CAPITULO 24

6.2K 336 7
                                    

“4 meses después”
Ha pasado cuatro meses desde nuestra boda y al principio se sentía muy raro tener un anillo en mi dedo las 24 horas del día, pero luego me acostumbre, así como me acostumbre a vivir con Nathan.
Después de que Nathan me dejara en la cocina con los chef, estaba tan furiosa que le ignore el resto de la boda. Nathan intento pedirme disculpas demasiadas veces pero yo seguía ignorando hasta que al final de la boda, cuando fue nuestra última foto, nos tocó besarnos y ese beso fue tan mágico, tierno y apasionado que arreglo nuestra pelea.
- Amor vamos a llegar tarde a la consulta con el doctor - grita Nathan desde la sala, miro la hora y es verdad, vamos a llegar tarde a la cita con el doctor Jason. Tomo mi bolso y bajo corriendo las gradas - Amor te he dicho millones de veces que no corras y menos en las gradas – reclama negando y mirándome con reproche. En estos cuatro meses Nathan ha estado más insoportable de normal, ha estado leyendo sobre el embarazo y me trata como si fuera una niña chiquita y casi no me deja hacer nada que me ponga en riesgo. Lo agradezco pero a veces se exagera.
- Y yo te he dicho millones de veces que yo hago lo que quiero - sonrió sacándole la lengua. Nathan me mira indignado y sonríe descaradamente.
- Te recuerdo que ayer en la noche yo era quién mandaba - sonrie con superioridad y siendo mis mejillas rojas. Nathan se ríe de mi y se acerca a mi cuerpo - Te amo Alice - une nuestro labios en un delicioso beso. Al separarnos salgo corriendo de la casa con dirección al auto. Amo darle la contra a Nathan. Mientras más me prohíba correr.... más voy a correr - Alice..... por amor a dios no corras - grita desesperado desde la casa mientras observa como me alejo corriendo y haciendo caso omiso a sus palabras - Dios que hice para merecer esto - susurra mirando al cielo.
- Muévete Nathan o llegaremos tarde - grito sentado desde el puesto de copiloto.
Nathan maneja y cantamos como locos, después Nathan pone música de Mozart, según el esa música le hará más inteligente s nuestro bebé.
- Hola chicos ¿Cómo han estado? – saluda Jason al vernos entrar a su consultorio y le devuelvo el saludo sonriendo, le cuento como he pasado este mes y Jason me escucha atentamente - Alice desde ahora te costará mucho más trabajo hacer ciertas actividades como dormir, atarte los cordones o agacharte a recoger cosas del suelo. Desde este mes probablemente tus pies y tobillos se hinchen, además por el aumento considerable del peso y longitud de tu bebe se presionara contra tu vejiga y tendrás frecuentes ganas de orinar.
- Ya quiero que salgas - susurro sobando mi abultado vientre
- Tranquila Alice el parto ya se acerca- anuncia Jason sonriéndome y Nathan me abraza de la cintura – Vamos a ver cómo sigue el bebe - ordena y le seguimos.
Me pongo el gel y el doctor comienza a pasar la máquina por mi vientre y nos informa que todo está perfecto con nuestro bebe y es un alivio, quiero que mi hijo o hija nazca sano y fuerte, jamás me imagine que tener a un bebe en mi vientre fuera tan hermoso obviamente omitiendo las náuseas y vómitos, pero lo demás es genial, la primera patadita de mi bebe fue la más hermosa. Jason termina de examinarme y sale del cuarto para darnos privacidad y pueda limpiarme y vestirme. Cuando regresamos Jason nos pide que tomemos asiento
- Su hijo o hija está en perfectas condiciones - informa Jason sonriendo al igual que nosotros. Decidimos que no queremos conocer el sexo de nuestro hijo o hija hasta que nazca.
- Eso es genial - exclama Nathan entusiasmado y hablando por primera vez en toda la consulta
- Si y es gracias al trabajo y dedicación que le dan al bebe, Alice solo te diré que sigas tomando las vitaminas y batidos de proteínas – comenta mientras escribe en su computadora
Agradezco al Jason y me recuerda que la próxima cita es en un mes. Comienzo a esperar a que Nathan se despida del doctor pero en vez de eso solo sonríe sin mostrar los dientes y me jala fuera del consultorio.
- Insisto Alice, tú le gustas a ese doctorcito - afirma un poco molesto
- Nathan no otra vez – exijo suplicante siempre tenemos esta conversación después de cada cita con el doctor Jason – Tu sabes que solo te amo a ti-
- Y si cambiamos de doctor - sugiere mirándome con súplica. No puedo ceder en este punto del embarazo ya tengo siete meses y nuestro bebé esta a semanas de nacer. Entrelazo nuestras manos y apretieto su mano mientras caminamos a la caja para pagar la consulta, nos acercamos y la chica que cobra es la misma que no dejaba de ver a Nathan. Me detengo en seco y le digo a Nathan que yo pago esta consulta, para mi suerte Nathan no se opone y acepta extrañadado. Camino a caja pero Nathan no suelta mi mano y viene conmigo a pagar. Este no era plan, se supone que Nathan tenía que quedarse alejado se la caja.
- Buenos días en que puedo ayudarte - le pregunta la chica observando solo a Nathan.
- Venimos a pagar la ecografía de nuestro bebe - suelto y le doy una mirada amenazadora.
- Son cincuenta dólares - avisa mirando a Nathan y él le entrega el dinero. Esperen iba a papar yo, le lanzo una mirada de reproche a Nathan y el me sonríe son superioridad. Debi imaginarme que no me iba a dejar pagar, según Nathan yo ya tengo al bebé en mi vientre y él quiere pagar las consultas para sentirse más únido a nosotros. Raro y muy loco pero así es Nathan. Caminamos en dirección de la salida del hospital y mi querido esposo comienza a reírse a carjadas. Lo observo intrigada y descifrando que ha pasado para que se ría de esa manera. Busco a mi alrededor algo gracioso pero no encuentro nada.
- Embarazada celosa - susurra en mi odio y se sigue riendo.
Entonces yo soy lo gracioso. El maldito se esta burlándo de mi. Indignada lo fulminó con la mirada para que deje de reírse.
- No me molestes. Has silencio o mañana no te despiertas - amenazo aparentando estar enojada y Nathan deja de reír. Sonrio triunfal me encanta cuando Nathan hace lo que digo.
- Te ves tan caliente cuando estas celosa y enojada - susurra en mi oído y besa mi cuello dejando una marca en el - Estas para comerte enterita mi amor - ronronea en mi cuello. Pones sus manos en mi cintura y lo agradezco porque siento que el cualquier momento me desplomare - Pero primero tenemos que alimentar a nuestro bebé - ofrece cambiando de tema y deposita un sonoro beso en mi mejilla .
- Siiii vamos a comer, tengo hambre - festejo aunque yo quiero que me coma primero. No no no..... no puedo pensar en eso o me calentará. Sonrio feliz y Nathan abre la puerta para que suba al auto.
- No es novedad - inquiere burlón al subir al auto - Y dime mi amor ¿Qué se te antoja?- pregunta mientras maneja y me lanza una mirada pícara.
- Quiero una deliciosa lasaña - suspiro imaginandome en una deliciosa lasagna frente a mi y escucho que mi estómago ruge
- Okey pequeña pero te tendrás que comer una ensalada o no hay trato - sentencia y lo miro mal – Y después harás un poco de ejercicio – negocia y abro los ojos como platos
Que ni piense que yo voy hacer ejercicio, puedo aceptar a que me obligue a comer una ensalada pero jamás haré ejercicio.
- Tu solo maneja cariño - ordeno y me concentro en poner música

Amigo Con Derecho a ¿MALTRATARME?Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang