Capítulo 34| La casa de los sustos

1.4K 133 11
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

A I L E E N⚡️⚡️⚡️

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

A I L E E N
⚡️⚡️⚡️

La feria era enorme con una gran carpa donde se mostraban show con personas haciendo acrobacias y diversas actuaciones que personas normales sin entrenamiento no podrían realizar. Vimos el espectáculo completo y tras salir de allí montamos las diversas atracciones de la feria, algunas fueron divertidas, otras me dieron miedo. Algo que me levanto mucho el ánimo fue ver a Ylenia tan contenta, desde que tuvo ese incidente en el liceo con su cola de sirena no había podido volver al mundo mortal y sé que extrañaba esto.

—Tierra llamando a Aileen —un chasquido frente a mis ojos me hizo reaccionar, parpadeando, miró a Emma que estaba frente a mí agitando sus manos frente a mis ojos —¿Rubia escuchaste algo de lo que dije? —pregunta la castaña con una sonrisa.

—Lo siento, pero no, ¿qué decías? —respondo acomodando mi cabello hacia atrás y me llevo un puñado de algodón dulce a la boca. Esta cosa era deliciosa, un gusto dulce que se te deshacía en la boca, no había probado una cosa así antes.

—¿Que si querías entrar conmigo a la casa de los sustos? —repite la interrogante Emma, ya habíamos subido al tren de los sustos, pero una casa me parecía mucho más llamativa.

—Sí, me encantaría —respondo con una sonrisa. Mi amiga no perdió el tiempo y me tomó del brazo y me arrastró por la feria hasta que paramos frente a una casa enorme, vieja y sucia. En las ventanas salían espectros que deberían ser terroríficos, pero no lo eran, daban risa.

—Dos entradas por favor —pide Emma en la casilla a un chico con la cara pálida de pintura, con los ojos pintados de negro y labios cubiertos de labial roja. El chico nos entrega dos boletos, recibe el pago de mi amiga y luego desaparece. La puerta se abre haciendo un chirrido espantoso.

Nos adentramos en la casa, todo estaba muy oscuro, apenas veíamos por las pequeñas luces rojas y de otros colores que parpadeaban, dejando lapsos de apagones donde eran aprovechados para hacer aparecer carteles con fantasmas o brujas que gritaban y te sacaban un susto. Telarañas falsas por todos lados te pegaban en la cara y arañas de tamaños ridículos te caían en la cabeza. Junto a Emma avanzamos tomadas de las manos, el chirrido de una puerta abriéndose nos sobresalta y caminamos hasta el fondo del pasillo, del techo cayó una mujer con un vestido de novia y tijeras en su vientre. Emma gritó tan fuerte que tuve que cubrir mis oídos, solté su mano viéndola correr despavorida por el pasillo, dejándome completamente sola con un cadáver de papel maché colgando del techo.

La hija de Zeus y Hera [1.2]Where stories live. Discover now