Unidos por Selene

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La noche era tranquila, la luz de la luna acompañada por las estrellas se adentraba por la ventana abierta. Un suave canto se escuchaba mientras una figura femenina caminaba de un lado al otro.

Fue cuando un estilo de cosquilleo de cascabeles llamó su atención volteando la mirada y una hermosa sonrisa decoró su rostro pálido mientras se acercaba a la ventana. Pronto pudo ver como se acercaba a ella un pequeño conejo gris con la pancita, pecho y boquita blancas al igual que con un bello dibujo mas oscuro en su lomo y frente. Los ojos verdes del pequeño animal fueron a la dama que se acercaba a el con la misma bella sonrisa, con su mano le rasco un poco la barbilla y cuidadosamente le quitó la bolsita que estaba en su espalda.

-Gracias pequeño- Hizo eco la delicada voz despidiendo al pequeño animal de largas orejas que se fue saltando.

Con la suave melodía resonando en la habitación la dama se alejó de la ventana hasta llegar a un escritorio amplio de marmol blanco el cual a un lado tenia adherida una máquina de coser.

Fue desenvolviendo la bolsa hasta dejar en su mano un muñequito, de piel colorada con pecas en el rostro, grandes ojos verde césped y ligeramente largo cabello castaño. Sus ropajes se basaban en una camisa verde de manga larga con un chaleco de piel café, pantalón oscuro y botas felpudas cafés por igual acompañados por una expresión que mostraba timidez e inseguridad.

Encendiendo una luz cercana al escritorio abrió un estuche cercano con distintos accesorios. Tomó asiento frente a la mesa acomodando su larga falda de tonos celestes y blancos mientras dejaba cuidadosamente el muñeco en el escritorio. Estuvo viéndole unos momentos antes de sonreír y ponerse manos a la obra luego de recogerse las mangas. Tomando al pequeño muñeco poco a poco le fue desvistiendo, las botas, el chaleco, el pantalón y la camisa, incluso le quitó la parte de su cabello dejando allí la delicada figura del muchacho de piel pecosa.

Separando la parte de atrás de la cabeza pudo ver el interior donde estaban adheridos con una pequeña masa de cristal. Tomando un estilo de paletita del estuche de tono plateado fue raspando cuidadosamente la masa hasta que los dos ojos verde césped, que mostraban muchas emociones negativas, cayeron sobre el marmol.

-Lo siento pequeño, pero ese rostro no debería tener esos ojos- Comentó la dama con una sonrisa antes de poner al muñeco sobre un pequeño conjunto de telas negras y se deslizó sobre la banca a un lado donde estaba una gaveta.

Al abrirla se podían ver multiples conjuntos de ojos de vidrio. Sin dejar de cantar fue viendolos atentamente hasta encontrar los ideales. Verdes cual esmeralda llenos de vida. Cerró la gaveta y fue a donde estuvo antes. Para cuando llegó notó que su hermano había cambiado un poco al morenito. Una parte de su pierna izquierda no estaba, se notaba un poco mas alto al igual que fornido.

¡Ese tonto rubio!

Rodando los ojos soltó una suave risa antes de tomar de nuevo al muñeco sin ojos, a la vez que del mismo estuche sacaba dos pequeños tubos de masa de color salmón. Con cuidado los fue amasando hasta formar algo como una serpiente de esas que hacen los niños con la plasticina. Luego de cubrir el alrededor de cada uno de los ojos de vidrio con una de las serpientes salmonadas,  tomando un palito con un circulito en la punta plateada. Acomodó los ojos de esmeralda en las cavidades respectivas y luego fue acomodando la masa con el pequeño palito.

Una vez listo volvió a poner la cabeza en su lugar reacomodando el ajuste y cerró la cabeza. Ahora el muñeco tenía una alegre mirada llena de sentimientos de lealtad, justicia y alegría, como debía ser.

-Mucho mejor-

El siguiente pequeño cambio que hizo fue luego de tomar un pequeño pincel, y en un pequeño círculo de plástico combinó unas pocas gotas de pintura hasta formar el color de piel de su muñeco. Luego de forma delicada fue pintando un par de pecas de su cuerpo haciéndolas desaparecer, y una vez estuvieron varias escondidas dejó el pincel a un lado.

One-Shots Kuban, Hiroguel / Higuel Y Hijack / FrostcupWhere stories live. Discover now