual...Por favor....es Magnus Bane. Vaya donde vaya va a estar divino.

Poco a poco el tiempo ha pasado y no es el único que se encuentra en ese lugar. El sonido de una carpeta cayendo en su mesa lo hace centrarse en su compañero. Ragnor Fell.

-Nuevo caso. - menciona, aburrido y cansado. Como suele estarlo a primera hora de la mañana de  un lunes.

Magnus toma la carpeta en sus manos. Muerto. Otro muerto más. Iban cinco este mes, más los que llevaban los otros 2 meses, y todos con el mismo modus operanti.

- ¿tenemos la información del forense? -
pregunta mientras sigue mirando atentamente los papeles que se encuentran en la carpeta.

-Catarina esta trabajando en ello justo ahora.

-Genial. - habla sin ganas... este caso esta empezando a superar a Bane. Y eso, es raro.

-la victima era hija de unos empresarios. - menciona Ragnor pegando las fotos de la muerta en el gran pizarrón que tienen... él cual se esta empezando a quedar sin espacio - se la encontro muerta al lado del río, tiene 9 puñaladas en el estomago y muestra signos de resistencia.

-igual que las otras 12.

-tenemos 4 testigos que la vieron salir de un bar anoche.

-12 casos,  75 personas interrogadas, 3 meses de muertas y...0 sospechosos. -  Magnus tiene unas ganas inmensas de golpearse la cabeza contra la mesa. Y lo haria si no estuviera llena de materiales que podría romper con facilidad.

Así que se conforma con golpearse contra su mano con fuerza.

-Magnus tranquilo, lo resolveremos-  Tessa es la que habla desde la puerta, intentando tranquilizar al equipo. Intentándolo.

Magnus agita la cabeza, apartando todos los malos pensamientos que estaban apagando su positiva mente y se acerca al pizarrón. Las doce fotos de las chicas son demasiado parecidas y demasiado diferentes a la vez. Tanto vivas como muertas no parecen tener ninguna relación.

Todas estudiantes, todas en 2 año de carrera, todas hijas de empresarios... ¿que le pasaba a ese asesino/a?

-tal vez...deberiamos pedir ayuda. - la Agente de policía que todavía se encontraba en el umbral de la puerta, susurro esas palabras. Casi con miedo

-no. - dijo Magnus, frio y seco, sabía que era lo correcto. Pero su orgullo era más grande que eso, ese caso lo resolverían solos como habían hecho siempre.

-Magnus, si no lo hacemos habra más muertos. Más victimas inocentes. Y nadie merece ver en las portadas de todos los periódicos que su hija a muerto. 

Ragnor sabía de que hablaba, sabía muy bien que para convencer al inspector de lo que era correcto tenía que decir eso. Aunque quemaran en su garganta, eran verdad. Pura y absoluta verdad.

Magnus cerro sus ojos verde-dorado, y respiro profundamente, intentando pensar con la mente y no con su estúpido orgullo. Tenía que hacerlo.

-Bien. - dijo finalmente -pero no esperéis que sea amable con los .... refuerzos.

Y volvió a perderse en los miles de documentos, fotos, intentos de pruebas y declaraciones sobre el asesino en serie que estaba poniendo patas arriba la oficina en la que trabajaba. 

Caso Cerrado, Corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora