BLOOD PACT/PACTO DE SANGRE

EPILOGO (SPANISH)

UN AÑO DESPUÉS...

Singto y Krist caminaban por el jardín mientras eran seguidos de cerca por Takuya y Kim.

Ambos jóvenes acababan de volver de su luna de miel y, con una amplia sonrisa y los ojos llenos de felicidad, habían decidido informar a sus padres de que iban ampliar la familia con un nuevo integrante en los próximos meses.

Aún no sabían si tendría las habilidades de un vampiro o las de un gumiho, o puede que al final no tuviera ninguna de ellas. Sin embargo poco les importaba pues, para ellos, lo fundamental era que sería muy bien recibido en la familia. 

Y muy, muy querido.

En cuanto a los jóvenes monarcas, no podían estar más felices con la perspectiva de ser abuelos. Aunque consideraban que tal vez fuera demasiado pronto ya que, al fin y al cabo, Singto aún no había comenzado a prepararse para la sucesión del trono y Krist ni siquiera conocía las obligaciones que tenía, ahora que era el Consorte del próximo Rey. 

Pero... de una forma u otra, saldrían adelante.

Siempre lo hacían...

- " El nuevo templete es hermoso" – comentó Krist mientras observaba el edificio situado al lado del lago y que, imaginaba, ya se había convertido en el lugar favorito de Mint.

- " Mi padre lo ha construido para mamá, para mí y también para ti" – respondió Singto mientras observaba la estructura de mármol blanco – " dijo que iba a ser perfecto para nuestras prácticas de magia... lejos de ojos curiosos".

Krist asintió con una amplia sonrisa mientras cogía de la mano a Signto y se encaminaba hacia el lugar.

Detrás de ellos, cogidos también de la mano, Takuya y Kim observaban a los príncipes con una sonrisa en sus labios.

- "Me alegro de que ya hayan vuelto..." - comentó la joven a Takuya mientras miraba hacia las espaldas de Krist y Singto - "ésto era tan aburrido sin ellos..."

Takuya rió quedamente.

- "Para ti todo lo que no sea la Universidad Invisible es aburrido, amor"

Kim le lanzó una mirada de soslayo, pero no dijo nada. Al fin y al cabo, nada de lo que había dicho su novio era mentira...

- "Bueno... ahora que tengamos a un niño correteando por estos jardínes sin duda será mucho más divertido..." - comentó la joven con una leve sonrisa pícara.

- "Ohhh... así que ya piensas en cómo hacer travesuras junto al hijo de Singto y Krist" - replicó el joven mientras reía levemente.

Kim asintió.

Y es que ya podía imaginarse lo divertido que iba a ser todo... Especialmente cuando Arthit naciera.

Mientras tanto, en una celda de la prisión de máxima seguridad, un joven esperaba sentado sobre su cama a que su carcelero le trajera la comida.

- " Pareces aburrido" – dijo un muchacho con el traje de guardia mientras entraba con una bandeja que colocó con cuidado sobre la única mesa de la pequeña habitación – "¿ quieres que te traiga algo para entretenerte?"

- " No hay nada que pueda entretenerme ya..." – dijo Jae con un suspiro mientras se volteaba hacia el  nuevo guarda del ala en la que vivía.

Desde que su juicio terminara y fuera condenado a treinta años por secuestro e intento de asesinato, el joven se había sentido apático y completamente solo.

Nadie había ido a verle, ni siquiera sus padres o el resto de su familia. Sin duda demasiado avergonzados por tener un hijo preso.

Un hijo que había atentado contra la corona y, lo que era aún peor, contra los intereses de su propia familia.

- " No digas eso... puedes estudiar o leer algún libro de la biblioteca" – comentó el guarda mientras se encaminaba hacia la puerta – " o incluso apuntarte a alguna actividad ..."

- " Tal vez más adelante" – convino el joven con una leve sonrisa – " por cierto, ¿ cómo te llamas?"

- " Me llamo Ooe, encantado" – contestó el guarda mientras cerraba la puerta pero no sin antes sonreír al muchacho que, con los cabellos ensortijados, estaba aún sentado sobre la cama sin hacer.

- " Hmmm... Ooe" – musitó Jae con una leve sonrisa – " tal vez este lugar no vaya a ser tan aburrido después de todo...".

FIN?