Capitulo 10

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Estaciona el auto y apaga el motor, mira por el espejo retrovisor y ve que tiene la misma expresión que cuando lo vio por última vez.

Sale del auto y abre la puerta, Connor aún mantenía la cabeza gacha, parece perdido.

—Vamos, muchacho, no te voy a dejar en el auto— dice Hank llevando sus brazos hacia Connor.

El androide lo miro y levanto sus brazos, Hank lo toma y lo levanta, con algo de esfuerzo. Connor abraza el cuello de Hank y apoya su cabeza en este, cerrando los ojos. Ese gesto altera a Hank, sintió su cara roja y su corazón latir muy fuerte.

Cierra la puerta, no sin antes colocar el seguro. Como puede, camina hacia su puerta, se sentía extraño llevar a alguien en brazos mientras camina hacia su casa, lo único que pide es que ningún vecino lo esté viendo, que dirían de él.

Llega al pórtico de su casa y puede escuchar los pasos de su San Bernardo, se queda pensando el como haría para entrar a la casa. Por un momento pensó en dejar a Connor en el suelo, pero parece que el androide no quiere soltarlo. Incluso, se acurruca más en su cuello.

Así que Hank, al notar que Connor se mantiene firme, afirmado de su cuello, puede sacar la mano que está apoyada en la espalda baja del androide, buscar las llaves en su bolsillo y abrir la puerta.

Entró con cuidado para no chocar nada contra la cola de Connor, cierra la puerta, enciende la luz y Sumo, comienza a olfatear la cola de Connor, quien de un susto al sentir algo abraza más el cuello de Hank.

—¿Qué es eso?— pregunta Connor asustado mirando hacia el San Bernardo.

—S...Se llama Sumo— dice Hank apenas, ya que Connor le apretá muy fuerte —Eso duele— dice Hank quejándose.

Connor al notar que le está haciendo algo de daño a Hank, suelta un poco su agarre.

—Y ¿Y hace daño?— pregunta Connor menos asustado.

—No, sólo te está conociendo— dice Hank, y camina hacia el sofá, donde deja sentado a Connor.

Sumo seguía olfateando a Connor, quien parecía que le volvía a asustar ese gesto del animal. Hank nota eso y acaricia la cabeza de Sumo.

—No te hará daño, le llamas la atención, eso es todo— dice Hank con una sonrisa.

Connor al ver el gesto que hizo Hank, quiso imitarlo y acerca su mano a Sumo para darle cariño en la cabeza. Sumo mueve la cola y acepta la caricia de Connor.

Hank se levanta y va hacia la cocina, sus tripas no para de crujir, abre el refrigerador y no hay mucho, mira la estancia y ve un paquete de arroz. Se haría arroz con huevos revueltos.

Se prepara la comida, y mientras ocurria eso, sentía una mirada en su espalda. Sabe muy bien quién es.

Cuando termina de cocinar se dirige hacia la sala, donde enciende la televisión y se sienta al lado del androide. Es inevitable, él quiere evitar cualquier contacto con el androide, pero aún podía sentir su mirada sobre su persona, y eso lo mantenía nervioso.

No sé podía concentrar, en la televisión está dando un documental de los inicios del acuario, parece que la muerte del director del acuario, lo hizo otra vez famoso.

—¡Deja de mirarme!— grita Hank ya perdiendo la paciencia.

Connor da un brinco y mira preocupado a Hank, ya que estaba viendo la televisión, y eso Hank se dio cuenta. Solo es su imaginación el que estaba siendo observado por Connor, y se sintió idiota, ya que había preocupado y asustado al androide.

En El Acuario [Hank x Connor]Where stories live. Discover now