dieciocho

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Roma
Costa Amalfitana, Italia.

Pasamos las puertas sensoras del aeropuerto, y me puse de puntillas para visualizar a mí tía junto a mí prima quienes no habían venido a recibir.

El gesto de unas manos me llamó la atención, bajé un poco la vista y me encontré con las dos chicas, agarré la mano de Paulo y lo arrastré hasta allí.

—Hola tía—saludé con una sonrisa y acto seguido la abracé, hace bastante tiempo que no la veía junto a mí prima, Sarah—¿Todo bien?

—Sí Ro, todo bien ¿vos?—respondió con una sonrisa, la cual me contagio, asentí—¿Y él es...?

—Ah sí, perdón. Es el Paulo—lo presenté con una sonrisa bien amplia, el se acerco para darle un beso a mí tía y a mí prima.

—Un gusto, soy Marta y ella Sarah—señaló a su hija, desvío la mirada de el hacia mí—¿Es tu novio?

Abrí los ojos de par en par y miré a Paulo, el cual me miraba con una sonrisa esperando mí respuesta.

—Yo em...sí—contesté con las mejillas sonrojadas, el brazo del cordobés se posó en mis hombros y me acerco a él para darme un beso.

—¡Que lindo Ro! ¡Felicidades!—gritó mí tía bastante exaltada haciendome reír un poco—Bueno vamos que tu tío nos está esperando en el auto y sabes cómo es que se pone insoportable.

Ambos asentimos riéndonos y emprendimos camino hasta el parking que se encontraba en la planta baja.

—Así que... ¿Soy tu novio?—preguntó el cordobés aún con el brazo sobre mis hombros, giré mí cabeza para mirarlo. Este estaba con una sonrisa, sonreí pero no le contesté—Dale, no te hagas la boba y contestá.

—¿El qué?—pregunté haciendome la desentendida, reí al ver que entrecerró los ojos y me acerque para darle un casto beso en los labios—¿Eso contesta a tu pregunta?

—No me quedo muy claro todavía—acotó con una sonrisa lo que me hizo mirarlo con ambas cejas levantadas.

Me paré en seco y pase mis manos alrededor de su cuello, para después de unos segundos cortar la poca distancia que había entre nosotros. Empezó siendo un beso tierno pero de a poco se iba intensificando, el introdujo su lengua y yo le permití que lo hiciera para que investigará todo mí cavidad bucal.

Cortamos el beso debido a la falta de aire, pero no pude ni recuperarme que ya tenía al ojiverde otra vez encima de mis labios dándome besos cortos.

—¿Viste que al final íbamos a ser novios?—cuestionó cuando se separó de mí, entrecerré los ojos haciéndolo reír y se volvió a acercar para besarme—Sos hermosa.

—No empeces a ser cargoso—avisé con el dedo índice, el me agarró la mano y me acerco hasta el para después posar sus manos en mis cachetes y llenarme la cara de besos—¡Paulo!

—Bueno, perdón. No todos los días me decís que soy tu novio—sonrió haciendome reír, esta vez fui yo la que se acercó para besarlo.

—Cuando lleguemos a la casa de mí tía, ¿querés ir a...

—Sí es con vos, voy a cualquier sitio—me interrumpió y antes de que pudiera responderle unió nuevamente nuestro labios.

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Díganme si no son hermosos? Estoy muy enamorada de ellos dos 😍

Lo único que vengo a dejar es que esta novela no va a ser muy larga, no creo ni que llegue a los 30 capítulos, así que disfrutenla al máximo.

Nos vemos en el próximo 💗.

heal ; paulo dybalaWhere stories live. Discover now