One-Shots Kuban, Hiroguel / Higuel Y Hijack / Frostcup

El turno nocturno

La noche era fría y seca, cosa curiosa considerando las tormentas que se habían estando presentando ultimamente. Las luces de la carretera cercana al bosque estaban iluminadas y dejaban ver una buena parte de todo. Especialmente una gasolinera resaltaba entre ese grandísimo montón de NADA mas que árboles.

Sentado al otro lado del mostrador yacía una figura juvenil, un muchacho castaño y pecoso con ropajes un poco abrigados el cual permanecía con su teléfono en una mano, su cuaderno de dibujo en el regazo y un lápiz en la otra. Básicamente se dedicaba a dibujar esperando a que llegara su siguiente compañero que se ocupara de la tienda y poder irse. Aunque aún faltaban varias horas para que eso pasara.

Hiccup permanecía tatareando a sus adentros en el silencio frío cuando de repente este se vio aturdido por el ruido de la puerta abriéndose con el sonido de las campanillas. El muchacho de inmediato levantó la mirada para ver de quien se trataba...

..Pero no había nadie allí.

Confuso dejó su cuaderno a un lado y se levantó de la silla intentando tener un mejor ángulo. Pero aún así no podía ver nada. ¿Ok? Eso era raro. Su mirada se fue paseando por la tienda de un lado al otro cuando notó algo pequeño y negro frente al escritorio haciendole bajar la mirada.

-¡Wa!, ¡Por Odín!- Exclamó sorprendido.

Frente a él yacía una pequeña infante. Revoltoso y un poco largo cabello de azabache que definitivamente no se peinaba muy seguido. Sus ojos almendrados eran difíciles de intentar leer ya que tenían la mirada perdida. Su cuerpo delgado estaba cubierto en una pequeña parte con un uniforme de colegiala japonesa, de esos que parecen de marinero con alta falda y blusa corta con un moño rojo, al igual que con botas negras cosa que llamó su atención.

Un minuto... Eso abajo de su nariz... ¿Era tierra o sangre?

-Em... ¿Puedo ayudarte?-

Sin respuesta. La niña solo estaba viendole fijamente perdiéndose de vez en cuando en el alrededor.

-L...Llamaré a la policía-

-D... ¿Dónde está el baño?-

-Oh... Por allá en la esquina-

Esa repentina voz le tomó por sorpresa, era una voz suave y baja aunque con poca emoción. Y tambien, una vez así pudo notar que de hecho se trataba de un chico. ¿Por qué estaba ese niño usando uniforme de chica que además estaba todo sucio?

-¿Estas seguro de que no necesitas ayuda?-

De nuevo, sin respuesta. El pequeño tan solo se fue caminando a donde el Haddock le indicó y este no desaprovechó la oportunidad para llamar a la policía.

-911, ¿cuál es su emergencia?-

-Hola, estoy trabajando en la tienda de la gasolinera Brookwood junto a la reserva de Berk y una... Un pequeño niño acaba de entrar. Esta todo sucio y callado, usando un uniforme de chica y es muy tarde... Estoy algo inquieto a decir verdad...-

¿Se había quedado callada la operadora o era una falla de señal?

-¿Hola?-

-¿Está diciendo que el niño tiene uniforme femenino y acaba de entrar a la gasolinera?-

-Eh... Si...-

Apenas pudo terminar de afirmar cuando un grito le hizo sobresaltarse. La pequeña figura con pelo negro salio corriendo del baño aunque se tropezó a medio camino cayendo al suelo algo lloroso.

-¡Por Odín!, ¡¿Qué te pasó!?-

Dejando caer el celular Haddock saltó al otro lado del mostrador para ir con el pequeño nipón que yacía en el suelo.