15-El Comienzo Del Desastre

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El bar no era diferente a ninguno de los que visitan chicos de veinte años, excepto por el grupito que acababa de llegar al lugar.

Un grupo de siete chicos nada usual pasó por la entrada de fila preferencial, sin embargo, sus atuendos y aspectos daban mucho a pensar el porque eran clientes VIP.

Tal vez sean los colores pasteles de Jin, o el atuendo completamente negro de Yoongi, probablemente la actitud alegre de Hoseok y Jimin, también podría ser la cara perdida de Taehyung admirando todo o la aparente evitación que mantenían Namjoon y Jungkook, viendo a todos lados menos a ellos mismos.

Un mesero les hizo el favor de guiarlos hasta su mesa, por suerte, la ubicación de la mesa era en el segundo piso, con vista a la pista y lo mejor de todo es que solo los clientes con mesa en el segundo piso podían acceder a esa planta. Lo que daba un poco de espacio personal y privacidad  en aquel lugar tan abarrotado de gente.

-¿Cómo le hicieron para conseguir una mesa tan buena en esta noche tan cotizada?-Preguntó Taehyung mientras se sentaba.

-Jin tiene sus contactos-Fue lo único que dijo Yoongi y al parecer no estaba tan contento de lo que el mismo dijo.

Jin rodó los ojos al escuchar a su novio pero no dijo nada.

Los demás decidieron que sería mejor no preguntar más para evitar una posible pelea de pareja.

-Como sea, ¡Hay que divertirnos!-Declaró Jimin y como siempre, su novio Hoseok lo apoyó.

La pareja se encargó de pedir las botellas y preparar los tragos, al principio nadie parecía muy convencido de beber, pero tras unos cuantos intentos y persuasión todos hicieron el primer brindis seguido de un "fondo".

Para el tercer trago, Yoongi y Jin ya se habían reconciliado, Jimin y Hoseok no paraban de reír entre ellos y seguir bebiendo, Taehyung parecía más imperativo de lo normal y Namjoon y Jungkook solo observaban en silencio a sus amigos con cerveza en mano.

-No se ustedes pero yo iré a bailar-Dictó Taehyung y se fue tambaleándose a la pista.

-¡Nosotros igual! Es momento de mover nuestro bote, bebé-Dijo Hoseok a Jimin.

Jimin asintió feliz y se fue de la mano de su novio.

Jin tomo un shot de soju y miró a Yoongi haciéndole caras tiernas.

-No-Respondió Yoongi enseguida cruzándose de brazos.

-Anda-Pidió Jin con un puchero agarrando las manos de Yoongi-Tiene mucho que no bailamos juntos.

Yoongi lo miró por unos segundos para después suspirar con resignación y levantarse siguiendo a Jin hasta la pista.

Quedando solamente Jungkook y Namjoon.

-¿No irás a bailar?-Preguntó Namjoon tras unos minutos, odiaba el silencio incómodo en el que se encontraban, a pesar de haber música.

-No me gusta mucho bailar entre personas sudorosas-Respondió Jungkook, lo cual sorprendió a Namjoon, ya que no esperaba ninguna respuesta-Soy de los que prefiere emborracharse sentado. ¿Y tú?-Dio un trago a su cerveza.

Namjoon se rió.

-Yo no soy nada bueno en el baile-Se encogió de hombros-Prefiero quedarme aquí y ver, a tener que disculparme con cada persona que seguramente pisaría.

Jungkook soltó una carcajada.

-No me caes bien, pero solo por tu graciosa historia, te permitiré ser mi compañero de embriaguez-Dijo Jungkook extendiendo su cerveza a Namjoon.

-Oh, me siento halagado-Chocó su cerveza con la de Jungkook.

Ambos se reían de las personas que se caían caminando o los que se peleaban por chicos y chicas en la pista de baile. Entre aquellas risas, decidieron pasar de cerveza a soju y de soju a shots de diferentes alcoholes.

Ya no se reían de las personas, sino, de cualquier cosa, estaban muy ebrios.

-Tu no me caes mal Jungkook, de hecho me pareces muy lindo-Admitió Namjoon.

-¿Ah si?-Namjoon asintió-¿Qué es lo que te parece lindo de mi?-Preguntó entre balbuceos.

Namjoon pico sus labios.

-Son muy bonitos, los más bonitos que he visto-Dijo-Son como bombones de cereza.

Jungkook se sonrojó, nadie le había dicho algo tan bonito.

-¿Y saben a cereza?

Jungkook se encogió de hombros.

-No lo se, tal vez yo no los pueda saborear.

-¿Y si yo los saboreo?-Preguntó inclinándose a Jungkook.

-Bien-Respondió, estaba demasiado borracho y todo le parecía simple y sin importancia.-Solo un beso, solo debes de probar el sabor.

-Si, si, ven acá.-Tomó a Jungkook de las mejillas y lo jaló.

Sus labios chocaron, y se mantuvieron juntos más de lo que acordaron, se podría decir que sus bocas no se separaron a lo largo de... toda la noche.

Namjoon, quedé embarazado.Where stories live. Discover now