EL Círculo ( Editando Y Corrigiendo)

Capítulo 2 Brujas

- Ella es la señorita Drake, la hija de una de las familias más importante de magos, espero que la traten como una compañera más, eso incluye no menospreciarla por su raza, no dejarla de lado y sobretodo y más importante no tratar de matarla o herirla. Si veo un solo rasguño en su cuerpo... - todos palidecieron al contemplar esa mirada escalofriante que de vez en cuando se apoderaba del rostro del anciano director.

- Pero señor ¿como vamos a?...

- Eric, ven,daremos un paseo - le interrumpió señalando la puerta .

- Pero...

- Eric - repitió con dureza haciendo que el chico mirara al suelo antes de seguir al anciano.

Recorrieron los interminables pasillos repletos de tapices, armaduras y cuadros hasta llegar a una zona hecha de cristal sobre un enorme jardín de forma circular surcado por decenas de caminos empedrados, salpicados por bancos donde descansaban los alumnos y pequeñas fuentes para pájaros. Hacia la mitad se hallaba un enorme mosaico con el dibujo de un colibrí y una flor. En el centro de la misma se encontraba una enorme fuente adornada por extrañas bestias.

- Siéntate - le pidió señalando un banco de piedra. El muchacho obedeció y el director lo imitó.

- ¿Cómo has podido...? - preguntó apretando los puños lleno de ira.

- Eric, sé que has sufrido mucho por las de su especie pero ellas también han sufrido. Por nuestra culpa han perdido a miles de los suyos. Es la única manera de que...

- ¿La única manera de qué? ¿De qué nos maten? - le gritó a punto de llorar por la rabia y la impotencia que sentía en ese momento

- ¡No, es la única manera de impedir una guerra! - explicó alzando ligeramente la voz-Lo siento, no debí haberte gritado - le dijo colocándole una mano en el hombro.

- ¿Cómo una guerra? Creía que ya se habían vengado de nosotros.

- El ataque a la capital de hace cinco años solo fue un ajuste de cuentas, imagínate que pasaría si se repitiera lo que pasó aquella noche solo que durante años. La humanidad no está lista para algo así,otra vez - esto último lo dijo tan bajo que Eric no se percató. Los dos se quedaron callados durante unos minutos antes de que el muchacho decidiera hablar.

- ¿Y qué pinta esa mocosa en todo esto? - le preguntó Eric rompiendo ese incómodo silencio

- Es una prueba de fe, su familia quiere demostrar a las demás que la humanidad no es un monstruo.

- Entiendo,pero no esperes que sea su amiguito - dijo poniéndose en pie.

- No espero que lo seas, solo que te comportes

Mientras tanto en la clase la tensión iba en aumento debido a la pequeña bruja

- Bien, veo que tenemos una alumna nueva ¿podrías presentarte a la clase?

- Creo que ya me conocen pero está bien - le dijo levantándose de su pupitre y recogiendo la tiza. La muchacha escribió su nombre acompañado de un sombrero en punta.

- Hola, mi nombre es Sophie y soy una bruja, encantada de conoceros.El maestro palideció y comenzó a temblar ligeramente antes de darse la vuelta hacia la pizarra.

- Ahora que te has presentado te explicaré como va el curso ¿ va,... vale? Esta academia está hecha con el fin de cazar - ("no digas brujas, no digas brujas" se repetía una y otra vez a si mismo) - seres fantásticos peligrosos o exóticos mientras más cacéis más experiencia conseguiréis y por lo tanto más posibilidades tendréis de subir de nivel, al hacer esto podrás aumentar un punto en la estadísticas que prefieras.

- Interesante - murmuró observando el dibujo que había hecho en la pizarra de un chico persiguiendo a un hada con un cazamariposas.

- No quiero ser maleducado pero ¿de qué clase eres?

- ¿Clase? - le pregunto confusa

- Sí, en nuestro mundo existen diez clases claves aunque con la que está cayendo algunas estén  fuera de nuestro alcance pero eso no quita que aún así haya muchas variantes y combinaciones. Clérigos, nigromantes, pirománticos, caballeros,soldados, espadachines, asesinos, rastreadores, cambia formas y sombras.

- Soy bruja - dijo secamente.

- Sí,es verdad, es una bruja - masculló nervioso antes de que se le cayera la tiza al suelo.Incluso a los profesores parecía incomodarles la presencia de la joven bruja aunque era comprensible.

- ¿Puedo unirme a la clase? - preguntó Eric desde la puerta

- Por supuesto señor Binzor - le respondió aun nervioso señalando el pupitre antes de agacharse para buscar la tiza.Esta se había quedado bajo la mesa de Sophie al darse cuenta de esto decidió levantarse y abandonarla. Ninguna tiza merecía que perdiera su mano.

- Espero que el viejo no haya sido muy duro contigo - susurró Lucía desde la mesa de al lado

- Solo quería charlar, eso es todo -le aclaró mientras escuchaba las torpes explicaciones del maestro.El resto de la hora les describió una criatura extraña de enormes tentáculos y ojos rojos pero terminó dibujando una especie de pulpo medio deforme con los ojos descuadrados y la cabeza más pequeña que los tentáculos,... en otras palabras un completo fracaso.

Unas horas después cuando la luna inundaba el cielo unas sombras se deslizaron silenciosamente por los lúgubres pasillos en dirección a la biblioteca.

- Tiene que estar por aquí - murmuró un hombre rubio mientras hurgaba en las interminables estanterías, pasando su dedo índice por hileras de polvorientos libros hasta finalmente detenerlo sobre uno cuyo lomo estaba decorado con raíces plateadas, que desprendían un mortecino brillo

- ¡Lo encontré! - le gritó a una muchacha bajita que estaba apoyada en una estantería cercana.

- Bien, ahora solo necesitamos contrastar la información, ojalá estés equivocado - esto último lo dijo tan bajo que sus palabras se desvanecieron tras salir de sus labios.

- No es momento para ponerse histérica - le aconsejó apuntando a la enorme mesa en la que reposaban dos velas a punto de consumirse.

- Histérica ¿yo? No... que va, solo que no soy una pasota como tú - dijo mientras sacaba un taco de papeles de su maletín y los colocaba sobre la mesa.

- Bueno cuanto antes acabemos con esto antes podremos dormir - le recordó mientras bostezaba.

- Eso es lo único que te importa¿ dormir? ¿No te das cuenta de que el sello se podría romper en cualquier momento? - le preguntó indignada por su pasotismo que tanto le irritaba cuando se encontraban.

- Cotorra, te hubiera venido como un guante - comentó sonriente mientras la muchacha le sacaba la lengua en señal de desaprobación - veamos- murmuró ojeando el viejo libro y los documentos para finalmente apartarse de la mesa y bostezar - Bueno sí, estamos jodidos los señores de la plaga han sido vistos en varios épocas terrestres , esto se acaba. En unos años todos muertos - dijo mientras cogía el libro y lo guardaba en su gabardina para después bostezar por última vez y dirigirse a la salida, bajo la atenta mirada de su acompañante.

- ¿Dónde vas? Tenemos que hacer algo.

- Sí, dormir, el fin del mundo no me impedirá descansar mis ocho horas. ¡Buenas noches!