siete

12.8K 658 114
                                    

—Disculpe señora, me tengo que ir, un gusto conocerla—me acerqué un poco para darle un beso en la mejilla, pero ella me dio dos más, ya que en Italia son tres. Antes de que pudiera decir algo me di la vuelta y encaminé para salir.

—¿Como te fue...

—Bien ma—la interrumpió Paulo, vino hasta mi con diversión y una sonrisa de oreja a oreja—Roma.

—Dame la valija porque juro que te mato delante de tu mamá—modulé por lo bajo cuando se acercó, negó con una sonrisa.

—Que densa que sos cuando querés, novia—remarcó y subió las escaleras, miré para la cocina donde se encontraba su madre distraída y rápidamente lo seguí. Estábamos por el pasillo y empezó a caminar un poco más rápido para cerrar la puerta, me apuré y lo alcancé.

—¡La valija Paulo!

—¡Me haces mal boluda!—se quejó llorisqueando y me hizo puchero.

—¡Déjate de joder y dame la valija!—elevé la voz y lo solté cuando entramos a la pieza.

—Eso me dolió, mala—soltó un suspiro y se sobó el brazo, quería llorar de la histeria que tenía encima, le pegue en el pecho al recordar lo que había hecho minutos antes—¡Pará loca!

—¡Te voy a matar idiota! ¡¿Como vas a decirle a tu mamá que soy tu novia?!—le grité, este me agarró de las manos impidiendome volver a pegarle para empujarme con su cuerpo y hacerme caminar hacia atrás. Seguí gritando ya que me tenía agarrada de las muñecas.

—Relajate un toque y contá conmigo, uno...dos...respirá—habló divertido mientras apretaba un poco su agarré.

—¡Paulo!—grité y antes que de pudiera continuar me tiro en la cama con el encima. En un movimiento rápido me soltó la mano y agarro un almohadón para ponerlo en mi boca, agarro mis manos nuevamente y con su boca hizo presión en el almohadón para que no lo moviera.

—Calmate nena.

—¡Sácame esto imbécil!—me quejé y sentí como presionó más fuerte su boca haciendo que estuviéramos muy cerca—¡Paulo!

—¿Te vas a relajar?

—¡Sí, pero soltame!

—Bueno, calmate y dejá de gritar—bajó la presión del almohadón y dejé de moverme para poder recuperar la respiración, estaba muy agitada—Intensa.

—¡¿Podés salir de encima?!—llorisqueé—¡Pesas mil kilos!

—¿Me estás diciendo gordo?—preguntó indignado, suspiré y me moví para que me soltase las muñecas cosa que fue en vano—Me reviento jugando al fútbol para que vos vengas y me digas que estoy gordo.

—¡En ningún momento te dije gordo pero pesas más que yo nene! ¡Encima sos un asco!—chillé haciendo una mueca al recordar que estaba todo sudado provocando una risita de su parte.

—Ya me limpié y no estoy gordo—me recordó nuevamente.

—No te dije gordo.

—¡Una ballena pesa mil kilos!

—¡Por qué pesas idiota!—me quejé y volví a moverme, fue en vano ya que estaba a horcajadas de mi cuerpo—¡Dale salí!

—¿Vos tenés un problema? Déjate de gritar y calmate porque te tengo acá hasta mañana—antes de volver a quejarme, solté un gran suspiro para calmarme, moví un poco mis muñecas para que me soltase pero no lo hizo.

—Ya estoy calmada, soltame y dame la valija—apreté un poco la mandíbula, estaba estresada.

—Tu cara no dice lo mismo, me miras feo.

—¡Por qué sos horrible!

—¡Mentira!—se quejó y yo me quise reír al ver su cara de indignación—¡Encima que me decís gordo no te voy a permitir que me digas horrible!

—Qué ego papito—suspiré y me moví un poco, ya me estaba resultado bastante pesado—¡Mis cosas! ¡Me quiero ir!

—¿Y que me das a cambio?

—¡¿Encima de que me agarras las cosas me pedís algo a cambio chorro!?—chillé y antes de que pudiera seguir haciéndolo me cayó de una manera que no espere ni preferí que fuese el almohadón ya que me cayó presionando su boca junto a la mía.

• • •

Estuve un poco colgada en esta nove pero acá está el capppp❤️

heal ; paulo dybalaWhere stories live. Discover now