Time [ KLance ] || Laith ||

16•

Aire.

Eso era lo que necesitaban sus pulmones.

Estaba cansado de seguir corriendo, pero no sé podía dar el lujo de dejar huir al criminal.

Fantasma.

Es como se lo hacían llamar, ningún detective lo a podido alcanzar, solo una persona fue capaz de seguirle el rastro.

El detective Lance Cruz McClain.

Muchos han dudado de la veracidad del trabajador , pero cuando lo acompañan y consiguen ver el mérito que hace para poder encontrar al ladrón fantasma, no cabían en la duda de que el moreno era el mejor detective.

Pero hubo un quiebre.

Una noche en particular,cuando salía de la oficina, vagando en las calles frías vislumbró una figura. Al principio pensó que era una persona cualquiera. Claro, una persona que lo veía desde hace rato a una hora no favorable de la noche.

— ¿No me has reconocido? — La figura soltó con burla.

Lance recapacito e intento alcanzar a la persona.

La risa del ladrón solo logro que aumentará su velocidad.

Fantasma entro en un edificio y en carrera fue saltando de dos en dos las escaleras que tenía en frente.

— ¡Hey! ¡Regresa aquí!

Lance inútilmente hablo, sabía de sobra que hacer ejercicio no era lo suyo, chasqueo los labios y quiso hacer el esfuerzo de alcanzar a fantasma.

Su cuerpo no parecía estar de acuerdo con lo que su mente dictaba, entre saltos su pie izquierdo perdió el sentido de ubicación espacial, al estar en aire tanto tiempo sus reflejos quedaron tardíos al aterrizar mal en uno de los escalones.

— ¡MALDICIÓN! — Poco le importaba que fantasma escuchará sus gritos de agonía. ¡Su dolor estaba primero! Por ahora fantasma se podría joder.

Su nalga izquierda fue la primera en amortiguar la caída, no siendo gratis. Un ardor picante se expandió por todo el músculo. Ese raro ardor que no quería ser sobado, prefería ser rascado, extraño.

Su codo izquierdo parecía también exigir atención, pero se negó a sobarlo, ya que. Si lo sobas puedes atraer mala suerte. Costumbres raras.

— ¡PINCHES DOLORES! ¿¡POR QUE NO PUEDEN DOLER IGUAL!?

Su sentido de justicia se vio opacado por el dolor. Podría ser un policía entrenado bajo estrictos regímenes, malas condiciones ambientales. Y malos tratos, pero eso no quitaba que ¡Dolía horrible! ¡Su carrera de stripper puede ser afectada!

—¡Vamos! — Se levantó de la escala para seguir con su persecución, ignorando el dolor que le pesaba en todo el cuerpo. Sobreponiendo el pensamiento de que, » El deber llama « — ¡Vamos! ¡Esto saldrá en las noticias!

Siguió su camino, al empujar la siguiente puerta que lo conduciría al nivel inferior, sus pensamientos dieron un vuelco de alegría al pensar que fantasma ya no tendría escapatoria.

Poco duro su alegría, al ser jalado por la parte trasera del cuello de su camisa. Volviendo al suelo. De nuevo, pero ahora el dolor cambió al lado derecho de su cuerpo.

— ¡CON UN DEMONIO! ¡COMO A TI NO TE DUELE, CABRÓN! — No sabía quién fue la GRAN persona que le ayudo a llegar al piso. Le daría las gracias. A golpes, por supuesto.

— Si, saldrá en las noticias que el detective McClain es taaaaaaan torpe.

Solo se le pasó un pequeño detalle.

—fantasma.

— Un gusto, detective torpe.

Parte una de dos.

Bye